Capitulo 7

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Capitulo 7

Narra Savannah.

Sentí un poco de lastima al escuchar las palabras con las que Randall amenazaba a mi mate, no quería que ellos fueran enemigos ni nada por el estilo pero al parecer iba a ser imposible que se llevaran bien.

Mientras Randall desaparecía mi pareja se acercó a mí con paso cauteloso.

Intente recordar su nombre, lo habían pronunciado en la presentación de su nuevo puesto como Alfa... recordé su apellido -Henderson- pero su nombre nunca llego a mi cabeza, era malísima con la memoria a corto plazo.

Él intento acariciar mi mejilla e inmediatamente me aleje, no quería que me tocara por ninguna circunstancia, quería acomodar mis pensamientos, si lo aceptaba tendría que alejarme de mi manada y el solo pensarlo mi pecho se comprimía.

Sus hombros se tensaron inmediatamente y me miro con suplica.

-Lo siento –Me disculpe bajando la mirada.

Sus pies se movían incómodamente, escuche su respiración aumentar y por un instante temí el haberme alejado de su contacto, no lo conocía no sabía cómo podía reaccionar ante una situación como esta.

Levante la mirada nuevamente para encontrarme con un hombre completamente distinto, ahora su mirada era fría; Su semblante cambio justo cuando en mis ojos se encontraba el terror grabado en ellos.

-Yo... No quise... es solo que... –Sus palabras llevaban cierto nerviosismo– Quiero tocarte.

Su última frase provoco un escalofrió que recorrió mi cuerpo completo, la verdad era simple, al igual que él yo deseaba tanto sentir su tacto.

Di un paso enfrente quedando más cerca de él, levante mi mano a escasos centímetros de su rostro, no lo sentía aun y mis piernas ya no respondían.

Dos pasos atrás fueron suficiente para apartarme sin haberlo tocado, era algo estúpido que no podía darme el privilegio de hacer, por ahora.

Me desconecte por completo al sentir la conexión encenderse en mi cabeza, supe de inmediato que mi hermano intentaba comunicarse conmigo por lo que le deje entrar.

>>Tenemos problemas Sav, será mejor que salgas de donde te encuentras.

Mire al castaño parado frente a mí con una sonrisa en sus labios al parecer el hecho de haber estado a punto de tocarlo le había puesto de esa manera.

>> ¿Qué sucede? ¿Todo va bien? –Pregunte a mi hermano que aún estaba dentro de mi cabeza.

>> No lo creo... Algo va mal en la manada.

Fruncí el ceño ante las palabras de mi hermano.

>>De acuerdo, te veo en el estacionamiento.

Dicho esto corte la conexión y me limite a darle un último vistazo al castaño antes de darme la vuelta y caminar.

Era de esperarse que el caminara a mi lado, cuidando de no establecer contacto alguno, lo cual agradecí mentalmente.

-No puedes irte.

Pare y lo vi con una mueca de disgusto.

-Aun no te acepto –Eso fue suficiente para dejar al chico con la cara estupefacta.

Sabía el poder que aquellas palabras podían hacer en cualquier licántropo pero ahora mismo necesitaba ir con mi Sam y averiguar qué era lo que estaba mal con la manada.

No mires a mi lunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora