De repente alguien me coge del codo y me saca del coche de un tirón pero sin llegar a ser brusco ¿es eso posible?, siento como jala de mi hacia atrás, para cuando abro los ojos me doy cuenta que estoy detrás de Jase, hace de su cuerpo un escudo para mi.
- ya es suficiente - gruñe.
Alex sale del coche con una sonrisa, se acerca y se para enfrente de él, Jase es ligeramente mas alto, se fulminan con la mirada mutuamente, son dos bestias intentado marcar quien es el que manda aquí, un móvil empieza a sonar, Alex lo saca y se lo lleva a la oreja, después de unos segundos corta la llamada.
- nos veremos pronto- se despide.
Vuelve a entrar al coche seguido de sus hermanos, aceleran perdiéndose entre las calles. Jase se gira y acuna mi cara entre sus manos, me mira fijamente como si estuviera buscando algo en mi asustadiza mirada, el ritmo de mi corazón latir empieza a disminuir poco a poco.
- quienes eran ellos?- pregunta Eddie.
Niego con la cabeza sin poder apartar la vista de esos orbes azules que me miran con preocupación. Ignorando la pregunta de Eddie, Jase me arrastra dentro, subimos las escaleras, abre todas las puertas en nuestro camino hasta que da con mi habitación, hace que me siente en mi cama y cierra la puerta con pestillo para que nadie nos moleste, me coge de la mano y entramos al baño.
- hay que limpiarte vale?.
Asiento, me quita mi blusa, lava mis manos en el lavamanos, parezco una muñeca siendo lavada por su amo, se quita su polera y antes que de pueda preguntarle nada me la pone a mi, una vez sin rastro de la sangre de Liam, volvemos a la cama, se tumba y palmea el lugar vacío a su lado, titubeando le hago caso, me acurruco contra su torso desnudo, me coge de la cintura y me pega mas a él.
- duerme un poco nena- dice besándome la coronilla.
"papa dijo que hoy iríamos de vacaciones, mamá está feliz y yo también. Papá dice que la razón por la que no salimos es por que su trabajo no se lo permite, new York city es rudiosa por lo que nosotros vivimos en suburbs, cuando cumpla la mayoría de edad me mudare a la gran ciudad.
- cariño ponte el cinturón de seguridad- dice mi madre.
Cuándo lo hago mi padre arranca el coche, mi madre lo mira embelesada, siempre me ha parecido hermoso la manera en que después de tantos años se miran como si fuera la última vez que se vayan a ver.
La carretera está oscura, no entiendo porqué papá decidió viajar de noche, es absurdo, algún que otro coche pasa veloz en dirección contraria a la nuestra, camiones gigantes.

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Adicta a ti
ChickLitÉl, bipolar, obseso del control, agresivo, tierno a veces, posesivo, protector. Ella, atrevida, extrovertida, fría a veces, aparentemente dulce, desconfiada, impulsiva. El destino los juntará y les hará ver que son demasiados igual como para se...