Mulán no entendía qué había de grave en que sangrasen, pero por el frío recorriendo su espalda y la rigidez de su espalda, se dio cuenta que algo muy dentro de ella, había un frío gélido que la advertía.
Vio al Capitán Li sentarse de mala gana en el suelo, y con la espalda recta y los ojos cerrados, dijo-: Entonces, ¿qué haremos a continuación?
Kida suspiró, y asintió en dirección a Thomas. -¿Crees que deberíamos dormir y comer un poco antes de dirigirnos a las puertas? En verdad, siento como si hubiese sido aplastada por el Leviathan.
Él le dio media sonrisa en respuesta, con un toque de malicia en sus ojos. -Estás tomándome el pelo, ¿no es cierto?
Ella se rió, y le dio un empujón suave en el hombro. Mulán comenzaba a sentirse un poco fuera de lugar, dado que no entendía casi ninguna de sus bromas.
Milo, quien pareció adivinar sus pensamientos, dijo-: Para venir de nuestra ciudad a la vuestra, tuvimos que pasar una pequeña travesía. Y bueno, digamos que Q siempre ha sentido una especie de morbosa curiosidad hacia el Leviathan.
Tom enarcó una de sus perfectas cejas castañas. -¿Morbosa, dices? ¿Siquiera sabes lo que significa eso, compañero? -preguntó, con voz sugerente.
El rostro del otro muchacho se puso colorado más rápidamente de lo que parecía humanamente posible. Los demás se rieron, y, aunque nadie volvió a mencionar una palabra respecto a lo que se avecinaba, se dio un acuerdo silencioso de que disfrutarían esa única noche, porque bien sabían que podía ser la última.
*****
Mulán se despertó sobresaltada, con el corazón latiendo velozmente en su pecho y una fina capa de sudor cubriendo su piel. Sus ojos vagaron a su alrededor inmediatamente, como si buscasen con desesperación encontrar la causa de su pesadilla observarla con esa familiar sonrisa malévola y ojos brillantes.
No había nadie, sin embargo. Todos parecían dormir acurrucados en los pequeños espacios de tierra libre de esqueletos que habían preparado. Bueno, todos menos uno.
¿Dónde estaba Thomas?
Y entonces, Mulán escuchó un sonido tan leve que pasaba casi desapercibido en el silencio de la noche. Era muy suave y tan natural como el cantar de los grillos en los jardines. Era el sonido producido por alguien que había escuchado la música verdadera, la que se producía únicamente cuando se siente desde el fondo del alma.
Ella se puso de pie tan sigilosamente como pudo, y, agudizando su oído, siguió aquel maravilloso sonido a través de los árboles a su alrededor.
Luego de varios minutos de caminar casi a ciegas, finalmente le vio.
Thomas estaba sentado de espaldas a ella, con la mirada fija en el lago perfectamente azul que se extendía frente a él como el cielo estrellado sobre sus cabezas. Y aunque había sido su preciosa voz lo que la guió hasta ese sitio, casi parecía como si estuviese llorando.
Mulán dio un par de pasos vacilantes en su dirección, y la canción se detuvo de repente.
-No, por favor -dijo ella suavemente, lamentando haberle interrumpido-, por favor, continúa. Era un sonido maravilloso.
Casi podía imaginarle sonriendo cuando él respondió, sonando tan ligero como una caricia.
-Para nada, en realidad siento como si me hubieses salvado -Muy lentamente, Tom se giró hacia ella, y aunque sonreía, a Mulán le pareció que jamás había visto a alguien tan triste-. Yo... odio cantar.
Eso le sorprendió tanto, que tartamudeó al responder-: ¿C-Cómo es eso posible? ¡Jamás había escuchado nada similar!
Thomas cerró los ojos, como si sus palabras le recordasen algo agradable. -La música... me recuerda demasiadas cosas. Mi antigua vida. Todo lo que he sido, y que he odiado. La odio, porque solía ser lo único bueno que poseía -Negó con la cabeza muy lentamente, y finalmente la sonrisa se borró de sus labios. Y entonces Mulán se dio cuenta que él tenía una pequeña cicatriz bajo su labio inferior, que era prácticamente invisible en su habitual rostro sonriente-. Siento como si todo lo malo que fui, le hubiese contaminado.
ESTÁS LEYENDO
Fa Mulán y el laberinto de las almas
Mystery / ThrillerLuego de que el nuevo emperador de China llegase misteriosamente al poder, ha ordenado que se vacíen todos los templos familiares y le sean entregados. Se dice que ha hecho un trato con entidades y se los ha ofrecido de alimento, por lo que la única...