É p i l o g o

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Volvería a manchar mis manos de sangre solo para poder llamarte mi propiedad.

—Park Jungkook, quedas condenado a morir empalado por engañar a su majestad y usar magia negra para tu propio beneficio manchando el honor y el recuerdo del consorte imperial, Park Jimin.

Jungkook, quién se encontraba devastado de tanto estar parado en aquel lugar insalubre solo asintió con las pocas fuerzas que le quedaban.

—¡Su majestad, por favor, perdone a nuestro hijo! —imploraron los padres de Jungkook. Avergonzados por él.

Yoongi, quien aburrido se encontraba sentado en su trono, no dijo nada.

Jungkook, quedándose ya sin opciones, decidió confesar para al menos según él tratar de limpiar su alma.

—Habla, quizás muestre misericordia. —dijo Yoongi casi harto de estar ahí.

Jungkook, entendiendo eso como su última oportunidad confesó.

Jimin, siempre desde niño se ha llevado lo mejor, siempre todo lo más caro y bonito tenía que ser para él mientras que lo genérico y un tanto feo era para nosotros por eso es que yo lo destesté.

Además… mi padre, quien parecía no tener tiempo para ninguno de nosotros, siempre tenía tiempo para Jimin, solo para él.

Me estoy empezando a hastiar. —dijo Yoongi muy grave e impaciente.

Jimin, siempre lograba destacar entre nosotros tres, entonces yo y Taehyung solíamos hacerle bromas. Taehyung por su puesto le hacía bromas inocentes pero yo no. Lo más sorprendente de Jimin, fue que nunca se quejó de mis malos tratos y desde ahí yo supe que era un ser de alma pura.

Al llegar la adolescencia nos distanciamos aún más, mientras yo y Taehyung solíamos ir de compras a la ciudad, Jimin prefería quedarse en la enorme biblioteca de nuestra casa y eso encantaba a papá que creía que Jimin, tendría buen prospecto.

Todo empeoró cuando llegó a nuestras vidas, su majestad Yoongi, la poca e inexistente relación que teníamos, Jimin y yo desapareció en cuanto me dí cuenta que su majestad correspondía la admiración de Jimin, me dejé gobernar por los celos e idee un plan para separarlos.

Es verdad, soy culpable, yo mandé a asesinar a Jimin.

Le escribí una carta falsa haciéndome pasar por el emperador y planee todo tan meticulosamente.

Jimin, eventualmente recibió la carta e inmediatamente partió en su búsqueda, dí el aviso al enemigo de que el consorte imperial se encontraba en tal punto y después todo terminó.

—¿Eso es todo? —le preguntó Yoongi.

No, eso no es todo, tomé los libros de hechicería de mi madre y practiqué magia oscura por dos años enteros sin que nadie se diera cuenta. Usé específicamente la invocación del espíritu de Jimin para traerlo de vuelta y que pueda tomar mi cuerpo como suyo, así por fin, el emperador se fijaría en mí. Pero no fue así, no funcionó y estoy arrepentida de mis actos.

Yoongi, viendo que Jungkook terminó su confesión salió del lugar, después de todo, Jungkook no merecía que el presenciara su muerte.

Aquella tarde helada, Park Jungkook murió empalado por haber asesinado a su propio hermano, Park Jimin.


F I N

  Gracias por haber llegado hasta aquí, quizás hay vacíos y eso, lo corregiré una vez que lo termine de publicar

By: Sugus ✨

Dulce Ilusión - YoonMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora