Habit | Ziam

➤Capítulo 9.

El casillero es cerrado de golpe, Liam se encoje en su lugar hasta que ve como Zayn le sonríe con satisfacción.

—Perdón—su voz sale en un susurro ronco y al castaño se le eriza la piel, retrocediendo unos cuantos pasos, sonríendole tontamente y asintiendo despacio—¿Qué clase tienes?

—Historia—Liam habla bajo, sus mejillas rojas mientras mira el suelo.

—Bien, me toca Literatura—siente la palma de Zayn empujarlo ligeramente por la cadera, manteniéndolo a su lado, un simple toque que pone toda su piel caliente y erizada, y aunque quiere levantar la mirada y notar sus brillantes ojos marrones, se limita a dar un suspiro largo, obligando a sus pies moverse sin tropezar hasta que ellos finalmente llegan al salón, quedándose afuera—Te veré más tarde, en la hora del almuerzo, yo compré... uh—entonces por fin sus miradas se cruzan, ellos pueden verse a sí mismo atontados y sonrojados, Zayn rasca su nuca un par de veces con el nerviosismo rebosando de su ser, su lengua parece adormilada, sin encontrar las palabras correctas para la explicación.

—¿Un qué?—los dedos de las manos de Liam jugueteando, casi balanceándose en su lugar.

—Bueno, es que... no es nada en realidad, pero está mañana estaba pensando en ti y te traje un-

—¡Liam!—una chillona voz exclama a lo lejos, ambos chicos girándose para ver como una pequeña y linda chica castaña de ojos claros se acerca a ellos a paso rápido junto con otra un poco más alta de cabello rubio.

—Hola...—Liam saluda con incomodidad a Franklyn, ella lo rodea con sus delgados brazos, aspirando el suave aroma que el castaño desprende.

—¡Te llamé!, le pedí a Niall tú número de teléfono y te llamé como cinco veces, estaba preocupada por ti, ¿Verdad Keyla?, es que, esa noche te perdí de vista, te desapareciste y ya no supe nada de ti—ella habla rápido, casi atorándose con la falta de aire, sus mejillas también están sonrojadas, pero aunque Liam admita que es bellisíma, nada se compara con un Zayn a media noche, bajo la luz de la luna sonrojado y con la respiración entrecortada, y Liam suspira ante el recuerdo.

—Estuve ocupado—su respuesta llega a sonar cortante y desinteresada, pero Zayn aún lo está mirando con ojos grandes y brillantes y ahora mismo no puede centrar su atención en alguien más que no sea el chico.

Franklyn por fin lo suelta, recorriéndose un poco, dándole la espalda a Zayn, hasta que se gira y la sonrisa en su rostro se ensancha, y a pesar de que la chica es amable, linda y sociable, Zayn le sigue teniendo cierto rencor.

—Hola Zayn, ¿Cómo has estado?—el pelinegro frunce su ceño, cruzándose de brazos mientras la mira con superioridad fingida.

—¿Acas-?

—¿Y quién es ella?— Liam corta a Zayn antes de que suene grosero, Franklyn se gira para mirarlo, la otra chica muerde sus labios, pareciendo ansiosa, nerviosa.

—Ella es Keyla, es mi mejor amiga, uh... Zayn ella es Keyla—el ceño fruncido de Zayn no se va en ningún momento y ni siquiera se toma el tiempo de mirar a la chica a su lado.

—Debo irme, Liam—el castaño asiente frenéticamente, acercándose a él con cuidado, sus manos se llegan a rosar y luego sin que Liam lo deje si quiera asimilar o esperar, Zayn lo abraza, su mentón descansando en el hombro del chico, mirando detrás de Liam como Franklyn los ve fijamente y sin querer, una sonrisa recelosa se formula en el rostro del chico, para luego irse con aires de victoria.

Dejando a un Liam anonadado, tan igual que Franklyn y la otra rubia de la cual desconoce el nombre.

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