Lepidópteros.

128 10 0
                                    

El desdén más intrincado de mi existencia.
Solía darme bienvenidas abastecidas de caricias y buenos semblantes, sonrisas que acogían mi llegada, un ósculo que me hacía olvidar el largo viaje, unión de brazos, pulmón con pulmón respirando la misma sensación, un par de corazones palpitando con arritmia de tanta alegría pero entre ellos sí mantenían el ritmo de la poesía, miradas que ni con ceguera se perdían, cuatro manos conformando algo más que un entrelazado, nuestros vientres no eran mariposarios, mas bien nosotras éramos dos de ellas, volando al reír tanto y tu boca era el néctar que necesitaba, por eso era que tanto te besaba...
Y la pregunta no es; ¿qué nos pasó?
Sino mas bien; si sabíamos que esto podía pasar, ¿por qué no lo evitamos más cómo solíamos hacerlo?

- L.U.G
Madrugadas de poesía estilo Urbina.

27 de septiembre de 2015, 2:08 AM

Madrugadas de poesía estilo Urbina.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora