𝖿𝗈𝗎𝗋𝗍𝖾𝖾𝗇

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Bree D'Angelo y Marcus Moss eran dos adolescentes privilegiados, acostumbrados al brillo de la vida acomodada. Sin embargo, su mundo dio un giro drástico cuando Bree, con apenas 16 años, quedó embarazada de su amigo y compañero de colegio. Lo que comenzó como un romance juvenil se transformó en una tormenta de miradas de reproche y juicios implacables por parte de sus familias y la comunidad.

La idea de una niña rica teniendo un bebé a tan corta edad era impensable para los círculos en los que ambos se movían. Los padres de Marcus, aunque desilusionados, accedieron a proporcionar apoyo financiero, permitiéndole terminar sus estudios. Bree, en cambio, quedó prácticamente confinada. Pasó nueve meses escondida, apenas saliendo de casa para evitar las miradas inquisitivas..

Cuando nació Elizabeth, su llegada trajo consigo una mezcla de alivio y responsabilidad. Bree pudo retomar sus estudios, esforzándose por no quedar atrapada en el papel que las circunstancias le habían impuesto, pero ni ella ni Marcus estaban realmente preparados para ser padres. La familia, ahora formada por tres, enfrentó el rechazo de sus seres queridos, quedando marginados dentro de un mundo que una vez les perteneció.

Con el tiempo, Marcus y Bree lograron mantenerse a flote, pero el estigma los siguió como una sombra. Al cumplir Elizabeth 16 años, los Moss decidieron que era momento de un cambio. Con otra hija ya en la familia, Katherine, y el peso de los recuerdos y los juicios sobre ellos, tomaron la decisión de mudarse a Outer Banks. Allí compraron una casa grande y elegante, con la esperanza de dejar atrás el pasado y empezar una vida funcional lejos de las miradas de reproche.

En Outer Banks, la familia intentó adaptarse a un nuevo entorno de lujos y apariencias. Elizabeth, siempre protectora con su hermanita Katherine, encontró en ella una fuente de alegría en medio de las tensiones familiares. Para Elizabeth, Katherine era su refugio, un recordatorio de que, a pesar de todo, algo puro y hermoso podía surgir de sus circunstancias.

Al principio, parecía que el cambio había funcionado. Los Moss se integraron en la comunidad, asistiendo a eventos sociales y esforzándose por encajar en un mundo que les ofrecía una segunda oportunidad. Pero la paz era frágil. Tres años después de mudarse, el nombre de los Moss volvió a ser el centro de atención, esta vez por razones trágicas.

Elizabeth, la hija mayor, falleció en un accidente que dejó a la familia destrozada. Su muerte marcó el punto de inflexión definitivo, convirtiéndose en una herida que nunca sanaría del todo.

[..]

Los gritos rompían el silencio de Tannyhill, reverberando entre los muros de la mansión. Katherine sintió el pánico treparle por el cuerpo antes de reconocer la voz. Era Topper, furioso y descontrolado. Sin pensarlo, echó a correr hacia el lugar de donde provenían los gritos.

Cuando llegó, la escena era peor de lo que imaginaba. Topper sujetaba a Sarah por los brazos con una fuerza que le arrancaba sollozos. La mirada perdida de su amiga, llena de lágrimas, le arrancó una furia que desconocía en sí misma.

— ¡Deja de gritarle! — irrumpió Kate, separándolos con un empujón decidido, plantándose entre ellos.

Topper la miró con una mezcla de burla y desprecio, inclinando la cabeza como si saboreara la confrontación.

— Miren quién llegó — dijo con un tono cargado de sarcasmo. — Las dos zorras que creen que es buena idea andar con pogues.

Sarah sollozaba más fuerte detrás de Kate, quien apretó los puños con fuerza para controlar el impulso de golpearlo. Respiró hondo antes de contestar

— Entiendo que estés enojado, Topper. Pero si te queda algo de sentido común, deberías aceptarlo: Sarah ya no quiere estar contigo. Te lo dejó claro ayer.

Waves I Rafe cameron & JJ maybankDonde viven las historias. Descúbrelo ahora