En el encantador entorno de París, Elise, una apasionada librera del barrio latino, y Lucas, un arquitecto recién llegado de Bruselas, se cruzan en un momento inesperado que cambiará sus vidas. Mientras Elise vive rodeada de libros y poesía, Lucas e...
Holaaaa, en este capítulo verán como se añade un nuevo personaje que será muy importante para la trama!. ———————————————————————————— Sophie Lemoine: Edad: 30 años
•Sophie es la amiga que siempre está en el centro de la acción. Con su cabello oscuro y lacio, siempre perfectamente estilizado, y sus ojos grises brillando con curiosidad, es imposible no notarla. Su estilo es audaz y siempre a la moda, con un toque de glamour que la hace destacar en cualquier fiesta. Amante del drama y las historias jugosas, disfruta estar al tanto de todo y no tiene problema en añadir su propia chispa a las situaciones. No hay evento que se le escape ni rumor que no quiera compartir. Siempre está buscando el próximo gran chisme o el momento perfecto para crear algo memorable. Con una sonrisa traviesa y un sentido del humor afilado, Sophie es la amiga que te mantiene entretenida, aunque a veces se pase un poco con sus comentarios.
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Inspire este personaje en miii😁😁, es que ella es muy yo ———————————————————————————— Esa noche en Le Marais
Elsie jugueteaba con la cuchara de su café mientras las luces cálidas del café reflejaban el brillo melancólico en sus ojos. Frente a ella estaban sus dos mejores amigas: Sophie, elegante y siempre dispuesta a dar un consejo directo, y Camille, la talentosa fotógrafa cuyo enfoque en el arte parecía alejarla de los conflictos emocionales que, sin saberlo, se entrelazaban entre las tres.
—Entonces, Lisie—comenzó Sophie, apoyando la barbilla en una mano— ¿cómo va todo con Étienne?—
La pregunta cayó como una piedra en el agua. Elsie se tensó, notando cómo Camille se acomodaba en su asiento, aparentemente ajena, pero escuchando lo suficiente como para estar alerta.
—Va... bien. —Elsie mantuvo su respuesta breve, sintiendo un calor incómodo subir por su cuello.
Sophie ladeó la cabeza, escéptica. —"Bien" no suena muy emocionante.—
Elsie intentó sonreír. —Es solo que estamos en una etapa tranquila.—
Camille levantó la vista de las fotos en su teléfono y comentó distraídamente: —Étienne siempre ha sido tranquilo. Aunque creo que eso es lo que le gusta a la gente de él, ¿no?—
Elsie tragó saliva. Camille lo decía sin rastro de malicia, pero la mención de Étienne venía con un peso invisible. Después de todo, había sido su pareja antes de que las cosas entre ellos terminaran de manera tan discreta que ninguna había sentido necesario hablarlo en profundidad.
Sophie, siempre atenta a los matices, desvió el tema rápidamente. —Bueno, ¿y tú, Camille? ¿Preparada para la exposición en el Palais de Tokyo? Estoy segura de que será un éxito.—
Camille sonrió con sinceridad. —Estoy nerviosa, pero creo que todo va bien. Últimamente, me he enfocado en mis proyectos... evitando distracciones.—
Elsie se tensó al escuchar esa última palabra, sintiendo que era una referencia velada a Lucas. Aunque Camille nunca mencionaba a su ex, había momentos en que su ausencia en la conversación hablaba más fuerte que cualquier palabra.
Sophie, notando la incomodidad, cambió el tema una vez más, pero no antes de lanzarle a Elsie una mirada cómplice que prometía retomar el asunto más tarde.
La noche de la exposición
El Palais de Tokyo estaba lleno de arte, luces y susurros de admiración. Camille había logrado un equilibrio perfecto entre elegancia y modernidad en sus fotografías, muchas de las cuales capturaban la esencia de París: puentes bajo la lluvia, callejones solitarios iluminados por faroles, y rostros desconocidos atrapados en momentos de contemplación.
Sophie llegó temprano, asegurándose de felicitar a Camille por su obra, mientras Elsie entraba poco después, tomada del brazo de Étienne. La noche transcurría tranquila hasta que Lucas apareció. Su presencia no pasó desapercibida para nadie, especialmente para Sophie, quien había insistido en invitarlo, convencida de que algo debía resolverse esa noche.
Lucas se movía con discreción por la galería, admirando las fotos. Pero cuando sus ojos encontraron a Elsie al otro lado de la sala, el tiempo pareció detenerse. Ella sintió su mirada, pero evitó girarse, enfocándose en Étienne, quien comentaba sobre una de las fotos de Camille.
Sophie, divertida con la situación, se acercó a Lucas. —No esperaba que vinieras, pero me alegra que lo hicieras.—
Lucas asintió. —Solo vine a admirar el trabajo de Camille. Es una gran artista.—
—Claro. —Sophie le sonrió con un toque de sarcasmo antes de alejarse, dejando que el ambiente hiciera su trabajo.
Mientras tanto, Camille, ajena al drama, guiaba a algunos invitados a través de su colección. Se detuvo frente a una fotografía de un puente bajo la lluvia, una de sus favoritas. Elsie, siguiendo el recorrido, observó la imagen, sintiendo un escalofrío. Esa escena le recordaba demasiado a la noche en que Lucas y ella se habían encontrado por última vez, bajo las luces de París.
Finalmente, Lucas encontró un momento para hablar con Elsie. La abordó mientras ella admiraba otra foto, asegurándose de que Étienne no estuviera cerca.
—No quería incomodarte viniendo. —Lucas mantuvo su voz baja.
Elsie dio un paso atrás, sorprendida por su cercanía. —No es eso. Es solo que... esto es complicado.—
Lucas asintió. —Lo sé. Y no quiero complicarlo más. Pero necesitaba verte.—
Antes de que pudieran continuar, Camille apareció con una sonrisa, interrumpiendo la conversación. —¡Ah, Lucas! Qué bueno verte aquí. ¿Qué opinas de mi colección?—
Lucas sonrió, ocultando cualquier rastro de incomodidad. —Es magnífica. Como siempre, logras capturar algo más que imágenes... emociones.—
Camille sonrió con orgullo. —Gracias. —Miró a Elsie, que permanecía en silencio. —¿Y tú?—
—Es hermosa. Esta foto, en particular, me encanta. —Elsie señaló una imagen de un farol iluminando un callejón vacío, sintiendo que reflejaba su propio estado emocional.
La tensión quedó en el aire, pero Camille parecía ajena, enfocada en los elogios. Sophie, desde la distancia, observaba todo con interés, convencida de que algo más grande se estaba gestando.
La noche terminó sin incidentes, pero con un peso invisible entre Elsie, Lucas y Étienne. Mientras París seguía brillando bajo la luna, Elsie supo que pronto tendría que enfrentar sus sentimientos. No podía huir por siempre, ni de Étienne, ni de Lucas... ni de sí misma.
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BUENOOOO, amo a Sophie, es mi animal espiritual.
Que intenso fue ese encuentro entre Èitienne, Lucas y Elsie🥶. Algo incómodo para el público ¿cierto?
Les dejé algo de música para que escuchen mientras leen(amo a Gracie abrams ¿no se dieron cuenta?)
