10 En una casa no caben

Capítulo 21

Rosi

A la mañana siguiente me desperté a las ocho y media, antes que Paula y Belen, raro en mi.

- Ehhh, vagas, despertar - les decia.
- No quierooooo - decia Paula medio dormida.
- ¡Que te despiertes coño! - y le di con un almohadon en toda la cara.
- ¡Hija de frutaaaa! - exclamó y salió de la cama de un salto y corrimos por toda la habitación.

- Hey, vamos a despertar a la Beleno - dijo Paula
- ¿Como? - pregunté
- Coje ese vaso y llenalo de agua - me dijo y lo hize - perfecto ahora... podemos hacerlo de dos formas, o... suavemente o a lo bestia ¿cual prefieres?
- Uuuufff que difícil decisión... la bestia. - le respondí.
- Lo sabía - cojio el otro vaso y lo lleno de agua. Nos pusimos una a cada lado de la cama de Belen. - a la de tres - susurró - Una... dos... y ¡tres!.
Y le tiramos los vasos de agua en toda la cara.
Belen abrió los ojos y...

- ¡HIJAS DE LA GRAN PUTA VENIR AQUI! - Paula y yo salimos corriendo de la habitación y Belén detras.

De repente uno de los chicos, Blas, abrió la puerta de su habitacion y nos vio corriendo a las tres por el pasillo en pijama y descalzas.

Al final del pasillo Belen se resbaló y se cayó al suelo.
Nosotras aprovechamos para correr y tocar a la puerta de los chicos, los cuales nos dejaron pasar, y también los cuales estaban medio dormidos.

Al final Belén entro a por nosotras y David la cojio cual saco de patatas.

- ¡Sueltameee! - gritó ella
- Sueltalooo, suéltalooo - cantamos Carlos, Pau y yo.
- ¡ME HAN DESPERTADO! ¡DEJAME! - gritaba ella.
- Nos vamos a desayunar, ahora volvemos - dijo David llevandosela.
- ¡Que voy en pijama, David!
- Yo también y nadie ha dicho nada - le respondió, y se fueron.

- Bueno, ¿nos bajamos nosotros tambien? - pregunté.
- Si, vale - me contestó Carlos.
- Vamos a vestirnos primero ¿no? - Ostia, es verdad - dije - pues ahora volvemos.
- Valijuis, hasta ahora - dijo Dani
- Chauete cacahuete - dijimos.

Entramos a la habitación, Paula se puso sus pantalones de talle alto cortos con una camiseta de piñas ¡que raro! Y yo mis vaqueros cortos y una camiseta roja basica, a juego con mis converse.
Pau se metió en el baño a hacerse la raya y ponerse un poco de rimel.
Le dije que quería probar, que me maquillara, y asi lo hizo...
¡Ostia puta! ¡Que guapa estaba! Yo si fuera yo, me casaria conmigo.
De repente tocaron a la puerta.

- ¿Quien es? - preguntamos a la vez.
- Daniii
- Ya salimos
Cerramos la puerta y nos fuimos a desayunar.

- WAAAAAA NUTELLAAAAA WAAAAAAAAAA - gritaba mientras corria hacia el bote de nutella.
- ¿Es siempre asi? - oí decir a Blas.
- No... - dijo Paula irónicamente.

Estaba yo tranquilamente cojiendome mi desayuno en el bufet del hotel, cuando de repente...

- Perdona, me pasas esa mandarina - me dijo alguien.
- Claro aqui... ¡MANUUUUU! - exclamé y le abracé.

Manu es un viejo amigo nuestro, de Pau, Belen y Miriam. Es un chico moreno con ojos azules, alto y muy muy guapo.
Vino Paula...
- ¿Que haces pegando tanto gri... - Manu se giro - ¡Pescaitoooo! - gritó Paula.
- ¡Pescaiitaaa! - grito Manu y se dieron un abrazo.

Lo de Pescaito/a es una larga historia.
Belen,Miriam, Paula y yo teniamos 9 años, bueno yo 10, había repetido curso, y estabamos en el Mercadona con nuestras madres, y nos fuimos a ver la zona del pescado y vimos a un chico de doce años comprando, al cual luego, la dependienta no llegaba a darle el pedido y se le cayó un pescado en la cabeza. Y Pau empezó con la coña de Pescaito. Y al dia siguiente nos dimos cuenta que iba a nuestro colegio. Y ahi empezó una bonita amistad con el Pescaito.