Negación

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Segundo capítulo, espero lo disfruten :D

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Haruka parpadeo varias veces de manera rápida analizando las palabras que había mencionado aquella chica que decía ser su mejor amigo. La chica en cuestión, seguía sonriendo hasta que notó que el pelinegro no parecía reaccionar.

-¿Haru?-le llamó preocupada pero aun así el pelinegro no parecía reaccionar; la castaña colocó su mano frente a la cara del chico pasándola rápidamente a ver si reaccionaba. Al parecer funcionó porque Haruka hizo un leve movimiento con la cabeza para mirar de arriba hacia bajo a la chica-¿Haru? ¿Estás bien?-con esa simple frase el chico al fin reaccionó de la manera más lógica en la que un sujeto en su situación haría. Cerró la puerta y salió corriendo al baño.
Haruka se mojó varias veces el rostro, seguro estaba soñando o le estaban gastando una broma; descartó eso último. La castaña parecía ser el resultado de un cuadro pintado por un artista experto que había retratado a su mejor amigo en versión mujer, los ojos eran exactamente los mismo, no sólo por el color ni por el tamaño, no eran de su madre ni de su hermanita, eran los de Makoto tal cual como sí se los hubiera arrancado y transferido.

-Estoy soñando-dijo para sí mismo y salió del baño hacía su habitación. Seguramente al cerrar los ojos en su cama despertaría de nuevo pero al entrar notó ciertas cosas que no estaban bien con su cuarto. Para empezar, no estaba el trofeo que ganaron cuando tenían doce en el relevo. Segundo, había materiales en su mesa para hacer algún tipo de manualidad, cosa que no había hecho desde que estaba en primero de secundaria. Miró con más detalle toda la habitación a ver que más cosas eran diferentes en su cuarto en ese sueño y efectivamente, había muchas. En su closet había tres bufandas diferentes, cuando en la realidad no tenía ninguna, su uniforme de la escuela estaba preparado en una silla junto con su mochila, cuando se suponía que estaba de vacaciones y lo más importante y que lo descolocó por completo fue que, en el calendario de su escritorio, la fecha era distinta. En la realidad era 28 de julio, mientras que en ese sueño era 3 de septiembre ¿Por qué?

-¡¡Haru!!-escuchó un grito afuera llamándole, era esa chica llamándolo. Se apresuró a meterse en la cama, ya no importaban los cambios de su habitación sí sólo era un sueño. Se cubrió y cerró los ojos con fuerza tratando de volver a dormirse pero no daba resultado, ya estaba despierto; siguió intentándolo pero no parecía funcionar, quizás no debió tirarse agua a la cara-¡¡Haru ¿Qué ocurre?!!-volvió a escuchar su voz y se cubrió con las sabanas tratando de dormirse.
No supo cuánto tiempo estuvo debajo de las sabanas pero en algún momento aquella chica se había metido en su casa y se las había quitado-¡¡Haru!!

-... ¿Qué quieres?-fue lo único que atinó a decirle y la chica le miró preocupada.

-¿Estás bien? ¿Te sientes enfermo?-el pelinegro quería cuestionarla, no entendía nada pero al ver sus ojos vio verdadera preocupación, una que sólo le dirigía Tachibana Makoto-Me estas asustando

-... ¿Makoto?

-Dime-respondió como lo más normal. Haruka agachó la mirada. Ahora que lo pensaba bien ¿Por qué estaba tan alterado por la situación?-¿Tuviste una pesadilla?-Se atrevió a mirarla. Ahora que lo recordaba, anoche había estado pensando en cómo sería Makoto sí fuera una chica, seguramente por eso estaba soñando eso, pero se sentía tan real la situación que debía convencerse de que esto era un sueño, por eso se había alterado y tratado de despertar. Pero sí él ya sabía que era un sueño no debía comer ansias, era sólo producto de su mente y cuando tuviera que despertar lo haría, no era como si esto fuera una pesadilla, sólo era su amigo cambiado de sexo y no transformado en un monstruo asesino.

If you were a girlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora