El efecto mariposa

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Creo que exageré un poco con las coincidencias en este capítulo ._. no lo sé ¿Ustedes me lo dirán?

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"Como ambos siempre estuvimos juntos, no era rara su presencia constante para mí. Miraba a mi lado y él estaba ahí, levantaba la mano y yo la tomaba, era la primera persona que veía al inicio de mis días y también era la última de estos; y eso que no vivimos juntos; si no lo veía a él entonces no veía a nadie en el día. No me imaginé que en algún momento eso iba a cambiar pero al parecer, quien invento la frase "con la edad vienen los cambios" no se refería solo a los cambios de la persona, sino también de su alrededor.

Cuando miré al cielo pensado que nuestra inevitable separación sí se podría evitar si Makoto hubiera nacido como mujer, no pensé que en realidad iba a ser todo más complicado. Realmente no sé ni siquiera que quería lograr con eso, simplemente estipulé sin ninguna referencia, que sí fuera una chica se quedaría a mi lado, pero todo el plan me salió al revés. Ahora ya no comemos juntos a diario, no se queda a dormir en mi casa, sale de compras con sus amigas en vez que conmigo, va a hacer lo que le gusta con su novio en vez de con su mejor amigo, y todo para que al final sí se vaya a estudiar a Tokio.
Nunca he podido imaginarme mi vida sin Makoto, ya es costumbre para mí que sea la primera y la última persona a la que vea en el día ¿Cómo lo habrá hecho el yo de esta dimensión? Con la persona más fundamental de su vida tan cerca y a la vez tan lejos de él."

Terminó de anotar en un cuaderno. Era sábado, un día de descanso para poder ordenar sus ideas y reflexionar sobre sí mismo.
Tras la plática con Nagisa, Haruka obtuvo la información necesaria para rellenar uno de sus vacíos: ¿Por qué Rin no se había alejado? Fue gracias a Makoto. No sabía bien como o que había hecho la castaña, pero en ese universo, ella había logrado evitar que Rin se derrumbara con las paredes que se levantaron frente a él en su estadía en Australia y, aunque estaba feliz de que Rin no hubiera sufrido ese tormento, le molestaba que haya sido precisamente Makoto quien le ayudara; sospechaba que eso había contribuido a que el pelirrojo se hubiera enamorado de ella. Ese era otro dilema suyo, estaba molesto por esa relación, al igual que le molestaba que Rei y Nagisa sintieran algo por ella ¿Por qué? No lo sabía, pero tenía algo que ver con lo que le había dicho su rubio amigo el otro día.
Sus pensamientos se vieron interrumpidos al escuchar su celular sonando por algún lugar de la habitación. Al encontrarlo vio que el número marcaba el nombre de su amiga.

-Hola

-¡¡HARU!! ¡¡AYUDA!!

-¡¿Makoto?!

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-¿Cómo es que estas cosas sólo te pasan a ti?

-Lo siento, debió habérseme caído mientras acomodaba mis cosas-la situación había sido la siguiente: Makoto, al regresar de la casa de Gou tras la pijamada, había decidido pasar por el centro a comprar unos postres para sus hermanitos, el problema fue que había olvidado su cartera en casa de la pelirroja pero ya había ordenado los pasteles y no tenía como pagarlos-te los pago llegando a casa, lo prometo

-Está bien, sólo revisa tener todas tus cosas la próxima vez que salgas-Haruka pagó los pasteles de Makoto. Ya le había pasado antes, con el Makoto hombre; habían ido a cenar todos juntos y el castaño había olvidado su mochila en el vestidor así que el pelinegro tuvo que pagar lo consumido por parte de su mejor amigo. Él no tenía ningún problema, estaba acostumbrado a la mentalidad despistada que poseía Makoto, además de contar con mucho dinero que le enviaban sus padres, lo que le preocupaba era que un día Makoto se metiera en un gran problema por su falta de concentración.

If you were a girlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora