The Neighbourhood Psycho

[7] Wake Up To The Jungle

Punto de vista de Liam

Aquí estaba, apunto de termina el trabajo sucio de Harry y entrar pronto a nuestro destino.

Me vestí bien y atractivamente, queriendo parecer presentable cuando le fuese a dar la noticia a la familia de Ty. Una parte de mí se sentía mal, Ty me gustaba de hecho. Era una buena chica, tenía generosidad en su corazón.

Pero yo no era humano, justo como Harry, se supone que no podemos sentir simpatía por ningún ser. Éramos algo que nadie nunca ha oído hablar o ni siquiera saber que existimos. Algo dentro de nosotros, algo con lo que nacimos y escondemos. Nada sobre mí era normal, físicamente era como cualquier otra persona, pero por dentro algo malvado me poseía y solo sofocaba mi alma cada vez más con el paso de los minutos.

Toqué la puerta delantera, segundos pasaron antes de agradecer al ver a la que suponía que era la madre de Ty. No se veía muy bien. Sus ojos estaban hinchados y casi inyectados en sangre. Como si no hubiese dormido nada y por no mencionar que su maquillaje estaba arruinado. Todo por nosotros.

"¿Puedo ayudarte?" Murmuró, absorbiendo su nariz y abrazándose a sí misma.

Asentí, aclarando mi garganta. "¿Ty ha venido a casa?"

Sus ojos cayeron vidriosos y lágrimas se derramaron de ellos. "No, no lo ha hecho." Se atragantó, sacudiendo su cabeza y limpiando la tristeza que desprendían sus ojos.

Suspiré, sacudiendo mi cabeza y pellizcando el puente de mi nariz. Ella tenía que creer lo que estaba diciendo, esto tenía que ser real para ella. "No la he visto desde la película, fui al servicio y al volver ella se había ido. No he escuchado hablar de ella desde entonces."

Movió su cabeza negando. "Eso no puede ser verdad. Ty nunca se escaparía sin decirle nada a nadie donde se iría. Ella no es así."

Asentí, sintiéndome cálido internamente ya que mi mentira se estaba haciendo creíble y ella estaba cayendo en mi trampa. "Ya veo, continuaré buscándola, debería denunciar su desaparición. No pudo haber ido muy lejos."

Ella asintió de acuerdo. "¿Le gustaría entrar y ayudarnos" Necesitamos toda la ayuda que podamos conseguir." Dijo, asentí y ella me dejo entrar sin dudarlo.

*

Punto de vista de Ty.

Mis ojos pesadamente se abrieron y mi cuerpo se sentía débil. Miré a mí alrededor, la oscuridad se fue. La alta velocidad de caer y el viento se fueron. Los árboles verdes cubrían todo lo que veía. ¿Cómo pude llegar hasta aquí? Estaba en una habitación oscura, cayendo de una puerta con una luz y termine en la jungla o eso parecía.

Mi cabeza aun sufría de un horrible dolor. Lentamente me levanté, tropezando un poco pero rápidamente me estabilicé. Miré a mis ropas, rotas y sucias, apenas sosteniéndose en mi figura. Tenía que ser un sueño, no hay manera de que esto sea real.

"Despierta. Vamos Ty... Despierta de una maldita vez." Susurré, buscando una señal o dirección a donde podría moverme.

Empecé a caminar hacia el único camino claro que vi que no estaba lleno de árboles, o cualquier cosa verde que tuviese que ver con la naturaleza. Recé para que ningún animal intentase perseguirme. Sabía que esos animales salvajes no eran siempre tan amigables.

Jadeé al oír pasos detrás de mí y me volteé casi inmediatamente. Mi respiración aumentó al no ver nada. Me sacudí al sentimiento de que alguien más aparte de mí estaba aquí y no era bueno. El sonido de las hojas siendo empujadas hacia un lado me hicieron mover la cabeza a la derecha, allí no había nada pero las hojas continuaban moviéndose. ¿Qué las hacían moverse? No tenía ni idea.

"¿Hola? ¿Hay alguien ahí fuera?" Pregunté, asustada de mi propia elección de palabras.

Esperé minutos por una respuesta pero en lugar recibí pájaros volando sobre los árboles. Cuanto más caminaba, más ansiosa y paranoica me volvía. No podía ser la única aquí. Alguien tuvo que traerme aquí, ¿pero cómo? Esa pregunta rondaba todo el rato en mi cabeza pero no tenía ninguna pista para responderme.

Justo entonces, la piel de mi brazo fue golpeada por una punzada de agua. Miré hacia arriba, comenzó a llover y yo me sentía sin esperanzas. Gemí frustrada, pasándome la mano por mi pelo. El cielo se volvió más melancólico y menos claro que antes, el sol se escondía de mí.

Un disparo se escuchó no muy lejos de mí, me congelé y miré a los alrededores con los ojos muy abiertos. Había gente aquí, no estaba sola. Sus pasos se podían oír pero yo no los podía ver, solo podía escuchar las palabras que decían.

"¡Le encontré! El chico está por este camino." Un hombre gritó, pasos pesados y fuertes se escuchaban corriendo cerca de mí.

No eran buenas personas, podía sentirlo pero ellos no me estaban buscando. No importaba, huí corriendo. Quitando las hojas y ramas que se interponían en el camino. Encontré algo fuerte, escondiéndome dentro de la naturaleza y rezando para que no me encontrase. Mis ojos miraron entre las ramas, mordiéndome el interior de las mejillas mientras retrocedía una vez que los pasos se desvanecieron.

Suspiré aliviada, descansando mi mano en mi corazón y sintiendo mi emoción de miedo desvanecer. Una risa silenciosa salió de mis labios. Estaba bien y nada malo iba a pasarme. Todo lo que tenía que hacer era despertarme y estar a salvo de las personas con armas.

Una vez que regrese a mi lugar de antes, mi espalda chocó contra un amplio pecho haciéndome chillar y que me gire rápidamente. Cubrí mi boca con mis manos, un hombre estaba de pie enfrente de mí pero la sombra de las ramas y hojas le mantenían oculto en la oscuridad. Podía ver una cosa, sus ojos estaban enmarcados por unas gafas.

Lo vi quitarse sus gafas, la luz proveniente me permitió ver una sonrisa propagándose por su boca y sus ojos verdes se encontraron con los míos. "Te ves asustada mi querida, no lo estés, papi está aquí." Murmuró.

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[n/a] Se que es un poco confuso pero confíen en mí, lo entenderán pronto, recuerden que la historia es como un puzle.

Esta semana he actualizado tres  veces, ámenme

voten y comenten xx.