BAD ENDING.

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Eran las 5 de la tarde, estaba en mi habitación acostada en la cama, pensando en todo lo que había pasado hoy.

Recuerdos llegaban a mi mente, fugaces y escurridizos.

Y yo pensaba en una solución para todo esto, y cuando creía tener una, se hacía humo; era como querer tomar una burbuja con la mano, desaparecerían con el más leve contacto.

Estaba absorta en mi propio mar de pensamientos y no me di cuenta cuando la puerta de mi habitación se abrió, solo reaccioné cuando vi a mi madre delante mía gritándome por alguna razón.

-¿Katherine? ¿Katherine? ¿Me estás escuchando?

Decía ella, parecía irritada por alguna razón.

-Eh... Estás aquí
-¿Eso es todo lo que vas a decir? ¿No te veo desde hace mucho y "estás aquí es todo lo que.....

Volví a sumergirme en el mar de pensamientos, realmente lo que ella tuviera o no que decirme me daba igual.

-¡Katherine! ¡¡Katherine!!
-¿Qué?
-Deja de ignorarme, en fin, ¿Qué quieres de cenar?
-Lo que tú quieras
-¡Cambia tu actitud niña!

Concluyó ella saliendo de mi habitación.

Volví a entrar en trance pero tiempo después algo me sacó de él.

Había perdido completamente la noción del tiempo, ¿Por cuánto tiempo estuve absorta?

-Katherine, a cenar.

Decía mi madre desde el marco de la puerta.

-No tengo apetito.
-No me interesa, bajarás a cenar y te gustará la comida, comerás todo lo de tu plato, agradecerás la comida y después hablaremos.
-No quiero
-No te estoy preguntando, ¡Vas a bajar! Yo iré por tu hermana.

Como la odio, si no querías tener hijas debiste ponerte condón.

Cuando me levantaba para bajar al comedor escuché un ruido de golpes y una discusión y... Música.

Salí de mi habitación para averiguar que pasaba.

Mi madre estaba tocando a la puerta de la habitación de Estefanía mientras trataba de imponerse a ante ella exigiéndole que bajara a cenar.

-Estefanía, baja a cenar.

Dijo mi madre.

-No.

Respondió Estefanía con indiferencia.

-No te pregunté.
-Yo tampoco.

Mi madre se indignó ante aquella respuesta y comenzó a tocar la puerta y a llamar a mi hermana por su nombre y otros más; ante aquella situación a Estefanía no le quedó más remedio que encender su estéreo de música. Era una escena cuanto menos curiosa, pero no me incumbía.

Bajé y cené junto a mi padre, al cual ciertamente le daba igual lo que pasaba arriba entre mi madre y Estefanía y se limitaba a comer su cena; al cabo de un rato mi madre se dio por vencida y bajó, papá y yo habíamos acabado ya de cenar y ahora estábamos viendo televisión.

Me fui a mi habitación cuando mamá había terminado de cenar y ahora quería que viéramos un programa familiar, papá se fue a su habitación también.

Unas horas después mamá entró en mi habitación cuando yo acababa de apagar la luz y me había acomodado en la cama.

-Katherine
-¿Si?
-Oh, que bien, estás despierta.
-Ajá, ¿Qué necesitas?
-Oh... Umm... Hablar contigo.
-Está bien, habla.

Dije, al mismo tiempo en el que me sentaba en la orilla de la cama.

-Bueno, Katherine, tu padre y yo, bueno... Yo he estado pensando en... Que deberías estudiar en el extranjero así que planeo enviarte a terminar tus estudios en otro país, ¿ya sabes que quieres estudiar?.
-Planeo ser escritora, pero no está en mis planes salir de país para eso.
-Pero en los míos sí el mandarte fuera a estudiar, y no, no serás escritora, me gustaría mas que fueras, administradora de empresas.
-Pero...
-Nada de peros, hasta mañana.

Concluyó ella y después se fue.

¿Entonces ahora mi destino sería, sola, en otro país y con otra carrera?

Al día siguiente esta hablando con Dani, Drew no había llegado a la clase de las 7, él llegaba tarde, pero nunca faltaba...

-¿Sabías que va a haber una conferencia?
-Conferencia... no, no sabía, ¿Y porqué?
-No lo sé

El timbre de clases sonó y la secretaria del director hizo un anuncio: Por favor alumnos diríjanse al gimnasio para un aviso del director.

Dani y yo seguimos las indicaciones, caminamos hacia el gimnasio, había muchas sillas, y nos sentamos a esperar el anuncio.

Después de un rato llegó el director, todos hablaban, sin prestar atención: Buen día alumnos, vengo hoy a, lamentablemente, dar un anuncio muy trágico, uno de sus compañeros falleció el día de ayer, a las 7:15 de la tarde, el nombre del compañero era Drew Hemmings, parece que lo atropelló un auto; Lamentamos mucho su pérdida.

Fue hasta ese momento en el que me di cuenta del gran moño negro colocado en la parte superior del escenario, el director vestía de negro, los maestros vestían de negro.

No lo podía creer, lágrimas brotaban sin parar de mis ojos, lo había perdido, para siempre; y lo peor era que... Nunca tuve la oportunidad de decirle, que lo amaba...

Continuamos con las clases como si no hubiera pasado nada, al final del día volví a casa, Dani quería a acompañarme, pero no la dejé, necesitaba estar sola.

Algo en mí murió ese día.

Al termino del semestre accedí ante mi madre que ya tenía planeado enviarme a otro lugar fuera del país para terminar mis estudios, estaba terminando de empacar cuando llegó mi hermana a despedirse.

-Así que te vas- Dijo ella cruzada de brazos desde el marco de la puerta.
-Si, así es-
-Te convenció, siempre lo hace, ese siempre fue tu único defecto; nunca hiciste lo que en verdad querías hacer, justo como ahora, disfruta de la vida que mamá vive a través de ti- Dijo ella y posteriormente se fue.

Esa fue la última vez que vi a mi hermana, me fui a del país, terminé los estudios y me gradué en administración de empresas y vivo sola en un gran apartamento, dejé atrás a mi mejor amiga, a mi hermana, abandoné mis sueños y el lugar donde nací, perdí a Drew y me perdí a mí misma y 7 años después me doy cuenta, que mi hermana tenía razón...

Todo el tiempo pienso en Drew, él y yo fuimos la nada a segundos de serlo todo.

"Nada A Segundos De Serlo Todo."Donde viven las historias. Descúbrelo ahora