Trucos psicologicos.

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-¿Camila? ¿Qué haces aquí?-Le digo sorprendido al verla en mi sofá sentada.
-Quería saber si, ya encontraste a Nick.-Me dice seria.
-¿por qué?
-No lo has encontrado, pues yo lo encontrare.-Sin más, se levanta y sale ¿furiosa? De mi departamento.
¿Cómo es que entró?

Camila, se había portado muy rara estos últimos días, parece desesperada por encontrar a Nick. Yo ya no lo estaba del todo, sé que el esta bien y que se encontrará conmigo en el momento en el que él se sienta listo para decirme por que tanto misterio.
Mientras tanto viviría mi vida. Con mi nueva amiga, Emma.

<<Hey Hermano!>> Me dice Nick sacándome de los pensamientos que seguro estaba escuchando.
<<¿por qué Camila te está buscando?>> le digo de lo más normal. Observando alrededor de mi, ya sé que está aquí observándome.
Me concentro como si fuera yo quien se metiera en su mente, tal como lo hice en la cafetería.
Lo logro. Ahora estábamos los dos en un lugar totalmente blanco, como si estuvieran sólo nuestras mentes juntas. Lo podía ver y el me podía ver a mi. No dudé en abrazarlo y darle unas palmadas en su espalda. Ya lo extrañaba demasiado.
-Wow, sorprendente hermano, después de todo te has dado cuenta que un don, no es una maldición.
-He perdido mi don. He perdido la muerte en mi tacto.-Le contradigo
Él ríe.
- No es así, hermano has podido controlar tus dones, ahora mismo podrías ver mi muerte si quisieras-dirijo mi mano a la mano de Nick.- No era literal, ahora sólo nuestras mentes están charlando en si, no estamos hablando físicamente. Aún que lo parezca.
-Oh- miro la palma de mi mano, y veo que soy translucido.
-Emma no es para ti.-Me dice.
-¿De qué hablas? Sólo somos amigos.
-Pero quieres algo más con ella. Lo he notado.
-Camila ya no es la misma.
-Tienes que estar con Camila, estar con Emma es imposible.
-No entiendo.
-Ella es una chica muy... como decirlo, es... su papá es muy celoso, y no se hablé de su hermano.
-¿Eso es un impedimiento?
-Camila, ella es el impedimiento.-frunzo el ceño, no entiendo lo que me quiere decir.- la lastimarás. Ella cree que son novios.
-Jamás fue oficial.
-¿Te estas oyendo? Suenas como un patán-me dice, negando con la cabeza, desaprobando.
Me callé. Tiene razón, debo seguir con Camila.
-Da igual, Emma me agrada, y no como amigos. La conocí mientras estabas en coma.
Mierda.
-Prométeme que no te acercarás a ella.
Se formó un nudo en mi garganta.
-Lo prometo.
-Gracias.
Enseguida un remolino negro me traga, regresándome a mi departamento. Reflexiono en lo que acabo de escuchar de mi amigo. No podía hacerle daño a mi amigo, ni a Camila.
Tengo que ver las cosas de otro modo, necesito cambiar a Camila. Necesito a la Camila que me gustaba.

Salgo del auto con un ramo de tulipanes amarillos, los escondo detrás de mi y toco la puerta.
-¿Qué quieres?-Ha cambiado muchísimo.
La Camila de antes me hubiera recibido con un abrazo.
-Necesitaba verte-Me acerco a ella dándole un beso tiernamente en la mejilla.-Te he traído esto- aparezco los tulipanes y se los extiendo.
-Gracias-Los toma y se mete a su casa, cerrandome la puerta en la cara.
Estoy seguro que si decidiera estar con Emma, no le rompería el corazón a Camila. Si es que tiene.
Estoy apunto de irme hacia mi auto, pero Camila abre la puerta y se lanza a mi. Dándome un abrazo.
-Lo siento, no he estado bien en estos últimos dias, mi abuela-Sus ojos se llenaron de lágrimas-Mi abuela ha muer...- no pudo acabar la frase, ella empezó a llorar a llanto.
-Yo tampoco me he portado del todo bien contigo-Reconozco, tal vez, ella seguía siendo la misma.
Me invita a pasar a su casa, comimos algo y después nos pusimos a jugar serpientes y escaleras en su sofa, tratando de que ella olvidará su sufrimiento y saliera a la luz la Camila que conocía.
-Gracias Edmond-Me toma de la mano.
-No hay de que, no quería perder a la linda Camila que conocía, haría lo que fuera para que no sufrieras.
Ella sonríe, nos acercamos indecisos uno al otro. Nuestras narices rozaban, hasta que sucedió. Nos besamos lentamente. Siento como su mano toma mi cuello y después se pasa a mi cabello. Yo no me quede quieto, la tome por la cintura, acercándola más a mi.
En eso, se me vino la imagen de Emma. Abrí los ojos que ignoraba que tenía cerrados, para ver a Camila, pero lo que vi, fue la cara de Emma.

Hace un par de semanas, que Emma y yo nos conocimos, no hicieron falta muchos días para saber que me gustaba Emma. Soñaba con ella muy seguido, me encantaba la idea de ser novios, ir tomados de las manos y caminar por la noche iluminada por la luna.... Algo que no imaginaba con Camila, pero la quería.

Al ver que era Emma- o por lo menos eso era lo que me imaginaba- intensifique el beso, la bese con demasiado amor. Aferrandola más a mis labios. Ella empieza a pasar sus manos por mi muslo y seguir arriba, mete la mano debajo de mi playera, acariciando mi torso desnudo. Iba demasiado rápido. Ella se acomoda en mi pierna derecha.
<<Edmond esto no es de caballeros>> me decía el Edmond caballeroso
<< ¡Para!>>Me decía Edmond romántico.
<<Deseo estar con ella>>Respondí a todas las voces.
<<Emma, piensa en lo que sentiría, si se enterara>> me dice el Edmond enamorado.
<<Emma es de Nick, debo olvidarla>>Así consigo apartar las voces de mi cabeza y decido seguir haciendo lo que estaba haciendo.

Me despierto en mi auto, estaba afuera de la casa de Camila. ¿como llegue hasta aquí? Hace un momento estaba con ella. Salgo de auto y toco su puerta.
Ella abre enfadada.
-¿Que quieres?
-¿cómo que qué quiero?
-¿No te basto con cerrarte la puerta en la cara para que supieras que NO quiero verte.?

¿Había sido un sueño? ¿Una visión?
Un día había leído acerca de los trucos psicológicos en la saga de hush hush, tal vez era eso, ja, ja. Imposible.
Como sea, eso me ha hecho pensar cosas. Ahora lo único que quiero es jamás caer con Camila. Si no voy a estar con alguien que no sea Emma. No va a ser Camila.

Edmond MaxonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora