A Fairy Tail: La Chica Inmortal Y Él Capitán Pirata

Capítulo 18:"Los seguidores de Zeref"

En el principio de todo el Gran Mago Zeref se dedicó al estudio de la magia y a medida que pasaba el tiempo sus ansias de poder los guiaron hacía al asesinato y destrucción del clan de Lucy, en un momento de distracción la última sobreviviente pudo tomar venganza y restituir la paz interior, terminando con la vida de aquel gran Mago sediento de poder y exterminio.
Después de cientos de años en la historia oficial se desconoce el paradero de ambos personajes pero no para la historia no oficial. Seguidores, numerosos seguidores que saben todo lo ocurrido, ¿como lo supieron? Nadie sabe, solo un punto muy importante culpan a Lucy y los años formaron un pilar de poder importante, suficiente poder para recuperar el cadáver de un anciano que antes se hacia llamar Zeref y encontrar a la culpable de todo eso, saben todo, y en muchos años de investigación encontraron una forma de revivirlo a cambio de una vida, una vida inmortal, la de Lucy.

Lucy se había separado del resto, no sabía lo que pasaba, donde estaba, ni siquiera sabía quien era la gente que la tenía presa, la había sacado de su celda la llevaron a rastras, pasó por unos pasillos, tipos uniformados lo sacaron de aquel barco, nada, ningún rastro de sus amigos, inmovilizada, no podía hablar, aquellos sujetos la llevaron hasta un carruaje, el sol brillante de la mañana le molestaba, violentamente la arrojaron aquel carruaje para encontrarse sola, en un rápido movimiento de un desconocido una bolsa fue puesta es su cabeza, confusión, todo negro, el carruaje comenzó andar, ¿habrían pasado horas? ¿Días?, era imposible saberlo, la oscuridad y confusión de lo que le iba a pasar no le aterraba, solo pensaba en sus amigos y en como podrían estar, pensaba en Natsu y como el destino era injusto con ambos, lo extrañaba...
Narra Lucy:
Sentí como el carruaje se abría, creo unos dos tipos me tomaron, aún estaba esposada y con esa molesta bolsa en mi cabeza, sentí como me arrastraban por un camino de tierra, parecía un camino interminable, cuando se detuvieron, sacaron esa bolsa, la luz me molestaba a si que entre cerré los ojos, me encontraba en la entrada de un gran templo, eso creo tipos con túnicas negras, no les podía ver bien su cara, vi como me encontraba, encadenada con un sucio vestido blanco, descalza mi cabello estaba sucio, me veía fatal, he estado peor si, pero presiento que lo que va pasarme algo peor, esta gente me necesita y creo saber para que.
-bienvenida querida, disculpa que seamos así tan bruscos- me decía un anciano a pesar de su apariencia su voz sonaba amable.
-por favor quitenle esas horribles cadenas a la dama- dio la orden el anciano y las acataron inmediatamente sentí mis manos como circulaba la sangre de nuevo
-¿que quieren de mi?- pregunté esperando una respuesta aquel anciano no me respondía
-siganme- se limitó a decir
-pero ¿quiénes son ustedes?- dije ya molesta
-querida Lucy, usted no va saber cual es el propósito de su visita (...) por ahora, la lleváremos a sus aposentos y allí se quedará hasta que su presencia sea necesaria- terminó de decir, me guiaron hasta una habitación, me dejaron sola y cerraron con llave, describir la habitación era exagerado era demasiado refinada, me acerque a la cama donde había ropa para mi supongo ya que había una pequeña nota adjunta..

Señorita Heartfilia:
En el anochecer habrá una cena que recurrirá su presencia, por favor este lista hasta entonces, no traté de escapar aún que no lo crea la estamos vigilando en este justo momento

Estaba rodeada, por ahora tendré que hacerle caso a esta gente, me tomé una ducha, la sensación de que me estaban vigilando era horrible, me vestí rápidamente y deje mi pelo suelto, revisando la habitación encontré un libro encima de un mueble, era como una biblia no se era raro pero fue peor cuando revisé su contenido, era un libro que contaba todo sobre Zeref y parte de sus últimos días y de como iba a volver a la vida, para este punto ya saben para que me tienen aquí, aunque había algo, algo que no entendí en el libro hablaba del último aliento de Zeref una joya, una joya con el última rastro de su alma, suficiente para revivirlo ...

-señorita ¿esta lista?- se escuchaba una voz al otro lado de la puerta me asuste y de forma torpe cerré y deje ese libro donde estaba
-¿¡eh!? si, estoy lista- dije un poco nerviosa
-bien entonces señorita tiene acompañarme- me dijo mientras abría la puerta y me esperaba
-si- dije y comencé a seguirlo, el templo era gigantesco, pasillos y pasillos llenos de habitaciones, era de noche y no había nadie mas que nosotros, después de unos minutos llegamos a un gran salón, mas bien un comedor y ahí estaba aquél anciano esperándome
-por favor querida siéntese-me indico con su mirada y yo le hice caso, no se que es lo que esta pasando pero nada de lo que pueda hacer ahora me ayudara, tengo miedo de lo que me pueda llegar a pasar.

-en estos minutos se estará preguntando ¿quienes somo nosotros?, también se preguntara ¿que queremos de usted? y por ultimo ¿cuanto sabemos de usted?, pero por su propio bien, no lo sabrá, lo único que le puedo decir es que esto todo lo hacemos por volver con Lord Zeref- me dijo con un tono amable, me quede callada, ¿que mas podría decir? tengo que escapar -no se preocupe en preguntar no habrá respuestas, lo único que le puedo recomendar es que disfrute su corta estancia en nuestro templo, sera atendida con mucha atención y delicadeza mientras usted no nos cause problemas- me advertía, me miraba con cautela esperaba alguna acción de mi parte, no puedo moverme, ¿desde cuando me volví tan cobarde?.

-¿dónde están?- me atreví a preguntar

-¿quienes?- me pregunto, con cierta extrañeza

-la gente que estaba conmigo, mi familia ¿DÓNDE ESTÁN?- pregunte exigente, no estoy de humor que jueguen con esto conmigo

-muertos- me contesto, me quede helada, pálida, rabia, mucha rabia -probablemente,no lo se señorita Heartfilia, son piratas al reino no les sirve, me da igual, morirán pronto si es que no lo están ahora- me termino de decir como nada, comencé a temblar, las lagrimas no salían, rabia mucha rabia, pesque el cuchillo que tenia al lado de mi mano y con todas mis fuerza lo enterré en mi muñeca, rápidamente me acerque al anciano, y lo ataque, en parte pude dañarle su brazo bastante pero antes de tomar conciencia de lo que estaba haciendo me golpearon en mi cabeza y caí inconsciente, todo se fue a negro, otra vez...

Desperté en una sucia celda, sentí como unas arañas recorrían mi cuerpo, se sentía desagradable, me moví para que se fuera, la habitación en si estaba oscura, sucia y húmeda, sentí pisadas que se acercaban hacia mi pero se detuvieron.

-solo le pedimos una sola cosa y no lo respeta- se limito a decir una voz desconocida -pensábamos hacer esto lo menos doloroso posible para usted y ahora perdió su oportunidad- termino de decir para enterrar una espada en mi abdomen, duele, duele mucho -ahora nos dirá como romper la maldición que puso en Lord Zeref porque aunque él este muerto, nosotros como sus seguidores lo reviviremos- termino de decir, satisfecho

Esto solo es el comienzo de una larga tortura...

Natsu, ayúdame...

continuara...

capitulo nuevo, perdón por no subir capitulo antes, no se me ocurre como hacer bien la trama que se avecina, lol, eso las actualizaciones van a ser lentas pero sigue en pie, así que no me maten por tardarme.. :3