En una faceta llena de oscuridad,
con más dudas que certezas,
siempre llega una brisa fría y precisa,
justo cuando más anhelas claridad.
Y entonces, ahí, entre el caos,
encuentras la luz que tanto buscabas.
La gente suele decir
que no tienes que esperar a que nadie te salve,
y es verdad.
Pero cuando la vida y el universo te presentan a alguien,
todo se vuelve más fácil:
más fácil que llorar sola en un cuarto encerrado,
más fácil que cargar un mundo que no entiendes.
Es más fácil…
cuando alguien te escucha,
aunque no entienda del todo,
pero permanece.
Y aún mejor,
cuando esa persona decide quedarse,
aun cuando tu cielo se nubla.
No se va.
No solo lo dice,
lo demuestra.
Y entonces entiendes
que las verdaderas maravillas del mundo
no están en continentes lejanos,
ni en océanos profundos,
ni en misterios imposibles.
Están justo a tu lado.
Y ahí, la vida te lanza un desafío enorme:
¿Eres capaz de valorarlo?
¿De enfrentar tus miedos?
¿O eres un cobarde que no sabe
ver el regalo frente a sus ojos?
Nos pasamos la vida corriendo de nuestros miedos,
huyendo por heridas del pasado.
Pero como dijo El Principito:
“No porque te haya pinchado una rosa
quiere decir que todas las demás sean iguales.”
Si la vida te ha presentado una maravilla,
aviéntate al abismo…
una y mil veces.
Sin importar la incertidumbre,
aunque el miedo te carcoma,
aviéntate.
Porque ahí, justo ahí,
están las respuestas.
Yo aún tengo miedo,
pero sé que quiero lanzarme todos los días
a ese pozo sin fin.
Quiero empaparme de amor
como las abejas se empapan de polen.
Quiero dejar de tener solo mi aroma,
y llevar el tuyo.
Dejar de cuestionarme qué pasará después
y simplemente… amarte.
Hasta que mi piel,
mi alma,
mis labios,
mis odios,
mi mente,
mis manos,
mis brazos,
mi ser entero…
dejen de ser míos
y se conviertan en complemento tuyo.
Y aunque la vida nos tumbe,
aunque haya mil problemas,
que al final del día,
y al final del atardecer,
sigamos siendo tú y yo.
Porque tú eres mi todo.
Eres mi dulce rosa.
Y no quiero que te vayas.
No importa cuántos abismos me ahoguen,
mi ser…
ya sabe a quién le pertenece.
ESTÁS LEYENDO
Vuelta al abismo
PoesíaEncontrarás escritos que te llegarán al alma y entiendas que estar roto es completamente normal....
