11.Apoyo

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La alarma programada por Asuna segundos antes de caer dormida en los brazos de Kazuto sonó en la habitación,haciendo al invitado secreto abrir lentamente los ojos,todavía medio dormido y con ninguna gana de levantarse.

Se frotó los ojos con su mano libre,pues la otra estaba sepultada bajo en delgado cuerpo de su acompañante,sirviéndole como parte del colchón.

Sonrió dulcemente y le acarició su larga cabellera con mucho mimo.
Su pelo le encantaba,era algo que siempre le había enamorado,desde mucho antes de comenzar algo más que una amistad.

Siempre la veía en la batalla,ondeando su cabello al viento,siendo testigo de los cientos de enfrentamientos a los que una joven de entre 15 y 17 años tuvo que hacer frente para recuperar su vida.
Sin embargo,ella nunca se rindió y siempre luchó por su liberación y la de sus amigos,era por eso que ahora estaban ahí.

--Asuna...--susurró,intentando despertala--Asuna es hora de despertar,tu madre va a venir a levantarte en 5 minutos,

La pelirroja no hizo ademán de moverse,pues parecía muy cómoda en aquella posición,todavía intentando quedarse dormida.

--A-su-na--la llamó de nuevo,tirando de su moflete.Asuna gruñó y apartó su mano para seguir durmiendo--Eres un caso,luego el dormilón soy yo--rió mientras se acercaba hasta su cara la besaba despacio,esperando una reacción que llegó antes de lo previsto,pues pasados unos segundos,los labios femeninos comenzaron a moverse con calma.

Se separó de ella,siendo testigo de cómo sus ojos color miel brillante comenzaban a hacer acto de presencia.
Para él,era un privilegio poder observar como su querida novia despertaba,pues era un lujo que había perdido en Aincrad y que extrañaba con locura.

--Buenos días Kirito-kun--fue lo primero que dijo con su cara adormilada de cada mañana.

--Buenos días Asuna--la saludó con normalidad,hasta que se dió cuenta del detalle tan importante que no había notado hasta ahora.
Asuna nunca había llegado a cambiarse de atuendo,por lo que había dormido con esa camiseta que exhibía demasiado y que,en estos momentos,enseñaba su pecho de manera alarmante.
Se giró,nervioso,y se rascó la mejilla,intentando encontrar las palabras adecuadas para hacer entender que no era un pervertido.

--A-Asuna...ummm...tu atuendo...

Asuna,que aún estaba medio dormida,se frotaba los ojos perezosamente mientras se quedaba sentada en la cama con las piernas cruzadas,dándole un aire muy tierno que no encajaba con la vestimenta que llevaba.

--¿eh?--preguntó mirándole con ojos somnolientos.

--T-Tienes que taparte...--siguió intentándolo,a pesar de estar completamente colorado.

La medio dormida se despertó de golpe al mirar hacia abajo,encontrándose con su pecho al descubierto,mostrando casi por completo su ropa interior.
Se coloreó por completo y tomó todas las sábanas que pudo para taparse.

--K-K-K-Kirito-kun...--reclamó,entre enfadada y avergonzada,más lo segundo que lo primero.

Kirito se colocó en posición defensiva.

--T-Te juro que no era mi intención mirar.Me desperté y te vi así...--intentó escapar de esa peligrosa situación.

Asuna puso un puchero y se recolocó la camiseta para poder tirarse de nuevo hacia él.

--¿que tal dormiste?

Kirito suspiró tranquilo al ver su tono normal de vuelta.

--Genial,aunque no sabia que te movieras tanto¿eso siempre fue así?--bromeó,sabiendo que se avergonzaria.

Las rivales se muestran(cancelada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora