"¿Estoy enamorado?" [Hijack/Frostcup]

Capítulo 15 "Delatada"

El albino retrocedió por el impacto de la noticia, ¿Qué había pasado con Hiccup? ¿Tenía que ver con él? ¿Era su culpa?

Todas esas preguntas rondaban por su cabeza provocándole una jaqueca espantosa.

— Hiccup no pudo haber escapado —confirmó con un hilo de voz que le delataría el llanto— ¿No tienen alguna idea o pista de dónde pueda estar?

Los mayores negaron.

— No Jack, no hay pistas que nos lleven a su paradero —habló Valka moqueando— ¿Estás seguro de que no te dijo nada de a donde iría?

Jack negó.

— La última vez que lo vi discutimos —reveló— no creo que me hubiera dado alguna pista en la conversación.

— ¿No conoces a alguien que pueda saber de su paradero?—interrogó el robusto hombre.

Jack consideró la pregunta un rato para llegar a una conclusión.

— Tadashi —susurró.

Entró rápidamente a la casa seguido de los padres del castaño y tomó el teléfono.

— ¿Bueno? Hola, Tadashi soy yo, Jack... Eh, si sólo quería saber si Hiccup estaba en tu casa, es que sus padres están en la mía buscándolo —hubo un silencio incómodo que a poco se convirtió en doloroso, Tadashi tampoco sabía nada.

El albino se tomó el cabello frustrado ¡Era su culpa! ¡Si no le hubiera dicho tantas cosas quizá el estaría ahí con el brindándole una de esas sonrisas que tanto amaba!

Caminó a la sala con los padres del castaño para darles la noticia, el llanto no cesó, pero decidió acompañarlos a las policía para dar con su paradero.

(...)

Un par de días después ya todo el mundo sabía de la desaparición del castaño y también lo estaban buscando, no podía haber desaparecido de la nada, eso era prácticamente imposible.

Mientras que una chica de ojos verdes sentía la culpabilidad en su ser, decidía si revelar la identidad de la que dice ser su amiga ó dejar al inocente castaño sufrir, estaba más escuálido que antes y su cara estaba demacrada, debía hacer lo correcto, y aunque ya sabía que era lo que debía hacer, temía hacerlo...

(...)

El par de rubias caminaban por los pasillos del colegio, había rumores de que unos violadores tenían secuestrado a Hiccup, más bien todo el mundo sospechaba de todo el mundo, Hiccup era un chico apuesto y quién fuera que lo tenía secuestrado, no estaba mal de la cabeza, pero... ¡¿Quién en sus cinco sentidos secuestraría a un chico de catorce años?!

La chica de ojos verdes, caminaba ignorando los comentarios, ella sabía donde estaba Hiccup, ella sabía como se sentía y cómo estaba, ella sabía todo lo que sufría Jack sin tenerlo a su lado.

El día pasó, Astrid sólo pensaba en que más debía hacer para llamar la atención del castaño.

Mientras que la ojiverde sólo quería que todo terminara, ya no podía más. Hiccup no le había hecho nada y era completamente estúpido el plan de Astrid ¿Cómo se le pudo ocurrir secuestrar a Hiccup? ¡Era una completa inmadura!

Salió justo cuando la chicharra sonó, ignorando completamente los chillidos de Astrid, tomó su mochila del casillero y salió rumbo a la casa del castaño, aún con el corazón amenazando con explotar tocó la puerta, encontrándose con una mirada verde idéntica a la del chico, titubeó antes de tratar de hablar.

— Necesito hablar con usted —habló.

La castaña la miró, verde con verde se encontraron.

— ¿Acerca de qué? —preguntó la mujer llena de curiosidad.

— Yo sé donde esta Hiccup.

Editado: 6 de diciembre 2015.