- Sacame de aqui Gerardo, sacame de este mundo.- Le dije con mucho dolor sin abrir los ojos.
- Tus deseos son ordenes Marybel.- dijo con un tono que daba miedo mientras puso en movimiento el auto, pero no me importa. No me importa lo que hara conmigo, me da igual si me mata, si me secuestra o cualquier cosa. Solo quiero que me lleve lejos.
2:50 am 21 de Agosto.
Abri los ojos y vi a traves de la ventana, estamos en una avenida. Senti unas inmensas ganas de hablar, de desahogarme. Sin importar que me escuchara o no.
- Amaba viajar por carretera con Javier, un dia nos aventuramos a un viaje de doce horas en carretera a un bosque. Son de los mejores recuerdos que tengo con el.- voltee disimuladamente para ver a Gerardo a la cara y aun mantenia un gesto muy serio, al ver que no contesto me miro por unos segundos y me sonrio.
-Sigue.- ver su sonrisa me hizo volver en llanto.
-¿porque me tuvo que hacer eso? Tal vez nunca me amo, tal vez fui una mas, tal vez...-suspire.- No sabe el dolor que senti cuando accedi a separarme de él solo para que en un futuro nuestra relacion funcionara mejor, la fuerza que tuve que tener para aceptarlo pero ¿que? A el no le importo, jugo conmigo. Me dijo que aun me ama y ¿para que? Es que maldita sea no entiendo porque me tiene que mentir. ¿Porque me juro que volveria? ¿porque me mantuvo ilusionada? ¿porque no simplemente me dio un final definitivo y ya? Yo hice de todo para tener una vida relativamente normal despues de que terminamos, solo porque me dijo que no era definitivo. Que las peleas se terminarian si nos alejabamos por un tiempo, sabes tuvimos recuerdos tan bellos, recuerdos que estan empañados por el odio que acaba de nacer en mi. Soy una idiota como he podido caer, el amor se apodero de mi y fui ciega. Crei en el, crei que era posible que no se cansara de mi. Que lo nuestro no moriria. Crei que yo era el amor de su vida. Yo siemplemente fui una tonta que creyo que el destino nos unio para estar juntos toda la vida. Es que el es unico hombre que encaja en los planes de mi vida. Es el hombre perfecto y por eso luche en contra de mi destino todo este tiempo, para estar de nuevo con el hombre de mi vida. Pero ahora no se, el me destrozo, me humillo, me demostro que para el ya no soy nada. Me pregunto si su amor fue real o todo fue una farsa. En 11 horas logro que todo el amor que sentia por el se convirtiera en odio, lo odio con la misma fuerza que lo ame.-
No pude seguir hablando, mis lagrimas y mi llanto son demasiado fuerte como seguir. Me incline hacia delante y me cubri la cara con las manos para seguir llorando, no puedo pensar mas que en su traicion y en que tal vez me haya estado engañando desde hace mucho tiempo.
-¿a donde me llevaras?- le pregunte con un hilo de voz al ver que estabamos entrando en un parque con varios reflectores alumbrando.
- Me dijiste que te sacara de este mundo.- dijo un poco mas relajado.
- Si pero ¿que hacemos en un parque?
- Te enseñare que hago cuando siento que mi mundo esta a punto de derrumbarse.- dijo algo serio estacionando mi auto, habia olvidado que estabamos en mi carro. Se bajo y lo rodeo para abrirme la puerta, me estiro la mano y me regalo una hermosa sonrisa.
-¿vamos?- lo tome de la mano y entramos al parque. No tiene nada del otro mundo solo consta de un tobogan, una rueda, varios sube y baja y un par de columplios. Me llevo hasta la rueda y se sento junto a mi mirando hacia la nada.
- Cuando tenia cinco años jugue mi primer partido de futbol, queria impresionar a mi papa pero perdimos por un autogol que yo hice, me senti tan poca cosa al saber que no pude ganar y que defraude a mi padre. Pense que seguramente tenia cosas mas importantes que hacer que ver a su hijo perder. Asi que comence a llorar y sali corriendo hasta este parque, escuchaba como mis padres me gritaban preocupados para que no corriera, luego deje de escucharlos y me olvide del mundo, cuando me subi a los columpios olvide todo lo que habia sentido minutos antes pues senti algo que es imposible de explicar. Desde ese entonces he venido aqui cada vez que tengo un problema muy fuerte en mi vida, a pesar de que solo tengo 24 años la vida me ha dado golpes muy fuertes y aunque sea el jefe de una empresa y me vea muy serio y frio frente a todos cada vez que tengo un problema vengo para aca.- me parece algo tierna su historia cosa que me hizo sonreir.- Pero ven preciosa, no vinimos a hablar de mi vinimos a hacerte olvidar del mundo.
- Tu me haces olvidar.- ¿que? No queria decir eso, no se porque no dije ¡ah! Soy una estupida. Por suerte Gerardo ignoro lo que dije y me llevo a los columpios.
Su historia es muy linda pero dudo un poco que eso de olvidar las cosas columpiandose sea cierto. Mas tampoco tengo nada que perder asi que me deje guiar por el.
Me sento en el columpio y puso sus manos en las cadenas para empujarme, me hizo cerrar los ojos mientras me decia al oido:
- Disfrutalo preciosa.
No entendi muy bien pero comenzo a meserme. La briza choco inmediatamente con mis grandes mejillas, nunca habia sentido algo como esto. Es como si estuviera en contacto puro con la naturaleza, pronto me impulso con las piernas para agarrar mas altitud. Cada vez que me inclino hacia adelante sentia que tocaba el cielo, me senti liviana como si estuviera volando. Rei de felicidad, estoy en el cielo no lo puedo creer. Mi largo cabello bailaba libremente con la briza y mis mejillas bañadas con lagrimas de felicidad. Me senti en otro lugar, estoy tan relajada que siento que todo es mentira. Ya no estoy en un columpio, estoy en las nubes.Vuelvo a ser una niña inocente. Me siento muy feliz, muy calmada, muy relajada, siento como si estuviera en un sueño. Siento como si estuviera en un tance... Siento que me falta un poco el aire... Siento... Sient...
- ¡Marybel!
Abri los ojos de inmediato y el columpio dejo de meserse.
- Gerardo ¿como...?
- Hare que te olvides de el preciosa. Y cuando lo olvides hare de todo para que te enamores de mi.- dijo en mi oido.- Vamonos.
- Pero...- intente decir algi pero aun estaba dentro del trance. Me tomo de la mano y me llevo al auto, se subio y nos encaminamos a la avenida.
-¿a donde iremos ahora?- pregunto haciendo dibujos en la ventana empañada del auto.
- A mi casa.- Las luces de la calle son mas fuertes, mas hermosas, mas brillantes. Parecen estrellas. No puedo parar de mirar la infinadad de luces que estan mas alla de la ventana del auto, quiero tocar esas luces y... ya va. Pero que...?
-¡para el auto!- grite desesperadamente.-¡PARA EL AUTO INMEDIATAMENTE!- freno bruzcamente haciendo que casi chocaramos con un poste.
-¿!que carajos te pasa!?
- ¡me engañaste! ¿acaso me drogaste? ¿me hiciste olvidar de la realidad para llevarme engañada a tu casa? ¿como pude confiar en un desconocido practicamente? Era demasiado lindo para ser verdad- dije en medio de mi llanto, su cara es un poema.
- ¿tu eres estupida o que?- dijo con exasperacion- ¡nos pudimos haber matado por ti ataque de histeria! ¿como pretendes que te drogue si ni siquiera recibiste el vaso de agua que me.pediste? ¡POR DIOS! ¡por supuesto que te llevare a mis casa Marybel tu nunca me has dicho donde vives!- su cara estaba muy roja por la rabia, tiene razon soy una estupida.
-Disculpame es que yo...
-Marybel no vuelvas a hacer eso ni loca, me asustaste mucho.- comience a llorar de nuevo, soy una puta llorona.
-Disculpame Gerardo es que me siento muy agobiada con todo esto y siento que todos me engañaran.
- Tranquila preciosa, cierra los ojos. Descanza un rato.- dijo acariciando mi rostro.- Se que es dificil, pero confia en mi Marybel. Confia.
- Gracias.- me recoste en el asiento del auto y le hice caso, estaba tan cansada que no tarde en caer en un profundo sueño.
No estoy muy convencida de este cap:(
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Besame (PAUSADA)
RomanceMarybel es una estudiante de ingeniería de 20 años. Inteligente, bella, audaz e independiente. Tiene muy claro lo que quiere en su vida; graduarse, trabajar para una de las mejores empresas del país, tener una casa con un gran jardín, casarse, forma...