{One-shot} Tarde de lamentos {Ereri, Riren}

Tarde de lamentos

La oscuridad lo cubrió todo, el mal se hizo más fuerte en el corazón de aquel chico, devastado por el rechazo de un amor antes correspondido, el cuál la otra persona dejó de amar al joven.
Llorando sin contención, hablando a duras penas, no comiendo nada, fue como pasó los días Eren Jeager, un muchacho de corta edad que amaba con todo su corazón a Levi Rivaille.
Llevaba meses admirándolo y cargando con este amor, gracias a Mikasa quien le dio apoyo, pudo confesársele.
Dijo hermosas palabras dedicadas exclusivamente a Levi, pero todo fue en vano. El más bajo no lo aceptó, declaró que tiempo atrás sentía lo mismo, pero esos sentimientos hacia Eren habían sido reemplazados por Erwin. Aquel superior que ayudó muchísimas veces y era gran amigo de Levi.

Completamente destrozado, no tenía ninguna razón de vivir, pensaba en suicidarse pero nunca lo hacía, se dio cuenta de que tenía a Mikasa y a Armin, pero con ellos no era lo mismo. Se había enamorado profundamente del peli negro y eso no lo podía borrar.

Pasaron meses y años enteros, Eren nunca fue capaz de ponerse de nuevo en pie, tan destrozado lo había dejado que ya ni tenía fuerzas para llorar, sólo sollozaba de vez en cuando.

El veintitrés de marzo del dos mil (imaginen que están en esta época), llegó una carta misteriosa y anónima, sólo ponían "Eren Jeager".
Mikasa entró silenciosamente en el cuarto del castaño, no si antes pedir permiso, y le comentó sobre el sobre y su contenido, se lo dejó a los pies de la cama y salió de la habitación.
Eren con sus pocas fuerzas logró cogerla y abrirla, esta decía.

"Para Eren Jeager:
A pasado mucho tiempo desde la última vez que hablamos, seguramente me odiarás, y no te culpo, te causé mucho dolor.
Aquel día lo pasaste mal, espero que estés recuperado, mocoso.
Sólo quería decirte que el día después de hablar, me fui a Inglaterra con Erwin, no lo sabía pero él estaba prometido con una mujer que por lo visto "ama". Pensé en ti y en cómo te sentiste, y reaccioné, me dolía el pecho a horrores y sólo quería encerrarme y llorar. Quisiera... Que me perdonaras....
Ya regresé a Japón, estoy delante de la casa de Petra (aunque no se cuando la leerás), me alojaré unos días allí hasta conseguir un sitio. Espero verte convertido en un hombre, Eren.
Atentamente, Levi Rivaille"
El pobre de Eren, sorprendido, dejó caer aquella carta de su mano, estaba completamente confundido. Pasó un rato, y la cogió del suelo, la apretó demasiado fuerte contra su pecho y lloró.

-Levi...- Aún le dolía pronunciar su nombre. -Nunca podría odiarte... Sólo puedo... Amarte sin... Ser correspondido... Me duele saber... Que Erwin... Si que te gustaba.- En la última frase se desplomó sobre su cama, estaba harto, ya no podía más. ¿Por qué exactamente ahora Levi quiere saber sobre él? Si ellos fueran amigos y quizá el ojiazul no se hubiese declarado, podría tenerlo de ocupa en su casa, podrían llevarse bien y Eren no hubiera pasado sus días en este muchedumbre estado. Pero no todo sale como queremos. Sabía que dolor era el que sentía Levi al no ser correspondido por Erwin, o eso creía.

-Esta es mi peor tarde de lamentos desde que me rechazó, mucho peor que aquel día.- Dijo entre susurros y lágrimas.
-Eren, llegó otra carta anónima.- El nombrado ya sabía de quien hablaba, se tapó el cuerpo al completo con la manta antes de que su "hermana" entrara. Le dejó la carta de nuevo a sus pies y salió. Eren como un canguro saltó en la cama descubriéndose y tomando la segunda carta de Levi. Comenzó a leer.

"Para Eren:
Eren... Mocoso de mierda, espero que estés en forma, si no competir contra ti será aburrido.
Te espero en el campo de fútbol a las 19:00, te machacaré si estás bien fofo, mocoso.
Mikasa me ha dicho por el móvil que estás en cama, mejórate y ven, debilucho.
Levi Rivaille"