Autista (Pausada-Edición)

Capitulo 3

—Bien Alan entonces quien es narrador de la historia?. — Le preguntó a Alan después de haberle leído lo que debía de estudiar, Lo miré y el estaba desconcentrado mirando mis labios, me sonroje.—¡Alan!.— lo llame nuevamente y el me miro a los ojos para después mirarme apenado.

—No lo se, lo siento. —dijo alzando sus cejas.

—Alan debes poner más atención bien?.—el asintió. —Vamos a por algo de comer. —dije levantandome y cogiendo su mano para que me siguiera.

En la cocina nos encontramos a Eloy quien en seguida me sonrió.

—Hola Tamara. —dijo el.

—Hola.—dije antes de movilizarme para hacer unos sándwiches. Alan se sentó en la silla del desayunador y me miraba con atención en todos mis movimientos. Eloy se sentó a su lado comiendo cereal con leche.

Abrí la nevera y saqué panes, mermelada de fresa, jamon y queso,  prepare cuatro sándwiches y serví un zumo de naranja y puse todo en la encimera, me senté al frente de ambos y comenzamos a comer juntos.

— Tamara esto sabe genial. —dijo Alan con la boca llena, yo reí.

—Alan debes de cerrar la boca cuando comes si?.—dije y el asintió sonriendo.

—Bueno chicos yo tengo que irme, hasta luego. —dijo para ambos y me guiño un ojo. ¡Oh vaya! El es realmente guapo.

Guíe mi mirada a Alan que seguida comiendo con gusto su sandwich, luego me sonrió dejando a mi vista sus oyuelos.

Llegó la noche y ya era hora de la cena, bajé con Alan al comedor y nos sentamos, luego de la cena nos quedamos hablando un poco.

—Tamara tengo que pedirte un favor.—dijo la señora Edith tomando in sorbo de vino.

—Si?, Digame.—le dije algo desconcerteda.

—Recuerdas que te dije que Alan ira a ver a su padre en las vacaciones próximas?. —dijo y yo asenti. —quería saber si quisieras ir con él, es que no quiero que vaya solo.—continuó.

La verdad me tomó de sorpresa, osea, ir a New York con Alan.

Vamos sera divertido- dijo una voz en mi interior- aparte pasarás mas tiempo con el.

¡oh vamos!  Callate.

—Oh, claro, no hay ningún problema.—dije sin más, mis palabras salieron solas.

Ella me sonrió y continuamos hablando de cuando seria el viaje y eso.

La verdad no me desagradaba ir con Alan a ver a su padre, de hecho me serviría para relajarme, hace mucho no salía de California.

La leve caricia en mi mano hizo que saliera de mis pensamientos.

—Tamara, ¿Podemos irnos?.—dijo el susurrando. Supongo que le daba pena pedirmelo en voz alta y que los demás escucharan.  Yo le asenti.

—Bueno llevaré a Alan a su cuarto para terminar los deberes.—dije levantandome seguido de Alan.

—Bien, pasen una linda noche ambos, hasta luego cariño.—dijo besando la frente de Alan quien sonreía.

Me gusta con es Alan, es tan cariñoso e inocente. Después de llegar a la habitación le leí un cuento a Alan quien se quedo dormido enseguida abrazado a mi cintura. Voltee cuidadosamente a verlo, su rostro estaba relajado, sus pestañas quedaban desplazadas en sus mejillas, sus labios estaban levemente entreabiertos, no se porque, pero tenia unas ganas de rozar sus labios con los mios en este momento, me levante antes de que mis impulsos se apoderaran de mi lo cubrí con la manta para luego salir de su habitación.