Imanes

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Derek se acercó de nuevo a mí, su rostro estaba cada vez más cerca del mío podía sentir su respiración en mi faz y...
---Derek -gritó la mama de Derek a la lejanía.
Nos interrumpieron.
---Mamá -exclamó Derek por completo alarmado, asustado.
Lo bueno de eso es que estábamos del lado contrario a donde estaba la madre de Derek.
---Ve a ver antes de que se acerque más -susurré en forma de orden y lo empujé para que se fuera.
Derek se fue por ahí con su madre.
---Ahora vuelvo pequeño -dijo antes de irse.
---Bueno al menos ahora me dice pequeño -comenté para mí mismo ya estando solo.
Pasé el rato ahí sólo bajo la sombra del haya cuando me di cuenta que ahora traía puesta una ropa más ligera, no traía puesta su ropa elegante.
---Mi madre me dijo que no la ensuciara para la cena -se adelantó a mi pregunta ya estando cerca de mí.
---Sí ella tiene razón. -Quería ver a Derek reluciente para la noche de mí cumpleaños.
Y al menos los minutos que pasé solo me hizo pensar que estaba actuado muy, atrevido con Derek, hasta me sentí como Malia, así que decidí que me comportaría como siempre lo hago, inocente y amable.
Durante el resto del bello día, Derek y yo nos quedamos acostados en el pasto, viendo la copa del haya desde abajo moverse con el aire, de vez en cuando viendo unas hojas caer o los pájaros juguetear entre ellos.
---Stiles -dijo él, recuerdo que dijo que cuando decía mi nombre por cuenta propia era porque las cosas no andaban bien. Y por eso me espante un poco.
---¿Qué pasa? -pregunté con preocupación.
---En dónde yo vivía siempre corríamos el riesgo de morir, era un terreno lleno de guerra, era el campo de guerra de los otros países, por éso soy serio, siempre pensé que no había que confiar en nadie, bueno, yo sólo me fío de mi madre y de Laura, y también gracias a donde viví es tengo esta actitud sería con todo el mundo -recitaba sin dejar de ver el cielo, y de vez cuando el aire jugaba con su cabello, como si fueran mis manos acariciando su cabello.
---¿Y si no confías en nadie por qué aceptaste vivir en mí casa, cuando apenas te había conocido? -Esa pregunta surgió de pronto en mi cabeza, y me tenía confundido.
---Bueno... algo me dijo que, debía confiar en un pobre niño que invitaba a un completo desconocido a vivir a su casa, incluso sabiendo que corría el riesgo de que mi familia le hiciera algo a la suya... -dejó un rato de hablar y cerró los ojos-. Pero no me arrepiento, porque aquí me siento bien, y daría todo con tal de pasar los días siempre así -dijo al mismo tiempo que me veía a los ojos y hacia una sonrisa diminuta con los labios.
---Vaya...
---Soy de esas personas que son muy fuertes por fuera, pero somos blandos por dentro, como una nuez. Como soy fuerte podré protegerte, pero mi blando interior, necesita ser protegido y cuidado. ¿Estarías dispuesto a cuidar y proteger a mi blando interior? -cuestionó él con su mano derecha en su pecho.
---Por supuesto -respondí sin dudarlo ni un segundo.
Ahora que lo pienso, Derek se estaba abriendo conmigo cada vez, ahora ya hasta medio sonríe. Todavía recuerdo cuando llegó a mi casa.
《---Hola soy Stiles -saludé amablemente.
---Soy Derek -dijo mirando el firmamento. Sólo debía empezar una conversación.
---¿Qué haces?
Entonces sí volteó a verme.
---¿Qué te parece idiota? -respondió y me calló gordo, pero ya sabes que soy buena persona y por éso lo rescaté de las calles.》
Más tarde en mi cena de cumpleaños. Había un gran pastel, y demás golosinas y leche, y una botella nueva de vino.
---Stiles -dijo la madre de Derek, dándome un caluroso abrazo y después en las manos un par de zapatos nuevos.
---Gracias -respondí con una sonrisa, su familia me tenia consideración, se supone que ella es mi ¿futura suegra? Bueno, éso sólo aplica con la gente que se va a casar, y Derek y yo nunca vamos a hacer algo como eso.
---Feliz cumpleaños -habló Laura, dándome en las manos un par de bufandas, a cuadros, una de colores azules oscuros y la otra de bancos con negros y rayas rojas-. Son de parte mía y de Peter. -Volteé a ver a Peter a unos metros de nosotros, callado con los brazo cruzados, levanto la cabeza en señal de saludo y también también la mano.
---Gracias Laura y Peter -agradecí y después me fui muy cómodo a sentar.
---Nos reunimos en familia para celebrar los cumpleaños de uno de nosotros, mi hijo Stiles Stilinski, al cual no le gusta su nombre verdadero, es muy distraído, y algunas veces me saca de mis casillas pero aun así, lo amamos -decía mi padre de pie en un extremo de la mesa del gran comedor-. ¿Alguien más quiere decir algo?
---Te amo hijo, y no importa qué pase nunca dejaré de hacerlo -habló mi madre.
---Me caes bien niño, siempre le das su merecido a Derek -comentó Peter riendo, mientras Derek lo intentaba fulminar con la mirada.
Después la madre de Derek dijo cosas en voz alta, cosas que mis padres y yo no entendimos para nada.
---Mi madre dice que muchas gracias Stiles por habernos traído aquí con tu familia y a ellos por aceptarnos, que eres un niño muy dulce y amable y que felicidades por tu cumpleaños -tradujo Laura, después se quedó pensando-. Pues mi madre me ha robado la idea -rió-. Felicidades.
---Pues yo... -Todos dirigieron su atención a Derek que estaba frente a mí sentando-. Sólo quiero decir que, eres un gran amigo y he llegado a apreciarte, un poquito -Aunque sus palabras no hubieran sido las mejores y su tono de voz tampoco, era todo lo que yo quería. Le sonreí ampliamente-. Gracias Stiles -habló y ahora se escuchaba muy sincero, desde su corazón.
---¡Por Stiles! -dijo mi padre con una copa de vino levantada frente a él. Todos teníamos muestras copas.
---¡Por Stiles! -proclamaron todos en voz alta. Puede que no fuera el vino más caro del mundo, pero era suficiente. Bebimos de la copa.
---Ahora sopla al pastel Stiles -dijo mi madre.
Todos los días yo soplo velas por la noche para irme a dormir, pero era mi cumpleaños, era un día especial, y podía tener un deseo. Las velas eran "medianas" en altura, delgadas y color hueso, las flamas eran tranquilas, y eran las únicas que alumbraban la habitación. Me acerqué a ellas, pude sentír el calor de sus cuerpos y después al ver a través de las velas vi el rostro de Derek. Ya sabía cual era mi deseo catorce, y le soplé a las velas hasta que se apagaron.
Después de éso madre se encargó de prender el candelabro sobre nuestras cabezas para que pudiéramos ver mejor. Comimos la cena y después ayudé a mi madre a recoger algunas cosas.
---Deberías agradecerle a Derek -me susurró mi madre en un momento en que estábamos en la cocina.
---¿Por qué? -pregunté interesado.
---Él hizo casi todo lo que viste en la mañana para el desayuno -declaró mientras lavaba algunos platos sucios.
---¿Él...? Él lo hizo... -susurré sorprendido.
---Sí pero no le digas que te dicho lo que hizo, él me pidió que no te dijera esto, pero creo que sería bueno, para que, ya sabes, le tengas más consideración, el es buen chico. -¿Más consideración? , sería imposible mamá, pensé
---Está bien, no le diré.
---Confío en ti, buenas noches Stiles. -Besó mi frente agachada.
---Buenas noches mamá -me despedí y me fui al piso de arriba .
Llegué al cuarto donde aún no estaba Derek, me cambié y y me puse la pijama, ya casi al acostarme, sentí un ligero codazo en mi costado derecho, era Derek.
---Ten -me estiró el frasco de vidrio que vi en su poder en la mañana, se veía tan misterioso el líquido dentro de él en medio de toda la penumbra-. Es un perfume que yo hice... para ti...
Me quedé boquiabierto, no sólo había planeado y preparado mi desayuno, sino que también me hizo un perfume.
---Es mi aroma favorito -habló de nuevo-, y espero que te guste, cada vez que lo uses será como llevarme contigo en la piel... ¿No piensas tomarlo? -reclamo (sin ser grosero) al darse cuenta que no hacía nada.
---Gracias -dije tomando el frasco con mi mano derecha, y también dándole un abrazo.
---No hay de que -respondió también siguiendo el abrazo, pasaron largos segundos-. Te debo una última cosa -susurró viéndome a los ojos. Sentí los huesos en mi pecho contraerse con un hormigueo.
---¿Qué es?
---Esto.
Acarició mi cabello en la nunca y se acercó y nuestros labios se encajaron entre ellos tan solo tres segundos.
---Vamos a dormir -dijo y se metió a la cama. Y yo hice lo mismo. Me quedé inmóvil y pasé la lengua por mis labios, intentado recuperar el beso de hace unos segundos.
---Hasta mañana -hablamos los dos al unísono. No dijimos nada después, y caí rendido.
Por ahora éso es todo lo que tengo que contarte querido Sourwolf, espero que mañana sea otro gran día para nosotros. Derek Hale me ha besado dos veces y creo que, sabiendo que él lo ha propuesto por sí mismo, no tengo por que ocultar más mis sentimientos, al menos con él.
ΔΔΔΔΔΔΞΔΔΔΔΔΔΞΔΔΔΔΔΔ
Hoy es 20 de Noviembre de 1863. Ha pasado mucho tiempo desde que no te veía Sourwolf, mi vida se ha vuelto bastante complicada con la escuela, creo que la verdadera razón para no escribir en tanto tiempo es que mi historia con Derek se ha vuelto más seca y aburrida que antes, apenas y nos vemos y gracias a eso, cuando llegamos a estar solos, es muy incómodo.
La verdad es que al despertar apenas y hablamos, al llegar a la escuela cada quien se iba a hacia sus salones, y ya que nosotros éramos un caso especial, pues los niños apenas regresaban a las escuelas y había lugares vacíos en algunos grupos, a Derek y a mí nos pusieron directamente en noveno grado, con chicos de quince y hasta dieciséis, cuando nosotros sólo teníamos catorce. Al salir de la escuela, a veces él salía más temprano o más tarde que yo, así que no regresabamos juntos tampoco, al llegar a casa hacemos tareas del hogar, después mi padre nos pone a hacer trabajos del campo hasta casi desfallecer del cansancio de largas jornadas bajo el sol. Y nuestras conversaciones sólo se limitaban a la habitación ya de noche, se notaban nuestras ganas de hablar entre nosotros, pero había esa incomodidad, de los besos que nos dimos, y sólo sucedieron el día de mi cumpleaños, no volvimos a hablar de éso, mucho menos a repetirlo.
Y una mañana... Desperté ya por costumbre, nos hemos vuelto muy consientes de nuestras obligaciones. Me estiré en la cama, las piernas, los brazos, tenía todo el espacio para hacerlo, también, la cama estaba medio fría, no era como cuando desperté con Derek el día después de mi cumpleaños, pero bueno. Me arrastré un poco por la cama y me asomé por la orilla, tal vez podría era a Derek aún en el suelo, durmiendo, sólo encontré el duro suelo de madera. Me levanté en busca de él, abrí la puerta y me asomé al mismo tiempo que caminaba rápido hacia afuera, y pasó algo que no esperaba, choqué con él.
---¡Derek! -exclamé inevitablemente al ser descubierto.
----Stilinski... -susurró sorprendido, estaba mojando, se acostumbró a los baños de agua fría por las mañanas, lo cual es absurdo y hasta un poco asqueroso termina sudado por las tardes y después cuando está seco se va a dormir, lo bueno es que no apesta.
---Perdón, este... sólo iba hacia la sala -expliqué de inmediato mirando hacia abajo, donde sólo cubría una toalla, raudo levanté mi vista hacia sus ojos, había sido demasiado avergonzante.
---Sí no hay problema. -Habló en tono serio.
Intentamos seguir con nuestros caminos, pero sólo parecíamos bailar de un lado a otro.
---Tú primero -dijo deteniendo su movimiento de inmediato.
---¿Por qué? -Mi expresión reflejaba el desacuerdo.

---Bueno entonces yo lo hago -repuso y se fue hacia el cuarto.
---OK... -dije ya cuando el pasillo estaba solo.
Lo que me recordó, en realidad no iba a ir hacia ningun lado, sólo estaba en busca de su presencia, ahora con qué cara regresaría. Bueno, pues lo que hice fue hacerme tonto en el pasillo un rato, lo suficiente para pensar que en realidad había ido a la sala, pero las cosas no salieron bien, como siempre me pasa a mí.
Derek salió del cuarto, ya vestido, y yo seguía ahí, recargado en la pared del pasillo esperando. ¡Imbécil!
---Hola! -Saludé avergonzado.
El sólo se limitó a saludar y pasó de mí. Cuando iba a bajar las escaleras se detuvo en el tercer escalón.
---Oye yo... -empezó a hablar.
---¡Derek! -gritó su madre desde abajo, llamándolo para ayudarla en algo tal vez.
---Luego hablamos -dijo él y se fue.
Después hice lo de costumbre y nos fuimos a la escuela, otro dato que olvidé decir es que la madre de Derek nunca nos dejó de llevar a la escuela, su madre y él siempre platicaba en francés, yo nunca entiendo nada pero, a veces quiero creer que le habla de mí a su madre. Sé que es imposible.
Más tarde en la escuela ya no hablé con Malia nunca más, en cambio Aiden era muy platicado con ella desde aquel incidente. Y yo hablaba con Paige casi siempre.
---Ya nunca más te he visto con tu amigo Derek -dijo ella en media clase, y si ella hablaba a media clase sin esperar al receso, significaba que en realidad tenía curiosidad.
---¡Derek! -exclamé impactado por sus palabras curiosas, que por supuesto no esperaba.
---Sí él, ¿por qué ya no se hablan? -cuestionó, nos estábamos susurrando las cosas.
---Ah bueno, es que -"Tal vez porque nos besamos" pensé-, ya casi no nos vemos. -Éso también era muy cierto.
---Creí que vivían en la misma casa.
---Sí bueno, sí nos vemos, pero más bien, no tenemos la oportunidad de poder hablarnos, mi padre nos deja muchas tareas para el campo -expliqué sintiendo comezón en el cuerpo.

---Oh ya veo, debe ser un poco triste. -Parecía que en realidad lo lamentaba.
---Es incómodo...
Lamenté haber dicho eso.
---¿Por qué? -La curiosidad de esta chica no cesaba.
---Bueno, pues es que... -Apreté los labios y mire a varios lados pero no sabia que decir-. Tú sabes, el clima.
---¿Él clima? -interrogó volteado a verme.
---Sí sí sí, ¿alguna otra pregunta más?
---Sí ¿Crees que alguna vez lo llegue a conocer? -preguntó entrelanzando sus dedos y mirándolos también.
Recordé cómo se vieron en los días en los que llegaron a estar juntos por mi causa, que sólo fueron dos, pero sus miradas eran algo más. Sentí aversión.
---No lo creo -sentencié de mala gana, segundos después pude sentír como ella ponía mirada desanimada. Me sentí mal-. Bueno es que, él no es muy sociable, no tiene confianza con casi nadie, es serio, no sonrie, y mucho menos ríe... -Me perdí en mis recuerdos, de sus sonrisas hacia mí, que en realidad sólo fueron un regalo de cumpleaños mientras más lo pienso más lo creo, tal vez sabe que me gusta, pero entonces no actuaría tan relajado, tal vez también le gusto, quiso que su primer beso fuera conmigo, pero no lo sé, él ya no dijo nada más al respecto, tal vez sólo estaba experimentando, eso es muy muy descabellado para está época. Mis pensamientos son muy descabellados para la época.
---Ah... con razón, si se nota, es algo agresivo también supongo -comentó ya un poco más animada.
---Sí...
Después a la hora de salir me fui a casa -obviamente- y hoy era uno de esos días donde Derek salía más temprano que yo. Entre a la casa, y cerré la puerta con cuidado, no había nadie, de seguro estaban todos en el campo, bueno a excepción de Laura y Peter, los cuales iban al mercado a vender nuestros productos, y mi padre que estaba en la comisaría. Subí a mi habitación a dejar mi mochila, por ahora no había tarea de la escuela. Me acosté y me quede un rato ahí, pero después al bajar las escaleras escuché una conversación, me quedé a la mitad de ellas, la conversación provenía de la cocina, desde donde estaba nadie podía verme.
---Oye Derek tenemos que hablar -dijo su hermana, vaya al parecer si estaba.
---No hay nada de que hablar -contestó medio desanimado.
---¡Ya dime por qué estás tan triste! Te he notado ya una semana así -exclamó la chica.
---Porque quiero cambiarme de salón en la escuela -clamó Derek en un tono claro de inconformidad.
---Bueno pero por qué -insistía su hermana.
---Hay alguien que me gusta en ese salón -declaró él ahora usando un tono tímido. Me atreví a asomarme por la orilla del marco de la cocina.
---¡Oh! Vaya. ¿Quién es ella? -Y dale con "ella". Derek levantó la vista de inmediato. También pude observar que Laura llevaba ente brazos una caja de algo.
---Ella es... su nombre es Paige -confesó casi entre dientes-. Sí es ella. -Está vez fue más claro en su tono.
Lo sabía, lo sabía, lo sabía, esas miradas Sourwolf. ¡¡Entonces qué diablos con nuestros besos!! Me sentí un poco traicionado. He iba a evitar que Derek estuviera cerca de Paige a toda costa.

Continuará...

NOTA DE AUTOR: Bueno pues así, tarde pero aquí está. Ya casi termina la historia, bueno ya casi la término, al menos la versión para Wattpad.

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