➤Capítulo 27.

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Liam se estremece en cuanto siente como unos brazos lo rodean, manos tan blancas como la nieve lo sostienen desde atrás y él solo se sorprende por el acto, tan sorprendido que sus ojos se abren.

"Te atrapé" Una suave voz susurra en su oído y Liam jura que podría reconocerla hasta en sueños, con la imposibilidad de poder olvidarla algún día. La palabra lo hace recordar tiempo atrás, hace años, cuando ellos estaban juntos, entonces el castaño se gira y se encuentra a Alek mirándolo con ojos grandes y brillosos y aun cuando no lo desea, su pecho se hincha, solo por el recuerdo.

"Uh..." Sus mejillas se ponen rojas y Alek solo le sonríe más, brackets adornando su boca. "¿Desde cuándo?" Liam dice, tratando de sacar un tema trivial.

"Hace un año" El pelirrojo suspira acercándose más, como si de alguna manera esperara algo del otro chico, pero el castaño solo atina a hacerse para atrás, casi tropezando, una mueca apareciendo en su rostro. "Liam debemos hablar"

"¿Sobre qué?, no creo..."

"Sabes a lo que me refiero, hablar sobre nosotros" El chico frente a él suspira, mejillas sonrojándose y Liam recuerda, él no puede evitarlo y no puede evitar sentirse mal.

"Alek no..."

"No, por favor" Cerrando sus ojos le implora "No digas nada"

"No hay un nosotros" El castaño susurra con vergüenza, jugueteando con sus dedos, su mirada fija en el suelo y siente una especie de culpabilidad creciendo en lo profundo de su pecho, pero piensa que es completamente normal que crea que hace mal, porque Alek acaba de llegar, tratando de desenterrar sentimientos y Liam no puede ceder, no puede ceder porque ahora quiere a alguien más "Estoy con alguien ahora" Y la forma en que lo dice es suave y sin embargo, parece quebrar al pelirrojo, su rostro deformándose de dolor, ojos inyectados en lágrimas y Liam solo puede tragar y seguir sintiéndose mal, pero no hay nada que él pueda hacer. "Alek lo sien-"

"¿Quién?" Es interrumpido bruscamente, incluso la forma en que el otro chico lo es.

"¿Qué?"

"El chico, ¿Quién es?" Liam se sorprende, mordisqueando sus labios porque realmente no quiere meter a Zayn en ello. "Liam..."

"Zayn, Zayn Malik" Suspira corrigiéndose "El chico que... que seguí el otra vez" Él espera algo en el rostro de Alek, algo que lo haga ver sorprendido o dolido, pero solo está parado viéndolo fijamente neutral, sus ojos siguen aguados pero no hay más expresiones que solo esa. "Yo lo siento tanto, Alek"

"Liam escucha..." Él está negando cuando el chico toma su mano, sus dedos calentándole la piel, va a reclamar, él va a oponerse al toque y decirle que todo el pasado ya quedó atrás, pero Alek lo está tocando como años anteriores lo hacía y no puede, Liam no puede alejarse. "Si el destino me puso frente a ti, fue por algo, tú y yo..."

"¿Qué está mal, bebé?" Y luego entra Zayn en acción, como si tuviera un olfato que oliera cada que Liam está con el pelirrojo, el moreno colocando una firme mano en su cintura mientras lo acerca a él, y es cuando el castaño se da cuenta de la diferencia de los toques, de la forma en que ambos lo llaman –bebé-. Porque con Zayn todo se siente natural y correcto y bien, y con Alek es diferente, completamente distinto, tal vez sean los años que han pasado, o tal vez es porque ya encontró a alguien que le de todo lo que necesita.

"Zayn" Liam jadea, sus mejillas poniéndose tan rojas y es como si de alguna forma lo haya encontrado engañándolo "No... nada, solo... estaba hablando con Alek, no es nada, nada" Y él quiere seguir repitiéndoselo, porque eso es lo que Alek se volvió, lo que ellos se volvieron desde que lo conoció, un nada.

Habit | ZiamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora