Bullying {Andy Biersack y tu}

Capítulo 9

—¿Novia? Vamos amigo, mira su cara—dice Zack señalándome—ni ella se lo cree.

—No me importa lo que digas, yo se que ella es mía y no deberías hablarle así—yo sin poder reaccionar, Andy le da un buen golpe en la cara haciendo que su labio se parta.

— ¿Entendido?—dijo aún agarrándolo del cuello. Zack ladea la cabeza y Andy lo suelta.

¿El profesor? Bueno, el tomando su café como si lo que acabara de pasar fuera lo más normal del mundo.

Toda la clase se queda mirando en mi dirección a ver como reacciono.

—Ah...—eso es lo único que alcanzo a decir antes de salir corriendo del salón.

Paso por los largos pasillos hasta que...

— ¡Hey! ¡Ven aquí!—escucho la voz de una chica que al parecer debe estar furiosa.

Cuando volteo a ver me encuentro con la mirada amenazadora de Rachel. Ay, no.

—me alejo cada vez más pero logra alcanzarme—Quédate aquí perra inmunda.

Me toma del brazo con fuerza y me mete bruscamente en el baño.

Ya dentro me pega varias cachetadas. Son demasiadas y ya siento sangre correr por mi nariz. Quedo media inconsciente en el suelo.

Se me acerca y dice: 

— No te acerques a él ¿Está bien? Agradece que fueron golpes esta vez, la próxima no voy a tener piedad.

De a poco solo veo oscuridad.

...

— ¡______!-gritan desde el otro lado de la puerta.

—¡______!—los golpes son más fuertes y los gritos se tornan desesperados.

La puerta de abre y se estampa contra la pared.

Veo borroso, pero noto que una persona se acerca a mi y me carga en sus brazos.

—Tranquila _______, todo estará bien—dice y me apega a su pecho. Reconocería ese aroma y esa voz en cualquier lugar.

~Narra Andy~

La cargo en mis brazos y la acurruco en mi pecho saliendo del baño.

Todos me miran extrañados al verme salir del tocador de mujeres y su mirada se intensifica al notar a _______.

—¿Qué miran?—les digo algo agresivo. En ese momento todos voltean.

Ya en el estacionamiento, ubico mi auto y coloco a la chica en el asiento del copiloto.

Trato de despertarla pero se ha quedado dormida.

De camino a mi casa no puedo dejar de pensar en ella.

¿Qué me pasa contigo? Si supieras lo que de verdad siento por ti y si te llegara a pasar algo, no podría soportarlo.

~Narra ______~

Me despierto a causa de una música familiar. No se donde me encuentro, trato de incorporarme y...ya he estado antes aquí.

—Oh, lo siento. No era mi intención despertarte-dice el chico y apaga el estéreo.

—Andy, ¿tu otra vez?—suspiro y froto mis ojos.

—¿Y quién más sería?

—No lo sé—trato de levantarme pero mis piernas están débiles. Andy con lo justo logra atraparme.

—Será mejor que te des un baño ¿No lo crees? Así...estás más relajada—dice y me aparta a la vez que coloca un mechón suelto detrás de mi oreja.

—Está bien—suspiro—Pero ¿puedo ir a buscar algo de ropa a casa y volver? La verdad, no tengo ganas de estar allí.

—No te preocupes, yo me encargo de eso.

—Gracias-agradezco. Él me sujeta la mano con delicadeza y me lleva hasta el baño.

Entro en el cuarto y se apoya en el marco de la puerta.

No contengo las ganas, ya no puedo más.

Camino lentamente hacia el ojiazul y lo abrazo con fuerza. Me siento protegida en sus brazos y me alegro al ver que me abraza con más fuerzas.

—Te quiero— se escapa de mi boca y ahora deseo que me trague la tierra.

—También te quiero ______—siento como sonríe y deja un beso en mi cabeza.

Subo la cabeza para mirarlo, y en efecto, él esta sonriendo.

—No sabes cuantas veces he querido decirte eso—dice y se acerca a mis labios haciendo que se junten en un beso cálido.

Nos tomamos nuestro tiempo, el beso es tierno y lento. Una sensación demasiado hermosa. Pasa su mano por mi espalda para acercarme más a él.

Lo tierno y cálido se vuelve rápido e intenso, pero me separo antes de hacer cualquier locura.

Los dos sonreímos a la vez por lo que acaba de pasar.

—Anda, ve. Estaré en la cocina—cierra la puerta no sin antes guiñarme un ojo. Siento como mis mejillas se ruborizan ante tal acto.

Me desprendo de mi ropa, prendo la ducha y me baño.

Envuelta en una toalla, me asomo por la puerta para ver donde se encontraba mi ropa. Solo tenía la ropa interior y un short negro que uso debajo de la ropa.

A mis pies encuentro una remera negra con el logo de The Misfits. A puesto a que es de Andy, obvio.

La agarro y entro al baño. Me pongo mi ropa interior, el short y por último la remera que me llega casi hasta las rodillas.

Seco mi pelo lo más que puedo y lo desenredo para por fin bajar.

Ya en la sala donde estaba antes, se percibe un olor riquísimo. Mi estómago ruge. No he comido nada desde esta mañana.

—______, ¡ven! Estoy en la cocina!-grita desde ella y yo me acerco.

Al ver con claridad lo que está haciendo, me encuentro con unos tostados enormes con el queso derretido (matenme que me está agarrando hambre).

—ruge mi panza bastante fuertes al verlos—Tranquila, son para nosotros—dice Andy y me guiña un ojo.

— ¡Que bueno! Por que tengo un hambre...—digo frotando mi panza.

—Jajaja, se nota—dice y agarra los platos y me indica que vallamos a la mesa.

Nos sentamos y mi mirada solo se concentra en ver al super tostado que tengo al frente.

—A comer se ha dicho—dice y le da una gran mordida al suyo.

Miro mi plato y agarro esa exquisitez de comida y le doy un bocado.

—Esta bueno—termina de masticar— ¿Cómo está el tuyo?-pregunta.

—Muy bueno—y hago una mueca ya que tengo un poco de queso en la boca. (A ver Andy, ¿como te digo que estás más bueno que comer nutella?)

Luego de comernos creo que hasta el plato, tocan el timbre.

Andy va a abrir y...

— ¡Ronnie!¡ Amigo! Pasa—exclama él desde la puerta.

Ay, no. Estoy muerta.

N/A: Sigo?

BAJEN LAS ARMAS!*dice y pide piedad*

Lo se, tarde siglooos en actualizar, es q me daba flojera escribir y bueno...acá les dejo el capítulo.

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Gracias a las que votan y comentan bc me hacen feliz.

Bye :*