CAMILA

5. ¿Sara?, ¡¡¡o no!!, ¡¡a correr se a dicho!!!.

Cuando la vi, me voltee con los ojos abiertos casi como platos, no sabía si correr o quedarme quieta y esperar a que ella llegará hasta donde estaba para bombardearme con preguntas, como:

¿que haces aquí, ya deberías de estar arreglandote?, ó ¿ya sabes que te pondrás?, y en un caso más extremo: ¿piensas que esto es un juego?. NOOOOO!!! En definitiva no quería eso, entonces guarde lo más torpemente y rápido mis cosas y me decidí a correr.

No sabía en donde esconderme, de cualquier modo Sara me encontraría, me tenía como su presa y por más que corriera me alcanzaría.

Pero finalmente y para mi fortuna había mucha gente amontonada en una tienda de ropa, como es de esperar en su mayoría mujeres, por lo tanto aproveche para esconderme entre la multitud.

Tomé un sombrero de esos que son para el sol, unas gafas obscuras, una bufanda de tela delgada, cambié mis zapatillas por unas que estaban cerca y por último finjí estar viendo mi celular.

Sara entró a la boutique y comenzó a buscarme por todas partes como si fuese yo en ese momento la aguja en el pajar.

Por supuesto que yo no me deje ver.

Pero, justamente cuando estaba cerca de mi, su celular comenzó a sonar, refunfuñando iso un gesto de aprobación, no se... talvez era su esposo que ya la quería ver o alguien más que la buscaba.

Se dio media vuelta y se dirigió a la puerta giratoria para luego irse.

Lo cual me pareció extraño ya que ella nunca se rendía tan fácil. ¿Acaso la suerte comenzaba a sonreirme?.

En mi rostro una sonrisa grande y unos ojos cristalinos tomaban forma, revise mi reloj, eran aproximadamente las 7:30 pm.

-Mmm... Esta bien ya es hora de ir a casa- enseguida me quite los lentes de sol y todo lo demás que llevaba puesto.

Busque mis zapatillas, y como era de esperarse no encontré nada, talves alguna tipa los metió a su bolso y se los llevó, de nuevo mi mala suerte estaba de regreso.

-Ufffff... ¿Que mas me falta?- pensé para mis adentros mientras compraba el par de zapatillas que me había puesto, bueno por lo menos iba a estrenar zapatos ¿no?.

Desganada caminé hasta la central de metros, habían personas con niños llorando, otras más vendiendo golosinas, novios, personas de gustos extravagantes, y yo entre todos ellos tratando de subir al metro, oliendo la misma pestilencia a pasuco.

Después del viaje en metro decidí ir a pie a casa, normalmente tomó un taxi o un colectivo, pero hoy no quise.

Podía ver a los chicos animados, y como no!!! Hoy es viernes de borrachera, de fiesta, pero a pesar de ser un día único en toda la semana y de que tenía planes para la noche, lo único que quería era descansar, el día de hoy había sido muy duro.

Casi por el edificio donde vivo, hay un parque, quería sentarme y mirar el atardecer un rato, por lo menos 15 minutos.

El crepúsculo era bellisimo en verdad. ya hace mucho que había olvidado que el sol en una despejada tarde es maravilloso, cerré mis ojos.

me relajé.

Podía sentir que los últimos rayos de sol acariciaban dulcemente mis rostro y parte de mis piernas, la ciudad te vuelve frío, aunque no te des cuenta. y sin pensar solté un suspiro.

Haaa!!! Relajación total...

Y entonces.... Lo último que escuche antes de recibir un fuerte golpe en el rostro fue ¡aguas con la pelota!....

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Hiiii!!! yo de nuevo, bueno ya subí nuevo capitulo, (baaa... ¿Acaso no es obvio?, Misheru reacciona, *cachetada*) jejeje bueno, espero que aya sido de su agrado, si les gustó y quieren que siga escribiendo recomiendenlo o de paso punteen, cada voto hace que siga escribiendo y me animé a seguir!!! Si algo no les está agradando de la historia o x cosa comentenlo para saber su opinión, agradezco que ayan leído hasta aquí, los que den seguimiento a la lectura ( por ahora no más de dos, pero aún así me sigo animando a escribír, porque para mí son personas muy valiosas :3) bueno gracias y hasta la próxima!!!!....