My simple life? [PAUSADA]

CAPÍTULO 11

Hoy ya es domingo. Me levanto muy perezosamente, hoy va a ser un gran dia (nótese mi sarcasmo).

Ya son las 11, me voy a desayunar y mientras miro mi serie favorita, Teen Wolf.

Cuando acabo, me visto y me peino para ir a comprar el pan.

Llego a casa y me pongo a acabar los deberes.

Los acabo y ya casi son la una y media. Recojo la mesa y ayudo a mi padre a hacer la comida. Mientras, mi madre aun esta trabajando.

-Aina, ¿puedes hacerme un favor?

-Dime papá.

-¿Puedes pedirles a los vecinos un tomate?

-Si, ahora voy.

Salgo por la puerta, llamo y un Dy aún medio dormido me abre la puerta.

-Hola preciosa. ¿Que haces aquí?

-¿Tienes tomates?

-Creo que si. ¿Porqué?

-Esque mi padre necesita uno para la comida.

-¿Que hora es?

-La 1:30 del mediodía. ¿Aun estabas durmiendo?

-Sip.- me contesta bostezando.

-Vaya marmota... Bueno, ¿me das un tomate?

-Claro, pasa.

Entro en su casa, no había nadie.

-Mis padres han ido a comprar como siempre, supongo. Pero aún tenemos tomates...- dice mientras me lo da. -Hoye, ¿esta tarde tienes planes?

-Si, lo siento. Hoy viene una prima que hace tiempo que no veo a mi casa.

-Vale, pues nos vemos mañana.- y se despide de mi.

Me voy a la cocina y le doy el tomate a mi padre.

-Gracias.

-De nada.

Mientras acaba de hacer la comida, yo preparo la mesa. De repente mi móvil empieza a sonar.

-¡Hola prima!- es Diana, mi prima pequeña.

-¡Hola Diana!

-¡Hoy nos vemos! ¡Ya tengo ganas de verte!

-¡Sii! ¡Y yo!

Mi prima y yo siempre nos habíamos llevado bien, ella era como mi hermana pequeña.

-¡Tengo que explicarte muchas cosas!

-Es un chico, ¿verdad?- que bien que me conoce. -Yo también te tengo que contar una cosita...

-Bueno, nos vemos luego que voy a comer.

-Yo también, ¡chao!

-¡Adiós!

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Llaman al timbre, voy rápido a abrir la puerta y...

-¡Aina!- es mi prima, esta chillando, se tira encima mio y me abraza muy fuerte, yo hago lo mismo.

-¡Diana!

Nos desenganchamos y vamos a mi habitación a hablar.

-¿Y como es ese chico?

-Bueno...pues es muy guapo, es simpático, se llama Dylan y...es mi vecino.- entonces empiezo a reír.

-¡¿Como?!

-Sip, lo que hoyes.

-¡Presentamelo!

-¡Una mierda!- y las dos empezamos a reír -¿Y tu chico?

-A ver, se llama Aaron, y bueno, esta muy bueno.- empezamos a reír como locas.

-¡Y los mios!- se me escapó.

-¿Como que mios? ¿Plural? ¿Esque hay mas?

-Eh...no no...

-Aina, te conozco bien. Dime la verdad.

-Hay uno...se llama Ruben...- y le expliqué la larga historia.

-Prima...estas jodida.

-Lo se.

Justo en ese momento nuestros padres nos llamaron para cenar, después, Diana se iría a un hotel. Ella tenia una semana libre.

Fuimos a cenar, cuando acabamos, se fueron. Pero durante esa semana seguiríamos viéndonos a ratos.

Me lave los dientes y me fui a mi habitación y me di un susto de muerte. Estaba Dy en mi habitación. Sentado en mi cama sin camiseta, solo con unos pantalones por la rodilla.

-¡¿Pero que haces aquí?!- dije cerrando la puerta.

-Te tenia que preguntar algo...

-Dime.- dije un poco molesta. Ya tenía sueño.

-¿Me puedes decir el horario?

-¿Ahora? Me da mucho palo...

-Porfii.- dijo haciendo un puchero.

-Esta bien.

Le di mi horario y le hizo una foto con el móvil.

-Gracias. Que duermas bien preciosa.- y me dio un beso en la frente.

-Buenas noches Dy.- y se fue por el balcón.

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Lunes, 21 de septiembre.

Ya era la hora del patio y decidí explicarles a mis amigas lo de Dy.
Se quedaron boquiabiertas.
No se podían creer que saltara el balcón solo para hablar conmigo.

-Bueno, yo también tengo que contaros una cosa muy fuerte...- dijo Ainhoa casi susurrando.

-Cuenta cuenta.- le dijo Lara.

-El otro día, mientras estaba en casa...pues...estaba tirada en mi cama...y...

-¡Ve al grano!- chilló Cristina. No podía esperar mas.

-Pues...- siguió Ainhoa.