Capitulo 18: Día de compras.

375 40 21
                                    

Narra ____

-Bueno, es que alguien...

Me llegó un mensaje.

-Espera.

Mire mi celular.

Mensaje de Texto

Eres muy chismosa. ¿No sabes guardar un secreto o que? Encima que te depósito dinero...

-¿Quién era?- preguntó Ariana.

-Nadie, mensajes de Telcel.- mentí.

-Por cierto, ¿Qué estabas por decirme acerca de alguien?

Mierda. Ahora tenía que darle una explicación razonable a Ariana. ¿Qué le iba a decir?

-Verás, es que alguien me quería vender unos muebles a un precio bastante bueno, solo comentarte.- dije y espere a que se lo creyera.

-Oh, ya veo. Pues bien, aprovecha la oferta.- dijo, al parecer se lo tragó todo, dirigió su vista a la carretera y no hablamos hasta que llegamos al centro comercial.

Ariana sacó su celular y llamó a Rubén.

Conversación Ariana y Rubén

-¿Dónde estás tío?- preguntó Ariana al teléfono.

-Frente al McDonalds, el que está al lado del Starbucks.

-Claro, como esta plaza es tan pequeña ahora te encuentro. Nos vemos en Zara.

-Oye, ¿dónde demonios se supone que queda eso?

-No sé, busca. ____ está impaciente por empezar las compras. Apúrate si la quieres ver probándose la ropa.- dijo y colgó.

Fin de la llamada telefónica.

-¡Oye...!- le regañé.

-Es la verdad, quiere verte mientras te pruebas la ropa... Y sospecho que tú quieres que te vea.- dijo y se fue caminando en dirección a unas escaleras eléctricas, claro, no sin antes dirigirme una sonrisa cómplice.

Era realmente molesta, traté de hacerme la indignada, pero sin embargo muy en el fondo sabía que ella tenía razón.

La seguí, pero antes de subir la escalera eléctrica alguien me tapó los ojos.
Entre en pánico. Me quedé inmóvil, ¿y si era aquella persona que me había estado mandando mensajes?

-¿Quién soy?- dijo la persona que tapaba mis ojos tratando de modificar su voz. Era Rubén.

-Se que eres tú. Suéltame.- dije riendo.

-No sé de quién me hablas.- dijo aún con esa voz grave que trataba de hacer.

-Rubén.- dije en un suspiro.

Al instante me soltó y me miró.

-Al parecer no soy bueno en este juego.- dijo y sonrío.

-Te hace falta practica.- le dije y me adelante en las escaleras.

Al subir, justo en frente, estaba la tienda. Ariana se estaba probando un vestido cuando llegamos.
Rubén se sentó en un sillón y Ariana y yo fuimos directo a ver la ropa.

Me mostró una blusa roja con lentejuela, pero odio severamente cualquier cosa que brille.
También intentó con un vestido amarillo sin mangas, pero odio el color amarillo.
Al final ella se fue a buscar su ropa y yo la mía.
Elegí una blusa negra con estampado de un atardecer en alguna playa, una falda negra, una mini blusa rosa claro, varios shorts, una chaqueta café, una blusa azul de manga larga, etc.
Ya había acabado de comprar, hasta que Rubén se me acercó.

Soy... ¿Un fantasma?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora