La maldición de Barba Azul © [Historia corta]

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El mar está furioso. Incontenible. Las olas embaten contra el puerto, llevando consigo las lanchas. Todo aquel desastre se puede ver desde mi despacho. Todo aquel revoltijo, demostrando la ira del dios de los mares. Aunque ya muy pocos crean en ellos, yo puedo creer en todos ellos.

— Charles, debes ya decirle a Geneviev sobre tu viaje. No puedes retrasar lo inevitable. 

El tío Jacob se detiene a mi lado para ver juntos el desastre natural que esta pequeña ciudad acontece. Ya el día que más he odiado ha llegado. En unas horas tendré que viajar y dejar sola a Geneviev en casa. Donde la tentación y la maldición la acechan a cada momento.

Y más aún cuando yo no esté con ella para protegerla.

— ¿Qué debo hacer, entonces? —Digo en susurros. —No quiero dejarla sola.

Los minutos pasan y no recibo contestación por su parte. Hasta que suspira y coloca una de sus manos en mi hombro.

— Hijo, sé que es difícil. Pero todos estamos seguros de que Geneviev es la mujer correcta para tí. No temas. Ten fe en que no pasará nada malo.