Bueno , que les puedo decir , solo soy hijo de un herrero , solo mirenme, era obvio que no podía ayudarla, sabía que me metería en problemas pero...
-¡Dejala en paz, imbécil! - no sé porque lo dije.
-¿Te refieres a mí, mocoso? - lo dijo en tono amenazante.
-¡Claro que me refiero a ti, viejo! - estaba asustado lo admito, pero no podía dejar que se la llevara ese vejestorio. Estaba tan asustado que hasta las piernas me temblaban, no paraban de hacerlo hasta que vi el rostro de la chica. Solo había una palabra indicada para poder describirla: "Ángel". Ella era tan hermosa que se asemejaba a un ángel y todo aquel que la viera hubiera opinado lo mismo que yo, pero había algo en su rostro que mostraba cierto miedo e inseguridad, lo más probable es que estuviera asustada y pues, no la puedo culpar, digo, ¿Quien no estaría asustado si te estuviera agarrando un viejo con aspecto de ser un pervertido sabiendo a donde y que diablos te fuera a hacer?
En ese instante me di cuenta que no podía dejarla sola , así que me armé de valor y me enfrenté al viejo que estaba muerto de rabia por haberlo insultado.
-¿Así que te quieres dar de valiente, eh?
-¡Solo déjala en paz! - le ordené
-¡Pues oblígame! - acto seguido aparecieron 3 hombres para bloquearme el paso hacia él.
Tenía que pelear, no podía esperar a que alguien venga y nos salve, porque sabía que eso no iba a suceder.
-¡Toma esto! - me dijo el 1er hombre al momento en que me tiraba un puñete y me mandaba a estrellarme contra unas cajas.
-¡Ah! - grité de dolor.
Tendrán que hacer mas que eso para dejarme fuera de combate , me levanté y le tiré un puñete en su estómago , seguido de otro en su cara que hizo que se estrellara contra el suelo.
Nunca antes había peleado con alguien, pero al parecer se me daba muy bien o al menos lo suficiente bien para enfrentarme contra ellos.
-¡Maldito! - me gritaron los dos hombres que quedaban en pie.
Vinieron con todo contra mí pero bloquee su golpe y se los devolví , dejándolos tirados en el suelo.
-¡Esta bien, me retiraré por esta vez , pero piensa contra quien te estás metiendo, mocoso! - dijo un poco asustado y se retiró con los hombres.
Como si me importara quien era ese viejo, aunque tal vez regrese por venganza, pero eso no tenía importancia ahora. Lo que importaba es que ella estuviera a salvo. Felizmente se fueron , porque ya no tenía fuerzas para seguir peleando, agotado me tiré al suelo para recuperar energías.
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A Través De Mis Miedos
Random«Está bien tener miedos, porque son pruebas de que estás vivo; ellos no son algo malo, más bien nos ayudan a crecer y a superar nuestros límites, así que... ¿Por qué debería de rendirme ante ti? En realidad te agradezco, porque superaré este miedo y...