Imaginando

Twitter

Al llegar a casa no podía estar de peor humor. Con un esguince en la pierna por el que he tenido que esperar tres cuartos de hora para que me mandasen hacer una radiografía. Quince minutos para la radiografía y ¡media hora para maldita venda! Y para colmo cuando llego veo un mensaje privado en twitter:

Hola Silvia supongo que ya sabrás quien soy, no mucha gente debe de llamarte asi. Te he encontrado en twitter y que menos que empezar a seguir a mi nueva amiga! Bueno ya me darás tu Skype o tu numero de móvil que me apetece acabar nuestra conversación
Ya responderás Patri

¡¡Pero este de va!! Enserio primero, como ha podido encontrar mi twitter.
¡¡Debe haber millones de personas con un usuario parecido!! Segundo, ¿cuando ha quedado claro que fuésemos amigos? Y lo mejor ¡quiere que le de mi número! Encima se hace el gracioso llamándome Silvia. ¿Y cuando le he dado yo derecho para llamarme Patri? En todo caso será Patricia. Yo que pensaba que no se podía estar más enfadada ¡pues toma! Está claro que no hay que tentar a la suerte. Decido no darle mas vueltas e irme a la cama.

Ya en la cama empiezo a pensar en el mensaje de twitter. Me hablaba de Skype. Ja,¡pero si hace años que no uso! Quizá debería hacerme. No Patri, pero ¡qué dices! Me voy a volver loca. No debería seguir pensando en eso. Sobre todo porque empezaré a imaginar una respuesta o incluso valoraré la posibilidad de de darle mi número. Pero como no, tengo que empezar a pensar en nuestra conversación. ¿Y si hubiese sido más amable? Aunque me enfade con facilidad suelo ser amable con la gente y más con la que me ayuda. Y antes de darme cuenta en el lío en el que me he metido al empezar a imaginar, me duermo.

Me despierto de repente.
Completamente descolocada. Poco a poco mi vista se fija en una pequeña luz y empiezo a ver con más claridad. Estoy en mi cuarto, no ha pasado nada. Para que este panorama se entienda mejor, se necesita saber que mi imaginación no paró en el momento en que me dormí. ¡Para nada! El caso es que he tenido una pesadilla en la que el corredor me secuestraba y por mas que gritaba nadie podía escucharme ni verme. Es raro que no haya pegado un grito en sueños. Ya más tranquila me acercó a mi ordenador y veo que son las cuatro de la mañana. Genial ya estoy desvelada, a ver que hago hasta hora de desayunar... Maldito corredor... Decido ver Teen Wolf, ya voy por la quinta temporada y la historia es cada vez mejor. Después de unos cuantos capítulos, veo que son las seis y me empiza a entrar el sueñecito así que me echo en la cama a ver si me duermo. Como no se me ocurre nada que pensar el mensaje entra en mi cabeza ¿Por qué a mí? Decido empezar a redactar una respuesta o no me dormiré. Después de varios intentos me decido por esto:

Hola Adrián. No se como has podido encontrar mi twitter, pero esa ahora no es mi mayor preocupación. Espero no sonarte muy borde pero, ¿desde cuando somos amigos? ¡Acabo de conocerte! Yo a eso no lo considero amistad. Lo siento, de verdad, pero gracias por haberte mostrado interesado en mí.

Que liberación, puede que ya pueda descansar tranquila. Espero que no haya sido demasiado dura. Quizá me haya equivocado con el mensaje. Pero justo cuando me voy a levantar para borrar el mensaje recibo uno de Adrián

Pero que madrugadora! O debería decir trasnochadora? No te preocupes que no me enfado. Quizá me haya precipitado un poco. Es que me gustaría hablar contigo sin tener un limite de palabras. Por lo que aquí tienes mi número. P.D: Yo si que quiero ser tu amigo Patrilia.

~~
Hola!! Ya pido perdón por adelantado pero he tenido una serie de problemas y he tenido que reescribir el cap. tres. Solo he hecho algunos cambios (el mensaje de Patri y algunas redacciones) Solo espero no haberos molestado con notificaciones y de más. El cap. Dos también lo he tenido que volver a subir. De veras que lo siento. Como recompensa prometo que el nuevo cap lo subiré como muuy tarde el viernes.

Bss y perdón,

Ruth