Amigos igual a Padres ♢Yaoi/Gay♢

8-Jack no es tan malo

Vlad y Jack pasaban la mayoría del tiempo juntos, Dennis se la pasaba con Mark o en el trabajo y con suerte llegaba para ver y cuidar a Jack.

Vlad poco a poco fue acercándose al pequeño, Jack veía a Vlad divertido, no era malo, le simpatizaba más que Mark.

Tuvieron que salir a comprar y claro no podía dejar al pequeño, lo llevo en el carro y fueron, lo llevo en brazos hasta pillar un carro de compras que tenía forma de un coche versión miniatura para Jack, él se quedó jugando con el manubrio y freno haciendo como que conducía.

A Vlad no le molestaba mucho el que los vieran, de todas formas necesitaba comida. Cuando fue a la sección de los juguetes para llegar al lugar de alcohol el bebé salió del carrito y Vlad se dio cuenta luego de un rato de llegar a la sección de alcohol.

-¡Jack! -grito en el supermercado, corriendo entre pasillos entonces pensó, ¿donde iría un bebé? Juegos o comida pero conociendo al pequeño debía buscarlo en los juguetes, era obvio a el le interesan los colores brillantes.

Fue donde los juguetes corriendo y vio primero en el piso y luego en las repisas, Jack era ágil, entonces escucho una risa.

-¡Jack!-grito nuevamente.

Entonces lo vio entre las pelotas, en ese gran cesto...se las había arreglado para subir y acomodarse entre las pelotas.
Él había elegido una de color rojo con amarillo, lo vio, sonrió y dejó la pelota a un lado y extendió los brazos.

-¡pa!-grito el pequeño. Vlad se sorprendió enormemente, ¿ahora creía que era su papá? Tomo al pequeño y tomo la pelota con su otra mano.

-¿la quieres?-pregunto Vlad a Jack.

El intentaba tomar la pelota a lo que supuso un "si" ante la pregunta, Vlad lo llevo nuevamente al carrito de compras pero ahora lo llevo en brazos, no quería que se escapara.

Ambos empezaron a reír, todo porque el pequeño intentaba imitar el canto de Vlad, el lo hacía para mantenerlo entretenido.

El pequeño balbuceaba y Vlad reía y a él también le gustaba reír, se veían realmente lindos así.

Terminaron de comprar aunque llamaron la atención de muchas chicas Vlad sólo hablo sin insinuar, realmente no quería estar con nadie.

No lo había dicho a nadie, pero su madre se encontraba muy enferma y el no quería verla sufrir, había pedido unas vacaciones para cuidarla, pero la tristeza del verla así simplemente no lo soportaba.

Pero el tener a Jack tranquilo le hacia sentirse mejor y más aliviado...entonces pensó, a su madre le encanta jugar con los pequeños, solía ser voluntaria en orfanatos y también en guarderías, entonces ¿por qué no llevarlo uno de estos días?

Terminó de comprar y llevo las cosas al auto, mientras el bebé jugaba con sus orejeras para que lograra dormir sin oír a Dennis y también se compró unas para el.

Ambos llegaron a casa y Vlad le preparó algo de comer, el pequeño se mantenía jugando con la pelota roja que le había comprado, la tiraba hacia arriba o la tiraba hacia alguna pared para que se devolviera hacia el haciéndolo reír.
Vlad lo miro curioso, era raro verlo tan de cerca sin que llorara o hiciera muecas.

Se agachó y le tocó el hombro llamandole la atención, el bebé dejó la pelota y se giró, lo vio a la cara para luego ver la comida, sonrió y extendio los brazos.

Vlad lo tomó, lo llevo al sillón, lo posicionó en su regazo y le empezó a dar de comer, Jack sólo se dejaba alimentar sin quejas.

Al terminar de darle de comer lo cargó un rato porque no quería que lo bajaran.
Luego de un rato sintió como se dormía, lo dejó en la cama, pero entonces escucho el crujido de la cama del vecino, se acercaba otro de sus juegos.
Le puso las orejeras al pequeño y lo dejó dormido en su cama, sabía que le acomodaba más.

Se preparó algo de comer y se sentó a ver la tele, total no quería ir a dormir aún.
Tenía ganas de tomar pero no quería que el pequeño sintiera ese olor.
Terminó dormido en el sillón estirado boca abajo con un par de latas de cerveza vacías al lado.

¤¤¤

Vlad empezó a despertar al ser como le quitaban la lata que tenía en la mano.
Abrió un poco los ojos para ver a Jack tomando la lata y revisandola.

Vlad sonrió y se empezó a levantar entonces vio al pequeño tomar la lata y tomar el poco contenido que quedaba.

-¡no! ¡Jack!-grito Vlad quitandole la lata.
El bebé empezó a lamerse los labios divertido, Vlad había mezclado la cerveza con azúcar evitando todo el sabor agrio y dando un dulce sabor.

-tsk...bueno, que esto quede entre nosotros ¿si?-dijo Vlad, El bebé asintió y aplaudió.

Vlad miro la hora, eran las 9:40 a.m. podían ir hoy donde su madre. Se baño, se vistio y luego al pequeño con un poleron de Panda y unos pantalones negros y zapatos negros que lo hacían parecer uno, era realmente tierno verlo.

Vlad se puso una polera verde estilo militar, pantalones negros y zapatillas verdes, le gustaba ese estilo por su padre.

Preparó una mochila donde llevaba cosas del pequeño y cosas para su madre y una con remedios.

Ambos fueron hasta la casa de su madre que se encontraba en el centro.
Al llegar abrió la puerta con todas las cosas, entro dejando algunas bolsas caer y escucho como su mamá se levantó a ver quien era, la vio, su cabello opaco color chocolate, piel morena, pero se veía enferma y ojos verdes.
La mujer lo vio impresionada,mientras se apoyaba en una de las paredes.

-hola mamá -dijo Vlad alegre.

-¿Ma? -dijo el bebé confundido.

-jajajaja ella es tu abuela-dijo al pequeño.

-h-hijo...n-no me digas que al fin soy abuela-dijo divertida.

-bueno es de Dennis, pero él...-pensó en decir la verdad pero no sería capaz- él a estado ocupado y yo lo cuido-

-vaya...tu cuidando a un bebé me parece imposible-

-pues aquí está la prueba, sigue vivo-dijo divertido dejándolo en el piso.

El bebé fue gateando hasta la mujer y ella lo tomó, el bebé no se quejó y sonrió.

-¡que lindura!-dijo ella caminando con el seguido de Vlad con las cosas hasta el living.

-sabía que te gustaría conocerlo-dijo Vlad.

-¿como se llama?-

-Jack, pero quiero ponerle otro nombre-

-¿eh? ¿cual?-

-Otzi-

-¿por que?-

-por aquel cadaver maldito de los Alpes -dijo tranquilo.

-hijo ¿porque aún no dejas aquellos gustos?-

-por que me gustan, además le va bien el nombre-dijo revolviendole el pelo a Jack.

Quedaron hablando y conviviendo felices, era lindo volver a pasar un buen rato con su madre y más con el pequeño Jack que los hacia reír.

La madre de Vlad no quiso que se fuera tan pronto así que se quedaron un par de días.

Total no hacía mal quedarse ahí.