La cueva de los goblins

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Irised y Fili caminaban tomados de las manos por Rivendell cuando apareció Kili.
- Fili, te mando a llamar mi tío, tienes que ir solo- Kili sonrió
- Para qué me quiere?- Fili preguntó.
- No sé, no me dijo- Kili contestó
Kili le sonrió ampliamente a Irised
-Cuéntame todo! Besa bien?- Kili se rió .
Irised se sonrojó y asintió
-Mira ahí viene!- Kili dijo, serio.
Irised volteo emocionada pero no venía  nadie, miró a Kili molesta y le dio un suave puñetazo en el brazo.
Kili rió mas.
- Estoy feliz por ustedes- sonrío y luego se fue a fastidiar a Balin que estaba por ahí. Balin caminó rápido para evitarlo pero no pudo.
Irised se rió, sintió los brazos de Fili alrededor de su cintura abrazándola por atrás, ella tomó sus manos y se recargó en el un poco.
- Dice mi tío que es hora de irnos, amor- dijo Fili con una pequeña sonrisa
-Amor?- preguntó Irised sonrojándose
- Es mucho? No te gusta?- Fili dijo con preocupación
- Me encanta- confirmó sonriendo y le dio un suave y rápido beso en los labios.
Fili sonrió y la abrazo
-  Te amo- dijo, seguro de si mismo.
- Yo también te amo- Irised dijo sonrojándose
- Cuanto amor!- gritó Kili en la distancia, los 3 se rieron.
Horas después se fueron de Rivendell en silencio. Empezó a llover.
Fili le sonrió a Irised y la besó lento y largo bajo la lluvia después sonrió y le dio su chamarra para que no le diera tanto frío.
Caminaron con cuidado por la montaña. Fili tenía su brazo alrededor de la cintura de Irised para que no se fuera a caer.
- Busquen una cueva!- Thorin ordenó
Encontraron una cueva seca y abandonada en un lugar no tan peligroso. Thorin dudó de la cueva pero la lluvia estaba aún peor.
-Monten guardia... No confío en esta cueva, busquen que no haya nada que indique que hay alguien aquí- Thorin estaba nervioso.
No encontraron nada mas que una grieta, pero a nadie le pareció sospechoso. Acamparon ahí
Fili se recostó junto a Irised. Irised  recostó su cabeza en el hombro de Fili y uno de sus brazos en su pecho, el corazón de ambos latía a toda velocidad pero se sentían muy felices juntos. Fili puso uno de sus brazos alrededor de sus hombros y su otra mano tomó la de ella y entrelazaron sus dedos, se quedaron dormidos sonriendo.
Hubo un ruido raro, la grieta se abrió y muchos goblins salieron de ahí, los tomaron prisioneros y se los llevaron dentro de la grieta. Irised tenía mucho miedo, los llevaron frente al rey de los goblins. Fili la atrajo hacia si para protegerla cuando el rey amenazó con torturarlos.
-Donde está mi primo?- susurro Irised
- No lo sé, tienes tu espada?- Fili preguntó y le dio un suave beso en la sien.
-Si la traigo- contestó sacándola lentamente.
Gandalf hizo una luz que segó a los enemigos y empezaron a correr.
Irised, como pudo descubrió mas o menos como usar una espada. Corría junto a Thorin y Fili.
El rey se les puso enfrente.
Gandalf lo mató, todos lo vieron y persiguieron a la compañía, ya solo les quedaba correr. Lograron salvarse.
Se contaron y faltaba uno, faltaba Bilbo
Salieron de la cueva y Bilbo seguía sin aparecer.
Irised estaba triste por que era posible que nunca viera a su primo, las lágrimas corrían por sus mejillas, Fili las limpió con ternura y la abrazó fuerte.
- Va a venir, siempre se sale con la suya- Fili aseguró y le dedicó una sonrisa tranquilizante.
- Se ha ido, obvio se fue- Thorin ocultó la tristeza con enojo.
Bilbo apareció sonriendo y Thorin lo abrazó fuerte.
-No vuelvas a hacer eso- susurró Thorin cuando lo soltó.
Irised también la abrazó, no dijo nada pero el abrazo y la sonrisa que tenía en el rostro lo dijo todo.
Pero la felicidad duró poco, escucharon lobos wargo y tuvieron que subir a los árboles.
Para ahuyentar a los lobos aventaron ramas que Gandalf incendiaba pero los lobos se enojaron y los orillaron a un árbol en la orilla, abajo había un precipicio enorme. Todos sentían miedo, se daban por muertos.
Justo cuando pensaban que el árbol se rompería, las Águilas aparecieron y los tomaron en sus garras, los llevaron a su casa y curaron sus heridas. Irised le sonrió a Fili
-Mira mi amor, Erebor- mencionó y le dio un beso en la mejilla.
Fili puso su brazo alrededor de los hombros de Irised, la acercó a él y sonrió ampliamente.
- Esa es nuestro futuro hogar- Fili dijo emocionado.
Irised sonrió y asintió con la cabeza.
Fili puso sus brazos alrededor de su cintura, la levanto un poco del suelo y la besó largo y lento demostrándole en ese beso lo mucho que la amaba.
Se besaron mas y observaron el atardecer desde lo más alto del hogar de las Águilas, durmieron ahí abrazados, esperando que lo peor estuviera atrás.

Irised, la hobbitDonde viven las historias. Descúbrelo ahora