Capitulo 32

22 3 1
                                    

Acabamos de llegar y en sólo un segundo puedo reconocer lo hermoso que es este lugar... El cielo era celeste y se veía limpio, muy limpio, en verdad.

—¡O por Dios! Ya estamos en las Bahamas. — exclamó dramática Britney.

—¡O sí! — dije saltando de alegría, y no importaba que las demás personas me miraran como bicho raro.

—Estamos en las Bahamas, estamos en las Bahamas... — empezó a cantar Jasmine.

—Jajaja , parecen lunaticas.— dijo riendose Nicolas , un amigo de Matt.

Le lanzamos una mala mirada.

—¿Se molestaron? — preguntó Matt.

Reí burlonamente.

—Pues nada que ver.— movi mis manos.

—Eres la más lunatica de las tres. —dijo riéndose Matt.

—¿Qué? — lo miré con furia.

—Eres la más lunatica.

—Vuelvelo a decir... — lo rete.

— No es para tanto.

—Ok, no es para tanto decirle a tu novia que es la más lunatica de todas.

Salí corriendo de donde estaban , mientras escuchaba los gritos de Brit y Jasmine pidiendome que regresara.

Corrí hacia el baño de mujeres y justo cuando ya estaba girando la perilla, alguien me abraza por detrás.

—Era sólo una broma. — susurró Matt en mi oreja y besando mi cuello, haciendo que mi cuerpo se tensara y me ponga al principio rígida. Sus manos rodearon mi cintura y pegó su cuerpo demasiado al mío, dandome una oleada de deseo.

— No me gusto esa broma. — me giré hacia él.

—No volverá a ocurrir.— acaricio mi mejilla y luego de eso me beso fuertemente, haciendo que mi respiración por ratos se cortara, pero eso no impedia disfrutar la sensación de sus labios en los míos. — Vamos?

Lo seguí.

(...)

Llegamos a un lujoso hotel y mis amigas cogieron un cuarto, los amigos de Matt otro y Matt y yo otro.
Terminé de llamar a mi mamá y empeze a desempacar mi maleta.
Matt se dio un baño y yo hize los mismo.

—¿A dónde quieres ir? — preguntó.

— A la playa. — dije secando con la secadora mi cabello.

—¿En dos días es tú cumpleaños verdad?

—Emmm... si —¿Por que dudaba?

—Te tengo una sorpresa.

—¿Enserio?

—Aparte de la que tenemos todos. — miró a la cama. — Está es sólo mía.

— Ya deseo verla.

—Y yo ya quiero que pase.

Sonrei y él también

(...)

La playa era muy limpia y azulada... la arena era suave y no había piedras, era muy bella.
Habían muchos turistas y el sol era infernal.

Pasamos 6 horas en la playa y todo fue muy divertido... Con mis amigas no nos parabamos de tomarnos selfies y con Matt, nadamos y comimos.

No queríamos irnos, pero ya estaba anocheciendo.

¡No hay mejor lugar para pasar las vacaciones!

Gracias por leer,votar y comentar.

No dejo de soñarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora