10 En una casa no caben

Capítulo 20

Belén
Estábamos a 26 de junio, los chicos se habían ido a Madrid ya hace un par de semanas ya que, tenían que trabajar, obvio.

- Belén, ¿es tu móvil el que suena? - me dijo Rosi.
- ¡Si! Es el primo Andrés, Pau - dije.
- Oh que bien.
*Conversación por teléfono*

Andrés: ¡Hey prima!
Yo: ¡Primo! Espera que pongo el altavoz
Pau: ¡Tete!
Andrés: ¡Pau!
Yo: Bueno, al grano ¿qué querías?
Andrés: Vale, vale. Bueno, es el cumpleaños de mi novia y era por si os queréis venir.
Pau: Perfecto, ¿cuando nos vamos allí?
Andrés: Pues... ya mismo si queréis.
Yo: ¿Ya? Bueno... hacemos las maletas y vamos.
Andrés: Vale, acordaros de quedaros en un hotel.
Yo: No somos tontas, primo
Andrés: Pero si que tienes mala memoria.
Yo: ¡Au cacau!
Pau: ¡Hasta luego!
Andrés: Adiós chicas

Y colgó.

- Bueno, creo que...¡NOS VAMOS A MADRID! - gritó Paula.
- ¡Correr, vamos a preparar las maletas! - dijo Rosi.
- ¿Vamos con tu coche, no Rosi? - pregunté.
- Obvio - respondió.
Hicimos las maletas, las metimos en el coche y fuimos de camino a Madrid.
Yo iba en la parte de atrás.
- Pau, pon la radio - dije.
- Valijuis.

"Bueno hoy tenemos con nosotros a cinco chicos, los cuales están cumpliendo su sueño. Ellos son Álvaro, Blas, Carlos, David y Dani y juntos forman: Auryn.
Bueno chicos, os vamos a hacer unas cuántas preguntitas ¿vale?.
- Vale - respondieron todos a la vez.
- ¿Echáis de menos a alguien?
- Si - respondieron a la vez.
- A unas personitas muy especiales qué conocimos en Valencia - dijo David."

- ¿Lo habeis oído putas? - dije
- Nos echan de menos - dijo Paula
- Que cukis - respondió Rosi.
- Estaría bien verlos - dijo Paula
- Ya tia, pero nosotras vamos para ¿cuánto? ¿tres días? Es prácticamente imposible - dije.
- Ya... pero bueno.
Y por fin, después de horas metidas en el coche, llegamos al hotel de Madrid.
Nos subimos a la habitación y cuándo íbamos a entrar...
- ¿Chicas? ¿Qué hacéis aquí? - dijo David viniendo a abrazarnos.
- A veros no hemos venido, tenlo claro - dije
- Que borde - dijo Paula
- ¡Pau! Cuanto te he echado de menos - dijo Blas y le dio un abrazo.
- Yo también a ti
- Mi Beleno...¡cuanto tiempo! - dijo Dani.
- Carlitozz - dije yo, y le di un abrazo
- Y como siempre... me he vuelto a quedar sólo - dijo Álvaro.
- ¡Que no tonto! - dijo Rosi.
- Áis nuestro smiler boss - dijimos las tres a la vez y fuimos a abrazarle.
- Bueno ¿y que hacéis aquí? - preguntó David
- Es el cumpleaños de la novia de nuestro primo - explicó Paula
- ¡Que casualidad, nosotros también tenemos cumple! - dijo David.
- ¿De quién? - pregunté.
- De la novia de Andrés, el de Dvicio - respondió Carlos.
- ¡Ese es nuestro primo! - grité.
- ¿Enserio? Que pequeño es el mundo... - dijo Álvaro.
- Pues iremos todos juntos ¿no? - dijo Paula
- Obvio - dijo Carlos - aii cuanto te he echado de menos Pauli - y la abrazó.
- Y yo mi Carlitos - le respondió.
- Nosotras vamos a ir a verlo ahora después - dije
- Nosotros tenemos que seguir grabando - dijo Carlos.
- Jo, que pena - dijo Paula.
- Yaaaa jooo - dijo Carlos.

Entramos en la habitación, dejamos las maletas y nos fuimos a su casa. Tocamos el timbre dos veces, y una chica nos respondió que ya iba.
Nos abrió.
OMYGANGO.
- ¿MIRIAM? - dijimos las tres a la vez.
- ¡MIS CHICAS! Cuanto tiempo sin veros - exclamó Miriam.
Miriam es una chica con pelo negro y ojos color miel, con flequillo.
Hacía casi tres años que no la veíamos, estaba guapísima.
- ¿Os conocéis? - preguntó Andrés.
- Más de lo que tú te piensas primo - dije.
- Ah, ¿qué sois primos? - dijo Miriam.
- ¡Claro! - dijo Paula
- Bueno, pasar, pasar - dijo nuestro primo.
- ¿Me podéis explicar como habéis acabado juntos? - preguntó Paula.
- Bueno, pues cuando me mudé aquí a Madrid con mi familia hace tres años, lo conocí, iba con una amiga y lo vi mirando discos, me puse a su lado e hize lo mismo, y me preguntó que música escuchaba, y un año después, antes de que se formara Dvicio empezamos a salir y bueno, aquí estamos dos años después. - explicó Miriam.
- ¡Pues que bien! - dijo Rosi.
- Pues sí - dijo Miriam - dentro de 3 días es mi cumple ¿vendreis?
- ¿Para que te crees que nos hemos hecho tres horas en coche? - dije
- No has cambiado puta - dijo mi amiga
- Tú tampoco guarra - le contesté.
- ¿Cómo vais con el tema de los chicos? - preguntó Miriam.
- Emm... - dijimos los tres a la vez - Uis... primitas... ¿qué no me habéis contado? - dijo Andrés
- ¿Sigues con José? Cuando me fui seguíais...
- Ya no - interrumpí a Miriam
- ¿Y eso? - dijeron Andrés y Miriam a la vez.
- Porque es un capullo - dijo Paula.
- Ya te lo decía yo... ¿y quien es el otro?
- ¿Qué otro? - dije extrañada
- Es obvio que hay otro - dijo Miriam
- JÉ - dijo Paula.
- ¡No hay ningún otro! - exclame
- Ya ya... todo se verá primita - me respondió Andrés.

Todo se verá pensaba.
Pasamos el día allí, en su casa.
Nos estuvimos contando todas las cosas que habían pasado desde hace tres años.
Pero se nos olvidó mencionar lo de los chicos.
Bueno, ya se enterarian...
Nos despedimos y volvimos al hotel.
Una vez en la habitación...

- Chicas ¿habrán venido ya los chicos? - preguntó Paula.
- Ni idea, ¿les tocamos? - dijo Rosi y Paula y yo nos descojonabamos.
De repente tocaron... y Paula abrió la puerta con su pijama de unicornios, cuyo pantalón era corto y dejaba ver un poco el culo.
Al igual que el mío, el de Rosi... era un pantalón de cuadros, por debajo del culo.

- ¡Hola chicas! - saludó David y entraron todos los demas.
- ¡Hemos traído helado de chocolate! - dijo Blas.
- ¡Ahh! Dame - dijeron Pau y Rosi a la vez .
- Que sersi me vas Paula - dijo Blas
Cuando me di cuenta... ¡oh Diosito!
David sin camiseta, le hacía papi.

- Blasito, vete un poquito a la mierda - dijo Carlos.
- Uis ¿por que? - preguntó Blas.
- ¿Ta seloso el nene? - le dijo Pau a Carlitos.
- Un poquito - dijo Carlos
- Oh mi piñita, ven aquí - y Carlos se tumbó en las piernas de Paula.
Yo me tumbé en las piernas de David.
Y ahí estuvimos un rato hablando.

- Oirme, le tenemos que comprar el regalo a Miriam, ¿nos acompañareis? - dije
Se miraron todos...
- Por mi si - dijo Carlos.
- ¡Bien! Carlos, me tienes que ayudar a muchas cosas - dijo Paula.
- Perfecto - le respondió - y por que no... por ejemplo yo me voy con Paula y con David, Rosi con Álvaro y con Blas y Belén con Dano
- ¡Eh! Pues a mi me gusta esa idea - dije.
- Y a mi - dijo Blas
- Pues decidido, mañana... ¡nos vamos de compras chicas! - dijo Carlos en tono pijo.
Acabamos de hablar sobre lo de mañana, nos acabamos el helado, y los chicos se fueron a su habitación. Y nosotras nos dormimos, nos esperaba un día movidito.