Strange change {5sos}

Capítulo 35: Suenan campanas

- En fin, os hemos llamado hoy a todos para deciros que Charles y yo nos vamos a casar. -se hizo el silencio, hasta que Charlotte saltó a los brazos de los dos y empezó a saltar y a gritar y felicitarlos, y yo me uní a ella. Lilly le echaba miradas amenazantes a Michael el cual las ignoraba. Ashton se levantó a felicitarles con una gran sonrisa en la cara, y les echó un gran discurso del significado del matrimonio y lo importante que era. Luke se levantó y se fue, y luego Michael y Lilly fueron a felicitarles.

Seguí con mi mirada a Luke, pero antes de que la curiosidad me ganara, volví a centrarme en Calum y Charles.

Me sentía tan feliz de que dos personas a las que quería tanto se fuesen a casar. Y a todos los presentes se nos notaba en la cara. Nunca había visto ni a Charles ni a Calum tan sonrientes.

Lilly le indicó a Michael que le siguiera y eso hizo. No tenía buena pinta lo que iba a pasar en el porche de la casa. Michael miraba el suelo hasta que salieron de la casa.

Parecí ser la única en percatarme de eso, ya que Charles, Calum , Charlotte y Ashton conversaban alegremente sobre la boda.

- En realidad no sabemos cuando nos vamos a casar, no queremos casarnos dentro de poco, según pasen las cosas. -respondió Calum.

- Ya sabes que no tienes que contratar a una organizadora de bodas, yo estoy disponible las 24 horas chicos, me encantaría organizar vuestra boda, sería un sueño hecho realidad. -comentó Charlotte muy emocionada.

- Ya sabéis que conmigo podéis contar para lo que queráis, estaré encantada de participar en vuestra boda. -dije yo.

- Muchas gracias chicas, de verdad que os lo agradecemos. En cuento sepamos como vamos a hacer todo esto, seréis las primeras en enteraros. -dijo Charles, y Calum nos sonrió.

En ese instante Michael entró dando un portazo a la casa me miró y me indicó que viniese hacia donde estaba él. Todos lo miraban y yo les hice un gesto para que volvieran a lo suyo. Me acerqué a Michael y él se fue a la puerta, así que yo le seguí. Se quedó parado en frente de su coche.

- ¿Puedes abrir, por favor? -asentí y abrí el coche, nos metimos y lo arranqué.

- ¿A donde quieres ir? -le pregunté mirándole fijamente.

- Donde ella no venga. -me dijo sin mirarme. Encendió la radio y yo sabia perfectamente a donde dirigirme.

Conduje en un completo silencio durante todo el trayecto hasta aparcar delante de la cafetería a la cual me había llevado Ed cuando nos conocimos. Sabia que si Michael no me había hablado era porque no quería, y no iba a ser yo la que le forzara a hacerlo.

Salimos del coche y entramos en la cafetería, la cual estaba vacía a excepción de un señor mayor situado al lado de los pasteles. Nos pusimos al fondo del todo en uno de los sillones.

Yo me levanté y puse el disco de "People are strange" de The Doors en el tocadiscos. Pedí un té rojo para mí, un café para Michael y una tarta de queso con mermelada de fresa y galleta. Sabía que Michael necesitaba comer ahora mismo. Volví a la mesa y vi a Michael con las manos en la nuca y los codos en la mesa mirando hacia abajo.

- ¿Sabes que no tienes que hablar si no quieres, verdad? -él asintió, y levantó la cara y me miró, sus ojos estaban vidriosos.

- Me siento estúpido, Eleanor. -bufó otra vez y se estiró del pelo, desplomándose sobre la mesa. Poso mi mano sobre su espalda y empiezo a acariciarla. - Todo el mundo me lo dijo, incluso yo me lo planteé, pero pensé que con el tiempo... -una lágrima resbaló por su mejilla y el rápidamente se la quitó con el pulgar.

El camarero trajo lo le había pedido. Y a Michael se le iluminó la cara al ver el pastel. Nos puso los cubiertos y Michael se puso un gran trozo en la boca en cuestión de segundos.

-Gracias. -le dije amablemente al camarero, el cual me respondió con una sonrisa. Michael ya iba por su segundo trozo. - eh! Sé que estás triste, pero deja algo para los demás ¿no? - Michael se rió y me cortó la mitad de la tarta y la colocó en mi plato.

- Lilly y yo hemos roto. -dijo con voz apenada mientras cortaba su tercer trozo de pastel. - En realidad no sé si hemos roto pero a mi me lo ha parecido...

- ¿Qué quieres decir, Michael? - en realidad ya me esperaba que la causa de todo esto fuera Lilly, pero no me imaginé que hubiesen roto, estás discusiones eran constantes entre ellos, pero nunca antes de este nivel.

- Me llevó al porche, y allí empezó a recriminarme que por qué no podíamos ser como Charles y Calum, que nosotros nos habíamos conocido al mismo tiempo, que eso significaba que no la quería de verdad, que si la quisiera ya tendría un anillo en su mano, y luego empezó a sacar el tema tuyo, Eleanor. Le volví a decir lo mismo de siempre, y al final ella me gritó que era un mentiroso y que no me quería volver a ver y yo le dije que no se preocupase que eso no iba a pasar. -las lágrimas de Michael empalaban su cara.

- Michael, me duele decirte esto, porque Lilly en su día fue mi mejor amiga, pero creo que romper es lo mejor que habéis podido hacer, os hacíais un daño mutuo y constante. -Michael lloraba y asentía.

- Soy estúpido, ni siquiera nos queríamos ya el uno al otro. Noto como si hubiese estado tirando de una cuerda que solo me hacia sangrar, y al dejarla ir es un peso menos, y sé que la herida sanará, pero me sigue doliendo.

- Has recurrido a la mejor persona, Michael, soy experta en esto. Y tío, deja de mirar tanto internet, enserio, eso no es punk-rock. -se rió fuertemente.- ¿Lilly se quedará en casa de los chicos? -asintió.- Bueno, pues tu te quedas en mi casa el tiempo necesario, Mike. Hasta que ella se vaya o lo que sea. -me sonrió.

Pagamos la cuenta y salimos de la cafetería. En cuanto la puerta se cerró, Michael se abalanzó sobre mi y me dio un gran abrazo. Yo le correspondo el abrazo y nos quedamos así durante un rato hasta que Michael se separa.

- Gracias. -me dice Michael mirándome directamente a los ojos.

- De nada, pero ¿Me puedes decir por qué? -le digo riéndome, y él también lo hace.

- Por ser tu, por no preguntarme nada cuando yo no te hablaba y hacerme caso en todo momento sin saber que pasaba. Eres genial, Eleanor. -me volvió a abrazar.

Nos subimos al coche y comencé a conducir. Esta vez el trayecto por la carretera fue muy diferente, los dos cantábamos y reíamos. Al cabo de unos cinco minutos bajé la radio.

- ¿Necesitas pasar por casa para coger algo? -le pregunté a Michael.

- ¿Tienes cargador de iphone? -asentí.- ¿Tienes comida? -asentí- ¿Tienes ordenador? -asentí.-Entonces no necesito nada. -nos reímos y volvimos a subir el volumen.

Llegamos a casa y le enseñé a Michael su nueva habitación. 

- Parece que tenemos un nuevo invitado, ¿no? -Ansel apareció por el pasillo. - ¿Qué pasa tío? -se chocaron las manos demostrando su masculinidad, y yo me reí.

- ¿Que tal Ansel? Parece que me voy a quedar aquí durante un tiempo si no es molestia. -dijo Michael mientras se rascaba la nuca.

- Por mi encantado, no es mi casa. -nos reímos.- Pero una cosa que quede clara, lejos de la habitación de mi hermana, ¿entendido? -Michale asintió y Ansel y yo reímos. No sentamos en el sofá y nos pusimos a hablar.

Mientras charlábamos sobre el tema de Lilly y sobre otros temas, de repente sonó el timbre. Bajé y contesté el telefonillo.

- ¿Luke?

HOOOOOOOOOOOOOOOOOLLLLLLLLLLLAAAAAaAAAAAAASSSSS!!!!!!!! Vuelvo tarde pero vuelvo. El cap que viene va estar lleno de Lucas everywhere. Me estoy pasando a Michael lane y esto no puede ser xd. En fin, espero que os haya gustado el capítulo, votad comentad y comed muuuuuuuuucho. Os quiere:

~La escritora