Princesa suicida

Acciones.

Al llegar a casa solo quería dormir, pero, como no, tenia deberes, ademas que mama llamo y le dio por preguntar "que hay de nuevo", ¿es enserio? Le conté lo mas breve que pude que Jules quiere ir conmigo al cine hoy por la noche, le pareció bien y me dejo ir.

***

Me dejo plantada.

Espere una hora afuera del cine y nada. No llego. Perdí mi dinero en boletas inservibles, así que, como buena persona que soy, le regale las dos boletas a Brooke para que fuera con Ryan, al momento de pasárselas, me dio las gracias forzadamente y me miro con unos ojos fríos como la nieve.

En fin, no importa, ni se lo voy a recordar.

***

La verdad ya no se que pensar, Liam me esta tratando mejor de lo normal, cuando hace unos dias se estaba riendo de mi; Jules no me ha dirigido la palabra, ni siquiera me mira por la ventana; sin mencionar que Ryan esta distante, cuando pasaba las 24 horas en mi casa, por Brooke, la cual sigue como siempre, pretendiendo que no existo.

Además, sigue sin llegar ninguna nota desde que tire aquella el otro día, lo cual no explica el comportamiento de Liam, aunque no he tenido mucho tiempo para pensarlo, tengo examen de cálculo este viernes.

Son las 3:00 pm, así que decido estudiar un poco, por lo menos hasta las 5:00 pm.

***

Jules, como cosa rara, entra en mi habitación precipitadamente, como que acabara de correr una maratón.

-¡CHRIS! ¡NOTICIAS DE ÚLTIMO MINUTO!-dice mientras intenta recuperar el aliento.

No respondí. Al parecer no se dio cuenta, puesto que continuo hablando:

-Ya se quien es el tipo anónimo-logra recuperar el aliento-... es Mark...-cae con un estrépito en mi cama.

Mark.

Claro que se quien es Mark, conozco 3/4 de todo el instituto, y ese tal Mark hace parte de esa cifra. Lo que me sorprende tanto es que sea el.

El chico que se ha hecho atrás mio todos estos años. El chico con ese cabello castaño risado. El chico de los ojos mieles. El chico que me ha parecido lindo pero inalcanzable...

No, definitivamente no.

-No, no y no. Es imposible. Ni siquiera sabe que existo. Simplemente no.

<<Como todos>> pienso pero no abro la boca.

Jules se queda mirándome, con una sonrisa en la mirada.

-Si. Estoy segura. Tengo pruebas-dice como si fuera una detective privada profesional y acabara de descifrar el caso del siglo.

-¿Cuales?

-Alguien lo vio escribiendo muy nervioso en su cuaderno y botaba muchas hojas de su cuaderno, indeciso.

Definitivamente le falta un tornillo.

-Estas loca si crees que me voy a tragarme eso. Tengo que estudiar, hablamos mas tarde.

-Espera, además choco con tus cosas al parecer para dejarte una nota.

-Sigue sin demostrar absolutamente nada.

-Bien, si no quieres aceptarlo, no importa, pero cuando te garantice que sí es él, no te molestes cuando te diga <<te lo dije>>-justo en ese momento salta por la ventana, sin darme tiempo alguno de responder.

Jesús, María y José.

***

Ahora si, definitivamente esto se esta saliendo de control.

Exceptuando que Jules sigue <<investigando>> quien es el responsable de todo esto y que las cartas siguen sin llegar (claro que no me importa).

Lo que de verdad esta mal aquí es Brooke.

Hablo conmigo, me dirigió la palabra, ella afirma que mi mamá la obligó, pero no tiene sentido, si alguien me ignora mas que Brooke, esa es mi mamá.

Estaba escribiendo como para alejarme un poco y llaman a la puerta, arruinando mi pequeño momento de inspiración.

Abro. Es Brooke.

-¿Que estas haciendo aquí?-espeté

-Solo vengo a pasar el rato.

Aja, como no.

-¿Segura que no te equivocaste de puerta?-hago ademán de cerrarla.

-Chris, yo...

-¿Que? ¿No quisiste hacerme daño todos estos años? ¿O tal vez simplemente lamentas que no haya nacido como un varón?-la interrumpí, no quería que me diera sus pesares.

-¿Que...?¿De que estas hablando?

-¿Como que de que estoy hablando? No te hagas la estúpida, por que tus notas perfectas dicen otra cosa.

-Créeme, no tengo idea...-empezó mientras le temblaba la voz.

-Vete. No quiero escucharte mas.

-Espera.-empiezo a empujarla hacia la puerta.

-Deberíamos tener otra agradable conversación pronto.-cierro la puerta en sus narices.

-¡Ryan termino conmigo!-grita desde el otro lado de la puerta.

Abro la puerta, otra vez.

-Siempre haz sido mentirosa, y todavía lo eres.

Cierro la puerta, me trago el nudo que se formo en mi garganta, me acuesto.

Quedo dormida al instante.