Tulpas

Capítulo 9: Confianza.

-¡¿Cómo has sido tan estúpida para crear un tulpa?!

-Lo siento, me sentía tan sola que vi eso y en un instante ya estaba ahí , en una esquina de mi habitación.- No pude evitar solar lágrimas.

Lane desinteresadamente me abrazó para consolarme.

-Hannah, lo peor de todo es que has sido tú la que se apartó de todos, nadie jamás te rechazó.

Recuerdo que hasta octavo grado eras muy popular entre los chicos, hasta a mi me gustabas. Aunque las chicas sentían algo de envidia de todas formas te invitaban a sus fiestas.

-Pero...aún así, las chicas siempre decían cosas malas de mí por agradarle más a los chicos, eso terminó hiriéndome y preferí alejarme de todos.

-Pero mirate ahora, terminaste en una situación horrible por no hacerle frente a las cosas.

Sequé mis lágrimas.

-Hannah, me gustas y no dejaré que nada te lastime.

Esta vez le correspondí el beso. Lane, en verdad era un buen chico que buscaba ayudarme.

Volví a casa sin miedo esta vez, quedaban 10 minutos antes de que Alex llegara.

Tomé unos libros y me puse a estudiar para que no sospechara nada.

Durante 2 días mi tulpa se había estado desapareciendo mucho, llegaba tarde.

Lane me llevó a la biblioteca, buscamos información sobre estos seres pero no aparecía nada, estaba plagado de best sellers. Como dice él. .."libros basura".

Esperábamos encontrar algo, pero sólo encontramos libros llenos de polvo o contenido "basura".

Ahora podía estar más tranquila, con las constantes desapariciones de Alex

Un sábado por la mañana Lane el chico de ojos avellanas se apareció bajo mi ventana con una carpeta azul.

Lo hice pasar.

-¿Qué traes en la carpeta?

Lane sin detenerse a mirarme puso la carpeta sobre la mesa y la abrió. Eran decenas de hojas e imágenes extrañas.

-Mira, aquí .-Dijo apuntando a un párrafo.- Esto dice que los tulpas no pueden ser destruidos hasta que el creador lo sea...

Sentí que mi corazón se había detenido por un instante.

-...pero solo si este es más débil que el mismo tulpa.

-Alex...él sin duda es más fuerte que yo.-dije susurrando lo que pensaba.

-¿Alex?

-Si, así se llama.

-¿Le has puesto nombre? ¡Hannah, esa cosa no es como una mascota con la que te encariñas y lo nombras, ésto puede destruirte!-Se dio una vuelta y se sentó.

-Espera... ¿Estás celoso?

-¡Claro que no!- desvió la mirada.

-Jajaja

-¿De qué te ríes? Frunció el ceño.

-Luces adorable, siempre en esta clase de situaciones te das una que otra vuelta y te sientas, eres algo predescible.

Lane sonrojó. No había visto una expresión así de él jamás.

Se paró e hizo como si nada, aunque aún sonrojado.
-Bien, acá dice que no debes tener miedo, que se alimentan de eso.

-Oye mira eso." Los tulpas son criaturas que deberían ser creadas por budistas, debido a sus capacidades mentales y utilizaciones de estos"...¿Qué significa?

-Creo que deberíamos hablar con un budista, sería de mucha ayuda.

-Lane, estamos la próxima semana estaremos en periodo de pruebas.

Volvió a dar vueltas por el alrededor con su mano en la barbilla.

-Ya te diré.

Tomó su carpeta y se fue. La casa estaba algo vacía, después de todo soy hija única y mis padres tienen jornada completa, si es que no se encuentran de viaje.

Tomé mi celular y busqué más información sobre los tulpas.

Al día siguiente

-¡Hannah!

Se oyó a lo lejos en el pasillo. Volteé.

-Hola, Lane.

-Ya no quiero que estés sola por los pasillos.

-Pero...

-Pero nada, habías avanzado tanto, no dejaré que retrocedas por culpa de esa cosa.

Aunque fue Alex quien me hizo avanzar, por otra fue Lane.
Tomó mi mano sin preguntar y me guió hasta la clase de literatura.

-Gracias.

¿Por qué era que Hannah me agradecía? Yo estaba agradecido de poder estar con ella. Por ver su sonrisa haría cualquier cosa.

Me enamoro más de ella cada vez que veo alguna expresión, siempre descubro algo nuevo de ella.
Aún no puedo creer que quise olvidarla porque me rechazó en un baile.

Al recordar ese año, volvió a mi cabeza desagradable recuerdo, siendo rechazado y luego verla con otro. Produjo asco en mi, el sentir celos ...sin embargo, también curiosidad.

¿Por qué era que ella prefirió a otro? Debía preguntárselo.

Salí de mi clase de literatura.
Salimos un poco antes de clases porque debían hacer unos arreglos en la escuela.

-Hannah, vamos por unos helados,¿si?

-Claro.

De a poco, Lane se había ganado mi confianza. Si bien antes no tenía a nadie, ahora tengo al presidente estudiantil como mi confidente

Alex no apareció en todo ese día.