Y así....el tiburón se enamoró del pececito. Jimin y ___(1° Temporada)

Capítulo 66

Salgo junto a Roberto del metro, en un silencio incomodo, en las pocas estaciones que nos separaba de casa de Jimin estuvimos en silencio, pues a fin de cuenta no tenemos nada en común para hablar y supongo que cada uno iba pensando en lo suyo.

- Es aquí- dice abriendo con una llave, frunzo el ceño ¿Jimin y él viven juntos? Sé que no vive con sus padres pero no me había dicho nada de vivir con alguien, entonces ¿Por qué tiene una llave de su casa?
- Si, lo se- me limito a decir en voz baja, él me mira por un segundo y una mirada traviesa se refleja, yo me sonrojo pues supongo que él sabe porque y haciendo qué he estado aquí.

Entramos en el ascensor en silencio, es la primera vez que me tomo mi tiempo para analizar el barrio de Jimin, no es un barrio marginal o algo así, no, se ve tranquilo, aunque siempre hay alguna banda, pero seamos sinceros ¿en que barrios no están? Cuando el ascensor para en el cuarto salgo primero y me detengo delante de la puerta que pone A, el piso de Jimin, Roberto abre la puerta y al entrar ya se aprecia el desorden.

Miro a mi alrededor, no es un piso muy grande, coqueto si Jimin no lo tuviera tan sumamente asqueroso, Roberto parece avergonzado y abre las ventanas para que entre el aire. Esperando que así, se disperse el mal olor. Quita algunas cosas que están por medio, como patatas y latas de cerveza, una litrona vacía y algunas colillas de tabaco. Miro una mesa, allí hay restos de un polvito blanco. Me estremezco. Roberto no me mintió.

- ¿Vives con Jimin?- le pregunto rompiendo el hielo
- ¡No! Dios me libre ¿tu has visto esto?- dice señalando a su alrededor y me resulta casi cómico(si no se tratase de él) su cara- soy un desastre, pero lo de Jimin ya es un huracán. Créeme, esto tampoco esta particularmente limpio cuando esta en buen estado
- Pues las pocas veces que vine, lo tenía ordenado- digo sonrojada
- Oh, eso es porque él tenía que darte buena impresión para poder folla...- él se calla de repente y yo miro a otro lado incomoda- perdona
- Esta bien. ¿Dónde esta?
- En la habitación- dice señalándome la puerta por el pequeño pasillo, donde primero esta la puerta del lado izquierdo que es el baño y un poco más atrás, de frente, su habitación.

Me acerco nerviosa. Temerosa de lo que me pueda encontrar, me detengo en frente de la puerta y escucho unos ruidos que provienen de dentro, son como unos gemidos, pero parecen de dolor, después lo escucho reírse. ¿Estará acompañado? No puedo evitar que me venga Nikki a la cabeza y de quizás todos los encuentros que tuvieron en esa misma habitación. Donde él me hizo el amor. O lo que yo creí que era. Abro la puerta decidida y me lo encuentro sentado y con la cabeza agachada esnifando cocaína. Justo como aquella vez.

- ¿Jimin?- susurro muy bajo

Jimin levanta la cabeza al oír mi voz. Me mira sorprendido de verme allí. Me equivoco, no esta como la otra vez. Ahora esta con ojeras, pálido, se ve demacrado y se me rompe el corazón. No puedo evitar que se me salgan algunas lagrimas. Jimin se acerca a mí asustado y me rodea con sus brazos, enseguida siento varios olores mezclados en él y ninguno me resulta agradable.

- No llores, amor, por favor- me suplica al oído, me separo de él
- ¿Qué estas haciendo, Jimin? ¿Qué significa esto?
- Solo... me divierto- dice con una mueca
- ¿Divertirte? ¡te has visto, eh! Dios. Das asco, Jimin- le digo con rabia
- ¿A que coño has venido? ¿A humillarme más? - yo me quedo callada y él comienza a alterarse- Vamos, ¡dímelo, joder! ¿te ha traído el gilipollas de Roberto, no? Pues que sepas que no necesito tu lastima- me grita más fuerte- no te necesito a ti- me susurra muy cerca de los labios, yo aparto la cara por el olor al alcohol que desprende
- Estas mal...
- ¿Y?- Jimin comienza a reír violentamente- ¿Qué te piensas? ¿Qué es por ti?
- Jimin... tranquilízate- dice apareciendo Roberto detrás
- ¡No! No puedo- grita- ella- dice señalándome- maldita sea no sé que me ha hecho- dice con rabia y se le escapan unas lagrimas- mírame- dice señalándose- mira como estoy... por ti- dice refiriéndose a mi, yo levanto la cabeza y le miro
- Jimin, por favor...- digo reprimiendo las lagrimas
- ¡No! ¿Qué ha pasado? Dime. ¿Cuándo paso? Porque no me di cuenta. No lo entiendo... es demasiado pronto- grita
- ¿Demasiado pronto para qué?
- ¡Para que yo te quiera de la forma en que lo hago! - grita aun más fuerte, de repente se tambalea y se mantiene en pie gracias a la mesa
- ¿Jimin? ¿Qué te pasa?

Me acerco a él temerosa, y cuando le toco la mejilla él se estremece, sonríe de lado, se marea y no me dio tiempo a cogerlo así que los dos caemos al suelo, Roberto se acerca corriendo y me ayuda a apartarme de él, pues me ha caído prácticamente encima, comienza a llamarle pero Jimin parece no estar en este mundo, Roberto se pone más nervioso y yo me asusto más, ¿Qué le pasa?. Entonces comienza a convulsionar, Roberto comienza a gritarle pero Jimin no reacciona, convulsiona más fuerte. Y es cuando noto que comienza a salir una espuma blanca de su boca, doy un grito del susto. No puede ser. Esto no puede estar pasando.