Habit | Ziam

Prólogo.

Después.

Los gritos no cesan, escucha como Zayn sigue gritando, una especie de alaridos y sollozos que simplemente no paran, hay más gruñidos, hay más golpes y objetos quebrándose, él puede escuchar como los vidrios saltan, él cree que puede escuchar el dolor.

Entonces todo para, sus manos en los oídos bajan a su regazo, siente nauseas, cree que está apunto de vomitar, suspira varias veces intentando calmarse, pero lo hace tan bajo porque tiene miedo de que el señor, el padre de Zayn lo pueda escuchar desde donde está.

El silencio le afecta inmediatamente como llega, acostumbrado a los gritos de minutos antes, a Liam le comienzan a zumbar los oídos, pero él se niega a que los gritos vuelvan. Su corazón no deja de latir fuertemente, los dedos de los pies doblados y el sudor sigue bajando por su frente hasta su cuello.

Hay pasos, puede escuchar como alguien sube las escaleras y Liam se queda quieto, tan quieto y tan asustado que no se da cuenta que deja de respirar hasta que el aire le falta. Luego escucha como una puerta se cierra fuertemente y ya no hay nada más, parece como si los gritos y sollozos de hace un rato hubieran sido solo producto de su imaginación.

Liam no sabe cuánto tiempo pasa hasta que la puerta se abre, los pasos son tan tranquilos y lentos que ni siquiera se escucharon subir las escaleras, hay gemidos, gemidos dolorosos, la oscuridad sigue en toda la habitación, solo ve como una sombra delgada y alta pasa frente a él y luego una puerta se abre y la luz emana de ahí.

Escucha el agua cayendo, más gemidos, más gruñidos, sonido de cosas moviéndose y él sabe que es Zayn. Con el corazón aun golpeando su pecho fuertemente, se levanta del suelo, caminando con lentitud hasta la luz, parándose en el umbral es cuando él se quiebra, la coraza con la que estuvo trabajando todo ese tiempo se destruye como si le hubieran disparado solo una vez, las lágrimas llenan sus ojos y no puede evitar que un sollozo abandone su boca sin permiso.

Es Zayn, está tan lastimado, un ojo morado, su barbilla llena de sangre, su labio roto, Liam ve como su abdomen está lleno de manchas moradas, rojas y verde y otras con un poco de todo pues está sin camisa.

Liam piensa que Zayn está tan lastimado, y no solo físicamente.

Sus miradas se encuentran y aunque en la mirada de Zayn se refleja la vergüenza y la inseguridad, Liam solo puede pensar lo valiente que el chico es, pero su pensamiento cambia porque Zayn no solo refleja vergüenza e inseguridad, refleja algo intendible para los demás, porque solo Liam es capaz de entenderlo.