Yo no sé nada, Tú no sabes nada.

Parte 1

Cada vez que nos veíamos en aquellos días terminábamos sudados, acostados y entre sabanas, el sabia como complacerme y yo sabia responder. Era una mezcla de rudeza, ternura y dulzura, cada beso, cada acaricia, cada suspiro, cuando nuestras miradas se cruzaban, podía sentir los sentimientos y no había necesidad de hablar. Todo era simplemente maravilloso, creía tocar el cielo con las manos, pero así como creí deambular en el paraíso caí como ángel desterrado.

Volví a Ikebukuro una tarde después de una semana, por cuestiones de obtener y dar información, caminaba por las calles, cuando lo vi, mis ojos quedaron fijos hacia aquella presencia que estaba bien acompañado de una morena, se sostenían de la mano y lo que ocurrió después hizo que mi pecho sintiera un punzada que parecía arrancar mi alma, un beso lleno de amor y de pasión de esos que ni en las noches que pasamos juntos nos dimos. Lo único que hice fue agachar mi cabeza, alejarme sin más. Nuestra relación no estuvo definida pero quien cayó al fondo de esto fui yo.

Tu vida seguía con o sin mí en ella, era uno más del montón, seguirás respirando.

***

Tres días después de lo visto, llegando a mi apartamento, te encontré fumando y apoyado en el umbral de mi puerta, quede sorprendido pero trate de disimular...

-Pulga ¿por qué no me dijiste que habías vuelto?- Shizuo pregunto irritado partiendo en dos su cigarrillo, esa pregunta si había dejado sin hablar, puesto que siempre tenía algo que decir. -No creí que me extrañarías tanto, Shizu-chan~- lo dije a mi estilo quería ver que respondía, quería saber y descubrir si solo yo he tocado fondo.-¡no me jodas!, Quien mierda te extrañaría- y ahí estaba la sinceridad que me gustaba y a la vez me lastimaba. -hooo~ nee~ Shizu-chan entonces, dime ¿qué haces aquí si no me extrañas?!- Fingir, siempre me fue fácil, pero en esta situación, realmente, se me es difícil. -quería tener un poco de pasatiempo... maldita pulga ya sabes bien para que vengo a verte la estúpida cara! - dentro de mi me burlaba de mi mismo, estúpido, estúpido, estúpido... ¿Cómo pude pensar que esta bestia algún día podía sentir lo mismo que yo? ¿en qué mierda estaba pensando?. - mira Shizu-chan, hoy lamentablemente no tengo ganas, ven otro día, ¿si?- y así sacando el seguro de la puerta para poder entran a mi propiedad, de pronto, Shizuo evita que cierra la puerta, con su fuerza hace que lo habrá de nuevo, - ¡¡¡ni una mierda vengo otro día!!!- y así como termino la frase me llevo hacia mi cama, maldigo que contamine mis sabanas, pero hay algo peor comienzo a pensar en otro gasto para compra una cama nueva. Maldita bestia con fuerza sobre humana! -Izaya, ¿puedes concentrarte?- dijo algo desesperado y quedándose quieto sobre mí. -como si pudiera- lo dije con sarcasmo mirando hacia otro lado para evitar su mirada, esta situación me está haciendo enfadar no puedo seguir mas con esto he llegado a mi limite, sea lo que sea no quiero esto, soy usado como una vieja puta de esquina, soy más que eso, soy ORIHARA IZAYA, un informante, el más temido para ser exacto. -Shizuo, hablo enserio- digo con la voz más seria que nunca, cosa que hizo a la bestia sorprenderse, -no tengo ganas, porque no mejor te vas con la morena de hace tres días? - y ahí estaba mi boca hablando de mas, lo dije sonó como colegiala resentida y sobre todo celosa, no, si yo mismo me jodí. - hooo~ así que me viste con Casandra, es hermosa ¿no?- hijo de tu buena madre, y me lo dices con tal insolencia que si tuviera más fuerza que él lo arrojaría por la ventana, ¡maldito!, - nee~ Izaya-kun ¿estás celoso? -, porquería con piernas, -wajajajajajaja... No me haga reír, ¿y porque mierda debería de estar celoso? Y...- antes de terminar mi frase posa su frente en la mía, hace que lo mire. -por favor, pulga si lo que me acabas de decir es de una novia enojada, pero para que entres de buen humor, Casandra solo es una clienta, que Tom-san me dio como trabajo, a la cual tuve que escoltar como una dama de compañía, pero no paso nada mas.- si claro y yo me chupo los dedos, ¡maldita bestia! - di lo que quieras Shizu-chan, pero enserio no quiero que me dejes invalido- solo eso me faltaba tragarme esas burradas. -okay, te invito a sal de mi apartamento, nee~ ¿qué te parece?- Shizuo junto las cejas en signo de enfado...

Prov. De Shizuo:

-no tengo ganas, ¿ por qué no mejor te vas con la morena de hace tres días?- okay, debo decir que eso no me lo esperaba, Jodida pulga, ¿Por qué mierda tuviste que aparecer ese día tan fastidioso en la cual tuve que soportar a esa vieja? Si era linda, pero no me interesa, Si había algo peor ese día era que no me descargaba desde hace una semana, pero vamos a ver qué juego te propones, Con lo que me acabas decir me da para hacerte una buena pregunta, - nee~ Izaya-kun ¿estás celoso? -, quiero oír tu respuesta, -wajajajajajaja... no me hagas reír, ¿y porque mierda debería de estar celoso? Y...- antes que terminara de decir otra burrada me acerco, apoyo mi frente con la de el haciendo que me mire ¿por qué la pulga no puede admitirlo? -por favor, pulga si lo que me acabas de decir es de una novia enojada, pero para que entres de buen humor, Casandra solo es una clienta, que Tom-san me dio como trabajo, a la cual tuve que escoltar como una dama de compañía, pero no paso nada mas.- aclarar no está de más, quiero que cambie ese humor, realmente quiero pasar la noche acá. - di lo que quieras Shizu-chan, pero enserio no quiero que me dejes invalido- jajaja pulga tu sabes que contigo no controlo mi fuerza y más si se trata de tu estrecho y cálido interior, -okay, te invito a sal de mi apartamento, nee~ ¿qué te parece, Shizu-chan~? -...

Enserio pulga cuando eres así, realmente me dan ganas de irme no soporto este tipo de discusiones estúpidas, que más que nada son relaciona de trabajo, yo no te pregunto si para obtener información te acuestas con alguien, si tienes que dar algo a cambio, y más que nada, no sé cuando te vas, ni cuando regresas, si vives o te han asesinado.

Me levanto de la cama.

Ellos no se decían que se amaban pero cada mirada lo hacía por ellos, era una especie paradoja de amorío entre estos dos. Shizuo constantemente sentía preocupación por Izaya cuando no se encontraba en Ikebukuro e Izaya pensaba en Shizuo cada noche que pasaba fuera de la ciudad famosa donde su preciada bestia residía. Honestamente alguien debía ceder.

#Gracias por leer, pido comentarios [malos o buenos]. Y continuaré con esto. Nos leemos la próxima vez.

Atte. Lian