Capitulo 15

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Llevaba toda la tarde pensando en él, acordándose de cada momento.

Llevaba toda la tarde pensando en ella y en como le iba a preguntar lo que debía.

Llevaba todo el tiempo pensando en ella, en sus ojos y en volver a verla. Hasta que al final se decidió y le envió un "Whatsapp", en el cual decía "Cuando nos veremos...". Espero quince minutos desesperado en que le respondiera, hasta que al fin recibió un mensaje de ella "Cuando quieras...".

Florencia vio el mensaje llegar y no sabía si responder o no, ya que ahora estaba con Thomas no creía correcto hablar con otro chico. Pero en ese aquel minuto ella pensaba, "es el chico más simpático que he conocido jamás, y es sólo un amigo." Pero si que estuvo harto tiempo pensando en que hacer, porque en el fondo sentía algo por él, no sabía que era pero algo si sabía. Que ese sentimiento le encantaba. Entonces se quedó pensando, le envió algo si o no. Hasta que se decidió.
Cuando envió el "Whatsapp" sintió unas cosquillas en la guata.
Luego de enviárselo salió de su casa al patio.
Era una casa grande, más linda de la que tenían antes, lo único que tiene para proteger es una simple pared. Ella en esa casa se siente protegida, aunque no tiene cercos eléctricos, cámaras y cosas de ese estilo, era el lugar soñado para ella.
El día se acaba y ella cada vez esta más cansada entonces decide volver a entrar a su casa. Sube a su pieza la cual se encontraba en el segundo piso, era grande. Dentro tenía su propio baño, un closet grande y una cama de dos plazas, es una pieza realmente linda.
Cuando llega se acuesta en su cama y mira su celular. Acaso Klaus le había dejado el famoso visto en "Whatsapp"! No era de gran importancia tampoco pero para decir la verdad claro que le molesta un poco.
Florencia camina hacia su repisa con libros y saca uno, va hacia la terraza que tiene en su pieza con unas ventanas del techo hasta el suelo ve el lindo paisaje y vuelve a entrar. Se acuesta en su cama y comienza a leer pero con ropa, la misma ropa con la que había estado toda la tarde desde que estuvo con Thomas.
Su madre le fue a decir buenas noches y ella siguió leyendo hasta que no pudo más y sus ojos se cerraron.
De repente un golpe un tanto fuerte en la ventana la despierta, las luces seguían prendidas y alcanza a ver a alguien en su terraza, el pánico la comienza a consumir pero se acuerda lo que alguna vez le dijo su psicóloga, "respira profundo, nada va a pasar" y eso hizo.
La persona de la terraza se acerca a la ventana y finalmente Florencia lo reconoce. Abre la venta y le dice:
-¡Acaso estas loco! ¡Me mataste de un susto!- grita no tan fuerte para que sus padres no la oyeran.- ¿Como se te ocurre llegar así?.
En ese minuto la tímida Florencia no parecía tan tímida.
-Tu me dijiste que te podía ver cuando quiera...- dijo Klaus sonriendo.
-Cuando quieras pero poniéndose de acuerdo y no a las doce de la madrugada.- reclama Florencia calmándose.
-Bueno no especificaste tan bien en tu mensaje entonces.- se ríe Klaus.- Y tampoco parece tan tarde para ti porque estas vestida.-
-Es que me quede dormida así.- sonríe ella.
-¿Me acompañas?- pregunta finalmente Klaus.
-¿A donde?- cuestiona Florencia.
-A una sorpresa, tú solo ven...-
A Florencia no le daba miedo Klaus porque mostraba cierta calidez en sus ojos, algo acogedor que nadie más tiene, y que saliendo a cualquier lugar con él se sentiría protegida.
-No creo que este bien, si mis padres se llegan a enterar me matan.- lamenta Florencia.
-No se van a enterar lo juro.- ruega Klaus.
Tal vez tiene razón, y no cree estar haciendo nada malo. En algo estaba cambiando Florencia, y era en que su locura estaba volviendo. Antes solía disfrutar de la vida, y eso es lo que quiere hacer ahora.
-Te acompaño pero no nos podemos demorar tanto.- dice riéndose.
Klaus cuando la vio decir eso, la miro a los ojos y vio en ellos un brillo que jamás había visto, unos lindos ojos azules que querían un poco más de acción.
-Pero... Eso si te tienes que cambiar.- la miro de arriba hacia a bajo.
-Ok, no me tardo espérame aquí.- le dice Florencia tomándolo del brazo y sentándolo en su cama.
Ella abre su closet entusiasmada, lo cierra y comienza a ver su ropa.
Klaus la mira como entra y cierra su closet, realmente no lo cerró tan bien.
-Que pieza más grande.- dice Klaus mirando su al rededor.
Florencia no responde, se saca el short y se busca unos pantalones.
Klaus la mira sin quitarle la mirada de encima. Ella se da cuenta, lo mira a los ojos, se pone roja y cierra la puerta.
Tal vez haya estado mal hacer eso pero que más da.
En fin sale de su armario con unos pantalones negros, unas zapatillas y un chaleco bastante grande gris.
-Por favor.- Klaus le da la mano y la gira.- Mucho estilo, en especial el chaleco gigantesco.
Florencia lo empuja y le dice:
-¿Y ahora que hacemos?-
-Me muestras la salida de tu casa.-
La salida de su casa estaba muy cerca de la pieza de sus padres pero no era la única, había una en la cocina, pero aún así seguía cerca.
-Te la muestro pero te advierto que queda cerca de las piezas de mis padres.-
-Vamos.- el abre la puerta de la pieza. -Damas primero.
Florencia pasa y baja las escaleras en puntillas al igual que él.
Pasan por el pasillo de la casa y cuando están a punto de llegar a la cocina escuchan un sonido en la pieza de los padres de Florencia.
Ella se asusta y sale corriendo silenciosamente a la cocina, Klaus hace lo mismo.
Sienten que la puerta de la pieza de los padres se abre y unos pasos se dirigían a la cocina.
-Oh por dios, metete ahí abajo.- le dice Florencia a Klaus apuntándole un mini hueco en el mesón del centro de la cocina.
Klaus se mete y luego ella quedando muy cerca y apretados.
-Shshshshsh.- tranquiliza Klaus a Florencia.
Los pasos cada vez se hacían mas cercanos hasta que al fin llegaron a la cocina.
Florencia podía ver los pies de su padre lo cual le asusta bastante, su corazón cada vez latía más fuerte.
El hombre que fue a la cocina tomo algo del refrigerador y se marchó.
Ellos esperaron que la puerta de su pieza se cerrara para volver a salir y cuando la escucharon se fugaron rápidamente por la puerta trasera.
Corrieron hasta la pared de la casa la cual queda un poco lejos porque el patio era bastante grande.
-Casí muero allí dentro.- dice Florencia un tanto exhausta y asustada.- mi corazón late muy fuerte.-
-Eso se llama adrenalina, y lo deberías sentir todos los días.-
-Tu estas realmente loco.- ríe Florencia bastante más tranquila.
-¿Y ahora como salimos?-
-Es imposible salir por el portón. Porque mi padre lo cierra con candado y no sé exactamente donde guarda la llave. En todo caso no me volvería a meter a la casa... Como entraste tu vamos a tener que salir ¿o no?.-
-Bueno. Pero no sé si vas a ser capas.- compite Klaus.
-Yo creo que sí...- dice Florencia levantando una ceja.
Klaus salta alto y se agarra con las manos del borde de la pared subiendo todo su cuerpo.
Florencia hace lo mismo pero el problema fue que no se pudo su cuerpo.
-Te hacen falta algunas flexiones.- la toma del brazo y la ayuda a subir.
Luego de que ambos estaban arriba tienen que saltar. Ella salta primero y luego él.
-Listo, ahora viene lo interesante.-
Klaus toma a Florencia en brazos y la mete a un auto.

~1616~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora