➤Capítulo 13.

7K 895 1.4K
                                    

Liam se siente reconfortado esa noche mientras duerme, y duerme tan malditamente genial que no recordaba la sensación que se sentía al amanecer cuando has tenido un buen descanso, su pecho ya no se siente cargado y sus hombros ya no se sienten pesados, Liam se siente como nuevo.

• • •

El brazo de Zayn permanece en los hombros del castaño hasta que llegan al Instituto, luego ellos deben separarse para ir a sus respectivos salones, Zayn se despide con un pellizco en la mejilla de Liam antes de besar las yemas de sus dedos y colocarlos en los labios del chico, es un acto totalmente estúpido y romántico y Liam no puede estar más feliz, porque Zayn se ha comportado tan gentil, tan amable, Liam simplemente no puede dejar de suspirar.

Cuando entra al salón algunas miradas caen sobre él lo cual le coloca incómodo, el busca su lugar respectivo, al final del salón en una esquina, el lugar usualmente le reconforta, Liam ama que casi nadie lo note, pero tiene sus desventajas, a veces él no puede ver bien que está escrito en la pizarra.

No se da cuenta que algo está mal, hasta que nota como unos chicos en la otra esquina lo miran mientras se susurran, están husmeando, y Liam odia que husmeen, él detesta que lo miren, él detesta esa horrible sensación que crece en su estómago tal cual virus letal cuando sabe que están susurrando sobre él, posiblemente riéndose de él.

Él intenta no parecer incómodo, entorpecido, tratando de no equivocarse al escribir o no tragar saliva de más, tratando de no sudar frío mientras mira a esos chicos de reojo. 

Liam no sabe que hizo mal.

El timbre suena tiempo después, y se pone de pie rápido para salir, caminando con cierta prisa a la puerta siente como alguien lo empuja, pero se niega a voltear hacia atrás, su corazón yendo rápido, comienza a asustarse cuando recibe otro empujón, es extraño el toque, el golpe le resulta más doloroso emocionalmente que físicamente y su garganta se cierra formando un nudo, Liam piensa que debe buscar a alguno de sus amigos o a Zayn, sí, él necesita a Zayn.

Le siguen por detrás sin embargo, voces susurrando y risas torpes y huecas que le hacen erizarse, está temblando y apunto de llorar cuando llega al jardín, buscando algún indicio de alguien conocido, él incluso piensa en Franklyn, pero no hay nada más que solo pocas personas, es cambio de clase por lo que duda que encuentre a alguien en realidad.

Pero Liam tiene suerte cuando ve una mata de rizos sentada a lo lejos, camina rápido cuando escucha a sus espaldas que alguien lo está llamando, la voz es cruda y grabe y no la reconoce, por lo que traga y estira las mangas de su suéter hasta poder cubrir sus nudillos.

Liam no piensa en girarse hasta que una mano es puesta en su hombro, es doloroso, el agarre es brusco.

"¡Liam!, ¿A dónde tan temprano?" Liam no reconoce al chico, no reconoce a nadie en realidad, quiere encogerse de hombros e irse, pero cuando lo hace otra pregunta lo asalta "¿Buscando a tú noviecito, eh?" 

Y es oficial, Liam se quiere desmayar.

"¿Dis-disculpa?" Su lengua se traba y sus mejillas se tiñen de rojo.

"Sí, ya sabes, Zayn, el famoso Zayn Malik, ¿Quién diría que finalmente alguien lo conquistaría?, siempre me pareció alguien..."

"¿Horrendo?" Dice otra voz.

"Yo diría no atractivo para las chicas, pero supongo que sí, horrendo también podría ser bueno" 

"Con permiso" Liam susurra, sus entrañas revolviéndose.

"¿Por qué te vas pequeño Liam?, ¿No te gusta que hablemos mal de tú novio?, dime algo... ¿Zayn besa tan bien como se ve?" 

"¿Qué?" La voz del castaño sale entrecortada, mientras respira rápido, él a penas puede sostenerse, sintiéndose mareado sus ojos se llenan de lágrimas.

Habit | ZiamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora