No dejo de soñar

Capitulo 27

Terminó la clase y porfin ya era hora de salida.
Matt se ofreció a llevarme, y por eso me despedi de mis amigas.

Fuimos hasta el estacionamiento, y nos subimos a su hermoso auto.

- ¿Que tal hoy?- pregunto.

- Normal y ¿Tú?. - dije un poco cansada, porque ya era viernes, y bueno... quería estar relajada.

- Bien. - dijo mientras ya estabamos cerca a mi casa.

-Cuidate- dije dandole un beso en la mejilla.- Te amo, bye.

-Amanda,espera.- dijo agarrando mi hombro con delicadeza.- Mañana ire al club con mis amigos, ¿Nos acompañas?.

Esa era una buena opción para no quedarme aburrida un sábado por la mañana, y talvez me quede hasta la noche... pero no quería estar sola, rodeada de chicos, por eso, invitaría a Brit, Peyton y Jasmine.

- Ok, pero invitó a mis amigas.

- Bien, todo por estar a tu lado. - dijo tiernamente. ¿Acaso no es lindo?.- Te mandó más tarde un MSM, con la dirección. Te quiero, bye.

Subí hasta mi habitación y me dí un refrescante baño reparador. ¡No más estrés!, despues almorze y al terminar subí nuevamente hasta mi habitación, cogí mi celular y entre a Messenger para hacer una vídeollamada con Brit.

Después de una hora de conversación, decidí ir al balcón a tomar un poco de aire fresco.

¡No puede ser verdad! ¡No puede ser él!

Patch vivía al frente mío y al darme cuenta, la ventana de su habitación esta abierta, con las cortinas que no impedían mi visión.
Decidí mirar otra vez para darme cuenta de que no era él.
Pero definitivamente lo era.
Pude ver a una chica rubia.-igual que yo. - colgada en sus brazos, mientras se daban un acalorado beso, muy intenso a mi parecer, que me recordaban lo que él y yo hicimos en la universidad.
Él estaba solamente con unos pantalones, sin una camisa puesta, haciendo que sus tan formados bíceps se notaran. ¡ufff ...!

Yo me quedé como una idiota viéndolos, talvez lo hice como unos diez minutos, no se que estaba esperando.
Me ponía en el lugar de esa afortunada chica.

Sin darme cuenta, Patch me vio mirandolos y se tenso, yo... yo no sabía que hacer. Lo único que hize fue a correr hacia mi cuarto, con una sensación de querer llorar y a la vez destrozar mi cuarto en mil pedazos.

Me tiré en mi cama, y derrepente sentí que mi ventana se abría.
Me paré con preocupación.

Era Patch. Ni bien habían pasado unos 5 minutos desde que los vi y él ya estaba aquí.

-¿Que haces aqui? - pregunté con ganas de golpearlo, pero no, no soy nada de él. Me sorprendio verlo entrar por mi ventana porque mi cuarto quedaba en el segundo piso de mi casa. ¿Acaso eres el hombre araña?, no lo creo.

-¿Me extrañabas?- preguntó como un estupido. Parece un mujeriego.

Frunci las cejas.

-¿Yo?, ¿Acaso debería?. - dije como si no me importara lo que decía.

- Si, ¿Acaso no eres tú la que miraba estúpidamente mi ventana?- dijo maleducadamente, pero era verdad, esa era yo.- ¿Acaso nunca has visto a un chico besarse con una chica?.

Eso realmente me ofendio. No lo iba a soportar ni un minuto más en mi habitación.

-¡Vete!- dije empujando su cuerpo lo más fuerte que pude. Pero él era como una roca.

-No. - dijo descaradamente.

-¿Qué?, esta es mi habitación y yo te podría denunciar por entrar...

No pude terminar lo que iba a decir.

Patch , ágilmente tiró mi cuerpo hacia la pared haciendo que me sintiera indefensa ante él.
Estaba dominada.
El rodeó sus manos por mi cintura y sonroje por su acción.

Patch, ¡eres un chico malo!.

- Denunciame. - dijo desafiante, mientras acercaba su cara hacia la mía. - Apuesto a que no puedes.