Capitulo 10

157 12 1
                                    

Primer día de la semana y Florencia moría de sueño porque se había quedado toda la noche hablando con Thomas.
Se levantó de la cama y partió a la ducha, muy feliz, con ganas de ver al chico que no la dejó dormir. Salió de la ducha se miró al espejo y por fin esta empezando a ver a la chica de antes, la que tiene ganas de vivir y reír. Se maquilló un poco para que no se le notara mucho su cara de desvelada y lo más importante se puso blush su pintura favorita, para enrojecer un poco los pómulos.
Tomó desayuno con su madre y le contó lo que había pasado con Thomas, que le había dado un beso...
-¡Oh por dios!- esa fue su reacción.-Cuidado con lo que haces.- le dice su madre, intentando de sonar sería, pero realmente estaba contenta por ver a su hija feliz de nuevo.
-Sí, ya lo sé mamá- dice Florencia tranquila.
-Ya, luego hablamos más, vas a llegar tarde a clases. Ve y lávate los dientes.- la manda su madre, recogiendo las tazas de la mesa.
Florencia se lava los dientes, se sube al auto y comienza a tocar la bocina para que su madre se apurara.
-Ya, ya voy.- grita ella entrando al auto.

Se levanta pensando en ella, en su sonrisa y en las lágrimas que dejó en su casa. Intento de conseguirse su numero para llamarla y saber como estaba, pero nada, nadie lo tenía.
Se levanta emocionado por primera vez para ir al colegio y ver a Florencia. Toma un buen desayuno, pan con huevo y una leche con chocolate.
Después de eso se va a lavar los dientes y se mira al espejo, se peina para el lado derecho y deja su reflejo atrás.
-¡Ignacia! Me voy.- grita Klaus subiéndose al auto.
-¡Espérame!- reclama desesperada Ignacia, subiéndose con la escobilla de pelo en sus manos.
Ambos parten al colegio y como iban llegando un poco tarde Klaus se fue un poco más rápido de lo que se debe.

Se despierta de golpe, alcanzó a dormir unos 20 minutos después de que se despidió de ella, y en esos veinte minutos soñó con Hugo.
"Tengo que hablar con él" pensaba todo el rato, apenas llegara al colegio iba a preguntarle de lo sucedido en Curicó.
De repente unos ojos azules aparecen en sus pensamientos, Florencia... Toma desayuno lo más rápido posible y se lava los dientes, se sube al auto y por fin se siente relajado porque la va a ver.

Los tres al llegar se encuentran en el estacionamiento.
-Hola...-le dice Klaus a Florencia.
Pero llega Thomas la toma en sus brazos y le da vueltas.
-¡Florencia!- gritaba él muy entusiasmado, hasta que ve a Hugo pasar, la baja y se va con él.
-Hola Klaus ¿Cómo estas?- pregunta ella un poco incomoda, acordándose de que el ya sabe de "V".
-¿Bien y tu?- pregunta, no sabe que decir todo estaba tan raro.
-Bien...-
-Flo, yo quería saber como estuviste el fin de semana pero no pude porque no tengo tu numero y ahora te exijo que me lo des.- dice sonriendo.
-¿Enserio? Bueno.- dice sacando su celular.- nueve, siete, tres, cuatro, cuatro, ocho, nueve, nueve.-
Ambos entraron juntos al instituto porque ya quedaba muy poco para que el timbre sonará.

-¡Hugo!- se acerca a él dándole unas palmadas en la espalda cariñosamente.
-¿Qué tal Thomas?- pregunta Hugo.
-Necesito que me ayudes en algo, ¿Puedes ahora?- pregunta Thomas con la intención de faltar a clases.
-Si claro que si.-
Entraron al instituto y fueron detrás del gimnasio donde ningún profesor va.
-¿Tú te acuerdas de lo que hicimos en Curicó?- pregunta nervioso Thomas.
-Eemmm la última vez que fui contigo, ¡dos años!- grita Hugo estupefacto.
Este chico, alto, colorín, unos ojos color miel... Bastante lindo.
-Si esa vez...-
-Bueno, muchas cosas raras pasaron, cuando te peleaste con tu amigo, que ya no me acuerdo como se llama y también que te metiste a la casa de su novia no sé como, me dejaste esperando afuera como una hora...-
-¡¿Una hora?!- interrumpe Thomas- Supongo que fue para consolarla, por lo que había echo Joaquin.-
-Mmmm no creo, tu estabas muy raro esa noche, cuando dejamos la disco te reías de todo.- Hugo deja de hablar y pregunta- ¿Y tu acaso no te acuerdas?-
-Para ser sincero, no...- dice un poco avergonzado.
-¡Yo sabía!- grita Hugo.- Tu estabas drogado, estoy seguro porque tomaste de un vaso que apenas era tuyo y me acuerdo de eso porque hubo harta gente que nos advirtió de eso, apenas tomaste yo te pregunté si había sido de tu vaso del cuál habías tomado y tu respuesta fue...-
Hugo comienza a recordar y a contarle a Thomas.
"-No, no era mío y que más da...-
-¿Te acuerdas de lo que nos advirtieron?- pregunta Hugo muy preocupado y un poco ebrio.
-Tu crees que ese vaso de millones que habían justo iba a tener algo, pfff...- resopla.
-Bueno vamos a casa de tu amigo.- dice Hugo agarrándolo.
-Déjame en paz.- exige Thomas.
-Vamos...-
-Bueno, vamos pero...- saca las llave de su auto.- yo manejo.
Se suben al auto, Thomas no había tomado nada porque sabía que tenía que manejar a la vuelta, excepto por el trago que le dio a ese vaso, cualquier cosa que hubiese tenido dentro.
Hugo se da cuenta que por el camino que iban no era para ir a la casa de Joaquin.
-¿Y para donde vamos?- pregunta un poco preocupado.
-Vamos hacer una pequeña parada- dice riéndose como maniático.
Llega a las afueras de la casa de la novia de su amigo, Florencia. Apaga el auto y se baja.
-Quédate aquí no me tardo.- y le tira las llaves.
-Tu no vas a ningún lado.- dice Hugo bajándose del auto y agarrándolo de la camisa roja cuadrilles que usaba.
-Claro que sí, y si no me sueltas tu vas a ver.- dice haciendo notar un poco sus músculos.
Ahí Hugo ya no lo reconocía, ¿cuando su amigo había dicho algo así? nunca, pero se veía tan normal. Su manera de caminar era tan normal pero su manera de ser era diferente y así se dio cuenta su amigo estaba drogado.
-Vámonos ahora...-  Hugo lo agarró del brazo y lo tiro un poco.
Y a causa de eso Hugo se encontraba en el suelo muy mareado casi inconsciente, el golpe que recibió por parte de su amigó había sido bastante fuerte pero logró ver que Thomas se metía a la casa de Florencia por arriba del portón"
-Luego llegaste corriendo, me ayudaste a subirme al auto y saliste muy rápido de ahí diciéndome "No le digas a nadie lo que pasó hoy" y luego gritabas orgulloso "Ahora soy todo un hombre." "La hice gritar." "Mi virginidad." Y después llorabas "Soy un mal amigo, pero se lo merecía... Joaquin se lo merecía."-
Hugo vuelve a recordar y a relatarle la historia a Thomas, él cual escuchaba todo atentamente, sin creer lo que entraba por sus oídos.
"-No le digas a nadie, nada de nada y mucho menos a mi, nunca más en tu vida me toques este tema, para no sentirme avergonzado. Tu dices algo y te prometo que te la vas a ver, ahora hay que salir de aquí.- le decía Thomas, tiritando y sudando.
Hugo estaba asustado entonces le hizo caso en todo a su amigo, le dejaron el auto a su amigo a las afueras de su casa, entraron, sacaron sus cosas y luego tomaron un bus para devolverse a sus casas."
-Eso es todo, no me acuerdo de nada más, y estoy impresionado de mi. Como es que me acuerdo de tantos detalles.- dice alagándose.
-Discúlpame Hugo.- dijo Thomas pasmado por todo lo que había escuchado. Ya no podía más necesitaba salir y pensar un poco. Todo lo que había pasado esa noche, ¿Qué fue lo que hizo?, no entendía nada y el numero 1616 no lo dejaba en paz, su cabeza daba vueltas, salió de ahí dejando a Hugo atrás y partió a su auto.

~1616~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora