"Realmente te odio, Yoshiro Kazuo."
"Yo sé cuánto me amas, Ken Takakura.. "
୭ㅤ𝆬ㅤ👾ㅤִㅤ❜ㅤ᛬ㅤYoshiro Kazuo es un joven exorcista que carga con el peso de su legado familiar y un oscuro pasado que lo marcó profundamente. A pesar de su naturaleza amigabl...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
‧₊˚ᯓ◟ᡴꪫㅤ..
Soltó a Okarun en cuanto notó que había vuelto a la normalidad al igual que Ayase, esta le pidió a Jiji que la desatara. Su hermano mayor había desaparecido de repente, cuando Evil Eye seguía mirando al gusano asesino, ambos se miraban tan fijamente que parecía un juego de miradas.
- Perdón.. Perdón por eso, Yoshiro-san. - Dijo Ken mitandole y sintiéndose mal por haberle causado alguna que otra herida en su intento de autolesión. La turbo-neko les ordenó que no miraran al ojo maligno, explicó que su mirada hace que la gente se volvieran loca y que los llevaba al suicidio.
- ¡¿Suicidio?! ¡Así que es lo mismo que las ondas psíquicas de ese gusano! - Dijo Ayase mirando a ese extraño ser.
- No pasa nada, está bien. Ahora.. creo que-.. - Le respondió al más bajo, pero fue interrumpido por sí mismo al caer en una especie de portal que fue gracias a la orden que Yoshiro Usagi, el hermano mayor de este, le dió a Evil Eye.
- ¡Yoshiro! - Gritaron los demás preocupados. Ni la rapidez de transformación de Okarun no fue suficiente para evitar esto.
- No se preocupen por él, tiene un asunto con su hermano que atender.. ahora, concéntrense. - Habló la turbo-neko, quién se mostraba completamente enojada y algo preocupada por el castaño.
- No entiendo nada, pero el gusano parece que dejó de moverse. ¡Detruyelos, Okarun!
- Este chico ya está preparado. - El mencionado le respondió con un tono grave aunque un poco molesto por lo que estaba ocurriendo.
Cayendo al vacío y desesperado miró a su alrededor, no sabía que hacer, ¿iba a morir? Así nomás? Y por una caída? Con una expresión sería miró hacia abajo y cerró los ojos al imaginar que iba a ser su fin, pero nuevamente un portal apareció e hizo que cayera en una mesa rompiéndola. Se intentó levantar con cierta dificultad pero no pudo mantenerse de pie, así que se quedó de rodillas con las manos posadas en el suelo.
- Auch.. gracias diosito, yo realmente quería vivir. - Se quejó completamente adolorido, y levantó su cabeza al abrir los ojos para encontrarse en una casa. Agarró su espada, sentía el ambiente del lugar bastante pesado e inquietante. Se escucharon unos pasos acompañados de unas pequeñas risas y unas cuántas voces.
Kazuo no parecía para nada contento al haberse encontrado con su hermano mayor en un principio, al contrario, se le había visto muy molesto.
La casa en la que cayó comenzó a cambiar y a asemejarse más a la suya, fue tan extraño y confuso; como si se hubiera teletransportado, pero en realidad se trataba de una ilusión, cosa que no llegó a notar. Una descarga eléctrica que fue provocada por el gusano gigante hizo que gritara del dolor, aunque llegó a soportarlo. La casa pareció cambiar nuevamente a la normalidad, pero en cuestión de segundos volvía a ser la de antes, parecía casi como una dimensión que se distorsionaba.