Capítulo 2

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OLIVER.

Abrí mis ojos lentamente porque la luz del sol me molestaba, estaba abrazado a Crystal. Ayer después de ir a cenar pasamos la noche juntos. La mire un rato, aun seguía dormida, coloque detrás de su oreja un mechón de su pelo rubio que tenía delante de la cara.
Me levante lentamente de la cama sin hacer ruido. Cogí mis calzoncillos del suelo y me los puse. Abrí la puerta muy lento, y salí del cuarto.

Fui a la cocina, y busque zumo de naranja. No sabía muy bien donde tenía las cosas, no me manejaba muy bien en la cocina de Crystal. Sonreí al escuchar unos pasos detrás de mi, la luz de mis ojos de había despertado.

-Buenos días cariño- le doy un beso fugaz- Pronto seré la futura señora Sullivan- me enseña su dedo donde llevaba el anillo de compromiso que le regalé anoche.

-¿Te he dicho alguna vez que tu eres la razón de mi sonrisa? - señalo mi sonrisa, ella se ríe y asiente.

-Te quiero mucho Oliver- me besa.

-Y yo a ti Crystal.

Mas bien la amaba pero no sé porque no era capaz de decírselo, ni siquiera pude ayer cuando le pedí matrimonio y le di su anillo. Me encantaba como quedaba ese anillo en sus hermosos y delicados dedos, me encata todo de Crystal, su pelo rubio, sus ojos azules, los hoyuelos que se le formaban cuando sonreía y hasta me encantaban sus manías.

-Oliver tengo algo que decirte... Ayer te lo quise decir pero ...no pude...es que...es que...no sé como decírtelo -empezó a tartamudear- es ...es que...estoy... es...

-Amor, digas lo que digas yo siempre te quedre- sonrió, se formaron esos hermosos hoyuelos que me encantaban. ¡Dios mio como la amo!

-Estoy embarazada- dijo decidida, mis palabras le ayudaron con los nervios.

No pude evitar sonreír, la cogí en brazos y empezar a saltar con ella por toda la casa -¡Crystal Land me acabas de hacer el hombre mas feliz de todos!

-Y tu a mi. Gracias por haberme dado este pequeño o pequeña que llevo aquí dentro- se toco la barriga y sonrió.

-¿Te he dicho alguna vez que me cantas tus hoyuelos cuando sonríes?

-Las mismas veces que me has dicho que soy tu luz.

-Ahora tu y...ese bebé sois mi luz- la abrazo, ella me sonríe.

-Te amo Oliver Sullivan - acercó sus labios a los míos y me beso.

Le seguí el beso feliz, lleno de vida. Me acaba de decir que dentro de nueve meses seré papá además de que también me ama. Me ama, sin duda este día esta comenzando genial. Sentí algo de culpa por no poder decirle lo mismo. Nunca me ha sido fácil declarar mis sentimientos a una persona. Pero que importa, tengo toda la vida para decírselo porque va a ser mi señora, mi esposa, la señora Sullivan.

Pase toda la mañana con ella en el departamento, mi departamento, el que me regalo mi padre al cumplir los dieciocho años, una de sus otra formas para deshacerme de mi. Solo me llama por interés, entiendan que soy su hijo menor rebelde que comparable con su hermano James es un absoluto fracasado.
Bueno como iba diciendo pase toda la mañana en departamento con Crystal. A la tarde decidí ir a casa de mi padre. Tendría que decirle que me iba a casar y que pronto será abuelo. ¿Por qué se lo digo cuando mi relación con él...es detestable? Fácil, ¿Quién creéis que me paga todo? Necesito dinero para la boda y para poder comprarme un nuevo hogar para mi y mi nueva familia.

-¿Y planeas que yo me encargue de todos los gastos?- me pregunta una vez que le he dado la noticia.

-Sabes que no tengo trabajo y bueno eres mi padre y pronto serás abuelo. Será tu primer nieto.

Inolvidable © [Actualización lenta]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora