Academia Zwein

Bella Durmiente

- Sam Dios... mírame — tomo mi rostro y me hizo mirarle — por favor tranquilízate — me encontraba temblando — tenemos que llamar a tu padre - asentí entre sollozos — Sam tendrás que quedarte esta noche en casa de una de tus amigas

- No, por favor no — no puedo dejar de llorar

- Lo siento pero no lo voy a discutir — me abrazo y me alejo de la habitación me llevo a la sala, tomo su celular supongo que para llamar a Ricardo, en cuanto Edwin me dio la espalda otra vez me dirigí a la habitación de mi hermano, lo primero que pienso al verlo de nuevo así es ¿Por qué lo hizo? Paso saliva recojo mi celular del piso y entro a la habitación, no sé porque pero empiezo a buscar con la vista algo que me pueda decir porque lo hizo y lo que encuentro es una hoja que esta sobre un cuaderno en su escritorio, me dirijo a allí tomo la hoja que esta doblada a la mitad por encima tienes marcado Sam en mayúsculas al abrirla y comenzar a leer se me vuelven a escapar unas cuantas lagrimas

(nota: como una vez te dije no muestres tus sentimientos u debilidades, te lo recalco, también te dije que se aprovecharían de eso y no mentía. Y como estoy seguro que ahora te preguntas como es que lo recuerdo es porque en algunos momentos recuerdo todo y por eso mismo te escribo esta nota antes de volver a olvidar todo o de olvidarte a ti, también quiero que sepas que hay muchas cosas que no sabes y por eso sé que en estos momentos te estoy haciendo sufrir pero es necesario, tienes que saber toda la verdad y para eso yo tenía que morir, pero no podía seguir retrasando el hecho que conozcas todo. Y ahora te pido que por favor vuelvas a vivir con papa sé que para ti ya no lo es pero es mi último deseo y es por el simple hecho de que no te quiero a solas bajo el mismo techo con Edwin, confió en el pero no en sus impulsos. Ah y también quiero que superes el hecho de tanto la muerte de mamá como la mía y si sé que todavía te desvelas en las noches pensando en la muerte de mamá y no quiero que lo sigas haciendo porque en estos momentos tú tienes una vida y aunque no lo quieras aceptar nosotros ya no estamos en ella y no te pido nos olvides sé que no lo harás pero no dejes que nuestro recuerdo te afecte.

Perdona el dolor que te estoy causando.)

Seque mis lágrimas y guarde la nota en el bolsillo, volví a la sala y me senté con la mirada perdida, no quise pensar en lo que decía la nota no quise pensar en nada

- Sam ya hable con Ricardo, el no demora en llegar... quieres esperarle o te llevo a casa de tu amiga

- Necesito hablar con el – dije en un murmuro

- Muy bien... he Sam yo también tengo que hablar contigo

- Te escucho

- Sam tu sabes que yo te quiero pero no me puedo hacer — suena el timbre, yo no es que no quiera sino que no puedo moverme así que Edwin abrió en cuestión de segundos un Ricardo extremadamente pálido entro en la sala y debo decir que me sorprende lo rápido que ha llegado

- ¿quieres verlo? — pregunte en tono frio

- ¿Por qué? — me encogí de hombros, el asintió y se dirigió al cuarto en que aún se encontraba el cuerpo inerte de Fernando, yo también fui me quede recargada en el marco de la puerta permitiéndole a Ricardo llorar por un momento

- Me mudare contigo — dije en tono firme

- ¿Qué? — Ricardo parece sorprendido

- Que vamos a vivir bajo el mismo techo

- ¿Por qué?

- Le vas a negar el último deseo a tu hijo

- ¿De qué hablas?

- Enserio crees que a él le gustaría dejarme bajo el mismo techo de un chico que podría violarme fácilmente

- ¿fácilmente? — pregunto incrédulo