XIV

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- ¿Qué es lo que quieres ahora? - preguntó Jay.

- Quiero hablar con Carly un segundo.

- Eso no alcanzará siquiera para darle el teléfono. ¿Qué es lo que quieres en realidad?

- Hablar con ella. ¿Cuál es su nueva dirección?

- Oye, no creo que sea bueno para tu cartera regresar a London, para ir a buscar a alguien en Las Vegas después.
- No me mudé a London.

- Yo tampoco me mudé a Las Vegas.

- Entonces puedo ir a tu casa y ver a Carly. No hay problema alguno por lo que me estás diciendo ahora.

- Si quieres. Pero sería mejor si usaras las esposas.

- ¿Esposas? ¿de qué hablas?

- Digamos que toda su ropa está en la tintorería, y apenas puede usar un short.

- ¿Por qué rayos la obligas a que ande desnuda...?

- Es mi esposa, y ella quiso complacerme mostrándome su cuerpo, no es culpa mía.

- Enfermo...

- Creí que los ingleses eran los más respetuosos, ahora veo que no es así gracias a ti.

- ¿Qué rayos es lo que pasa en tu cabeza...?

- Dicen que la mente humana es uno de los mayores misterios. Así que no lo sé.

- ¿Podrías pasarme a Carly...?

- Vaya, quién lo diría, estás respetando lo que es mío. Pero está en el baño.

- ¿Respetar lo que es tuyo? ¿de qué estás hablando? Carly no te pertenece. A diferencia de ti, yo sí la respeto.

- Pues no tienes que respetar a alguien que le dice "te amo" a un hombre que no es su esposo.

- ¡Tú la obligaste a que se casara contigo!

- Oye amigo, relájate, yo le dije que escogiera; si quería verte, tenía que casarse conmigo, de no ser así, no te vería; le di libre albedrío básicamente. Ahora, que ella haya escogido lo primero, no es mi culpa.

- ¿Qué tan necesitado debe estar un hombre como para obligar a una mujer a casarse con él?

- ¿Qué tanto?

- Dímelo tú. Ya que eso fue lo que hiciste con Carly.

- Por lo menos no me dejaron en el altar.

- Adivina por quién fue.

- ¿Sabías que Carly tiene un muy sexy lunar entre sus pechos? es muy provocativo.

- Te odio...

- Y yo a ti. En realidad, me das lástima.

- ¿Por qué?

- Peleas por Carly para evitar ser rechazado de nuevo; sé que es difícil superar a alguien, pero no tienes que estar recordándolas a todas cada segundo de tu vida - no se dio cuenta de que estaba resumiendole su vida amorosa a William.

- Carly ha sido mi único amor en toda mi vida, porque siempre busqué antes en esforzarme para ser esa persona indicada para alguien, y no en buscar la persona indicada para mí.

- Te acabas de poner muy sentimental amigo.

- Por lo menos no soy el que retiene a una mujer.

- Touché. En fin, te la pasaré, espero que hablen sin molestia alguna. Pero si escuchas algo, recuerda que está en la ducha.

Camino hacia el secuestroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora