Yo no soy Él

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El joven voló y voló hasta que sus nuevas y poderosas alas no dieron más, se percató de que tal como habían salido habían entrado en su piel. Por suerte la chica no había tirado su cartera, pues así tendría como llamar a Jun para que le viniese a buscar. Los chicos no se demoraron tanto como él esperaba, al parecer no había volado tan lejos de Tokio.

-¿qué pasó con Neko?, ¿cómo escapaste Nobuhiro?-preguntó Sho al ver al chico

-no me vuelvas a llamar así, ese no soy yo- calló inmediatamente después de eso, sus labios quedaron sellados.

Desde un automóvil bajo Tenshi y corrió a abrazar al chico. Aquel cálido abrazó le recordó la sensación de sentirse en casa, pero eso sólo duró unos segundos.

-¿Nobu?-dijo la mujer completamente extrañada

-no me vuelvas a tocar, tu eres mi enemigo, una caza vampiros- dijo el Leonard sin mostrar ninguna emotividad

-¿pero no me reconoces?, soy tu madre- su voz temblaba y se quebraba

-sé quien eres y quien es Neko, incluso sé quien es Louis y Yuko, recuperé mi memoria, pero eso no significa que seré un niño bueno desde ahora en adelante y volveré a tu falda- casa palabra era como ácido que era vertido en el corazón de la mujer

-pero...-

-pero nada, yo ya no pertenezco a su familia, ¿que acaso tu cabeza es tan dura que no logra entender algo tan simple?. Desde el momento en que Fui convertido en vampiro dejé de pertenecer a ella-

-¡puedo matar a ese vampiro y devolverte a la normalidad!-gritó desesperadamente, haciendo que Jun se percatara de que no era alguien confiable
-esto es el único recuerdo Útil que me queda de pertenecer a ti familia- desplegó sus alas, a lo que la mujer soltó las lágrimas que estaba conteniendo-yo ya no puedo ser salvado, ¿por qué las mujeres de esta familia son tan necias?, esa tonta de Neko también me insistió en lo mismo-negando con la cabeza y volviendo a ocultar sus alas

-¡NOBUHIRO!-dijo al verlo caminar hacia el helicóptero

-Nobuhiro esta muerto, vamos chicos-la tropa de vampiros se montó en el aparato y despegó sin más

Una vez dentro del helicóptero el chico colocó su cabeza entre las piernas y Sho, quien estaba sentado junto a el posó su fría mano sobre la cabeza del joven.

-no es lo único que heredaste de su familia, el actuar y esconder tus sentimientos tan bien también lo heredaste de ellos- palmeando la espalda de Leonard, la que se sacudía fuertemente debido a los espasmos de su llanto silencioso.

La joven despertó en un lugar desconocido, una cama en la que jamás había estado y no parecía para nada un hotel. Mientras más miraba a su alrededor, más se convencía de lo anteriormente pensado.

-¿cómo despertó mi bella durmiente?-dijo el castaño desde la puerta de la habitación

-¿dónde estamos?- preguntó a secas
-estamos en la casa de campo de mi madre-

-¡es una mala idea, salgamos de acá!-nerviosa intentando ponerse de pie

-tranquila, esta casa está bajo el apellido de soltera de mi madre-

-eso nos dará un poco más de tiempo, pero no lo hace un lugar completamente seguro cariño-

-tú tan sólo descansa, has pasado por mucho estos días, te lo mereces-

-¿estos días?, ¿cuánto tiempo llevo durmiendo?-alarmada intentó buscar algo con la mirada que respondiese a su pregunta más rápido que su novio.

-tres días, ya estaba comenzando a inquietarme-

-¿puedes dejar de ser tan egoísta y dejarme ir a buscar a mi hermano?-dijo la joven furiosa

-¿egoísta yo?, tu eres la mujer terca y egoísta que no quieres aceptar que tu hermano no quiere estar con ustedes, ser como ustedes- el joven se comenzaba a alterar

-pero es mi hermano y está mal, debo ayudarle-

-si él no quiere tu ayuda, no puedes ayudarle, sobre todo si es igual de terco que ustedes dos-

-¿qué pasó con mi madre?-

-vino ayer, me contó lo que le había dicho tu hermano y es por eso que te insisto en que lo dejes de perseguir, al menos después de esto hay una relativa paz... Obviando alguna que otra muerte que tu madre les adjudica a ellos-

-¡Son alimañas que no deberían seguir existiendo!-dijo con rabia

-no transformes tu impotencia en odio, te hará mal, además, siempre estará la posibilidad de que tu madre vuelva a matar a Jun-

-después de esto dudo que se le pueda acercar siquiera, estará más alerta que nunca-

-¿te parece si mandamos a la chica nueva a colarse en la agencia?-

-sólo lograrías que la encuentren y la maten-

-¿qué podemos perder?, no la conocen-

-¡tienes razón!-la joven comenzó a sonreír

-¿ves?, todo tiene solución-

El vampiro perfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora