Buen chico

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Me despierta el timbre bajo corriendo medio dormida abro la puerta y pierdo el equilibrio me balanceo hacia delante me sostienen haciendo que recupere el equilibrio

- buenos días — me saluda el chico que vi en el velorio de mi madre, y ahora que recuerdo ¿le vamos a hacer velorio a Fernando?

- He, si buenos días

- ¿puedo pasar? — entre cierro los ojos dudando

- Si pase - le digo apartándome para que pase, se sienta en un sillón de la sala, cierro la puerta y me sienta frente a él después me pregunto por qué a mi

- He disculpe ¿le conozco? — pregunto

- No, mi nombre es Mario Lurs — se presenta tendiéndome la mano

- Sammy Lustig — digo estrechándole la mano, es raro pronunciar mi nombre completo después de tanto

- Soy funcionario de la academia Zwei Rosen —asiento con el ceño fruncido — usted ha sido seleccionada para pasar por unas pruebas hechas para que nosotros podamos decidir si darle una beca en nuestra a academia o no —sigo asintiendo — tiene que saber que nadie debe saber de esta academia y también no hacerse ilusiones hasta que se le den los resultados, unos meses después de que se le den los resultados de dichas pruebas recibirá una carta que le indicara si ha sido aceptada con beca o no esta debe de ser firmada por usted y por sus padres — sigo tan solo asintiendo — seré yo quien le realice estas pruebas ¿alguna pregunta?

- ¿Por qué nadie debe saber de esta academia?

- Es la mejor academia del mundo, es una academia internacional, a esta solo ingresan personas con dinero, este año el director decidió dar diez becas a las personas con el mejor intelecto, el nombre de esta academia solo es conocido en la alta sociedad y por ende es que no le permitimos a los becados hablar de la academia

- ¿Cuántas personas han recibido ya la beca?

- ¿por qué cree que ya se han dado becas?

- Es una su poción

- No se equivoca ya se han dado siete becas

- ¿personas de diferentes países?

- Si ¿Por qué le interesa eso?

- ¿Ha nadie le ha interesado?

- A nadie

- ¿Usted le ha hecho dichas pruebas a los ya siete becados?

- Solo a cinco de ellos

- ¿Cómo se realizó el proceso de selección?

- una computadora selecciona a cien personas con los mejores niveles académicos y con vivenciales

- de esos cien solo salen diez becados ¿Cómo hacen para que el resto que no ha recibido la beca no hable sobre la academia?

- Se les da una suma de dinero por su silencio además de que se les hace firmar un acuerdo de confidencialidad

- En dado caso que yo no recibiese la beca me debieron hacer firmar el acuerdo de confidencialidad antes de hablarme de la academia ya que el acuerdo solo es válido a lo dicho después de que este es firmado no antes — el chico sonríe ampliamente - ¿Cuándo se me harán las pruebas?

- Durante un mes estará a prueba, no se le avisara en qué momento este en la prueba así que tendrá que estar atenta a todo lo que yo le diga en todo momento

- Muy bien ¿es todo?

- Si me disculpa ya tengo que irme

- Claro — se levanto y se fue, yo me quede allí pensando, Mery fue aceptada pero ¿hace cuanto le hicieron estas pruebas? ¿se las habrá hecho Mario? ¿a cuántas personas les habrán hecho ya estas pruebas? ¿Cuántos habrán sido rechazados?... el timbre de mi celular me saca de mis pensamientos, en el identificador sala Emily

- Hola — le saludo poco entusiasta

- ¿Puedo ir a tu casa?

- No estoy viviendo con Edwin

- ¿¡que!?

- Estoy en la casa de Ricardo ¿vienes?

- Voy para allá

- Okey — a los quince minutos Emily está enfrente a la puerta

- Pasa — le digo haciéndome a un lado

- ¿Qué paso? — dice ¿alterada? ¿preocupada? ¿ambas?

- Siéntate — me mira entrecerrando los ojos — relájate — se sienta en donde estaba Mario y yo enfrente de ella

- Y bien ¿Qué paso?

- Volví a vivir con mi padre

- ¿Por qué?

- Fernando

- ¿y eso que?

- Se suicidó — dije en tono frio y con poca importancia

- ¿Cuándo sucedió?

- Anoche

- ¿estás bien?

- Si... pero necesito aun chico

- ¿Qué?

- Cuando lo de mamá Anthony fue quien me subió el ánimo y no volví a saber de él, me gustaría verle

- Tu hermano se acaba de suicidar y quieres ver a un chico... estas mejor de lo que esperaba — le sonrió y luego le saco la lengua infantilmente

- ¿Qué es lo que necesitabas decirme?

- Nada

- Hay por favor

- Okey... - ella toma aire — Jair y yo nos cuadramos — asiento mirando a la nada — ayer, salimos como amigos y estábamos andado y me beso y luego me pidió el cuadre — de nuevo asiento — pero di algo

- Es un buen chico... no, no lo es — suspiro — pero si te gusta que más da, desde que no te lastime no tendré que ensuciar mis manos con su sangre así que no habrá problema, a por cierto el lunes tendré que hablar seriamente con el

- Sabes ya tengo tres hermanos mayores no hace falte que actúes como uno

- Si es necesario ya que ellos no están al tanto de esto ¿o sí? — esto último le dije en son de reto

- Bien, tu ganas — sonrió de oreja a oreja — pero por seguridad de él yo voy a estar presente

- Si como quieras, solo quiero verle con miedo — digo restándole importancia

- Bueno, ahora ¿Edwin está bien con que te hayas ido?

- No lo sé — me mira con el ceño fruncido — cuando me trajo parecía como si ya se lo esperara desde hace rato

- Supongo Fernanda le habrá dicho

- Tal vez — si eso es muy probable ¿o no?

- ¿Mery ya te dijo? — buen cambio de tema, solo que no sé de qué habla en si

- ¿no?

- Se va a mudar

- ¿Cómo? — eso dijo Mery para omitir lo de la academia

- Si, la mamá solo le va a dejar terminar este periodo y luego se mudaran

- Sabes ¿A dónde?

- Pues ni Mery sabe todavía.

Academia ZweinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora